As¨ª cambiar¨ªa el mundo si el hombre tuviera la menstruaci¨®n

Son estampas que se pueden ver en la ¨²ltima campa?a de WaterAid #ifmenhadperiod: dos hombres que coinciden en la fotocopiadora de la oficina y hablan de la consistencia de su flujo menstrual; o comentaristas deportivos hablando de si los goleadores est¨¢n en el mejor momento del mes para marcar... La campa?a busca llamar la atenci¨®n sobre la necesidad de que haya ba?os a disposici¨®n de las mujeres menstruantes.

Hay 1.250 millones de mujeres sin acceso a condiciones sanitarias ¨®ptimas durante el periodo, en un mundo en el que pese a los 800 millones de mujeres que las tienen, la regla a¨²n es un tab¨².

Planteamos esta cuesti¨®n: qu¨¦ pasar¨ªa si los hombres tuviesen la menstruaci¨®n, c¨®mo cambiar¨ªa el mundo. Mucho. Esta es la conclusi¨®n...

Si ellos tuvieran la regla el s¨ªndrome premenstrual estar¨ªa subvencionado con vales gratis para spas y dosis masivas de ibuprofeno. Y los tampax se regalar¨ªan en la Seguridad Social¡±

Isabel Coixet, directora de cine

La directora de cine Isabel Coixet est¨¢ segura de que si los hombres la tuvieran,¡°hace tiempo que el s¨ªndrome premenstrual estar¨ªa subvencionado con vales gratis para spas y dosis masivas de ibuprofeno. Y los tampax se regalar¨ªan en la Seguridad Social¡±. O al menos, ¡°el IVA ser¨ªa ultra reducido¡±, opina Laura Gaelx, periodista madrile?a y una de las integrantes del colectivo Sangre Fucsia, promotor de la radio feminista del mismo nombre. "Si los hombres tuviesen la regla, el estatuto de los trabajadores recoger¨ªa el derecho a disfrutar tres d¨ªas al mes de libre disposici¨®n".

2. "Y JEOVAH SE APARECI? ANTE MOIS?S MIENTRAS ESTE MENSTRUABA"

El relato cultural cambiar¨ªa de cabo a rabo. Laura Gaelx cree que los libros sagrados de todas las religiones alabar¨ªan esos d¨ªas como los m¨¢s propicios para comunicarse con la divinidad. Y las santas escrituras ser¨ªan algo as¨ª como: "Y Jeovah se apareci¨® ante Mois¨¦s mientras ¨¦ste menstruaba". O: "En verdad os digo que no hay nada m¨¢s puro antes los ojos de Dios que un hombre menstruante". El canon literario, contin¨²a la feminista, "incluir¨ªa poemas ¨¦picos sobre la sangre menstrual e intimistas reflexiones compuestas durante esos d¨ªas. En lugar de con padres ausentes del partido de b¨¦isbol tendr¨ªamos miles de pel¨ªculas en torno al rito de paso menstrual".

Messi y Cristiano Ronaldo anunciar¨ªan tampones con rostros aliviados. Y la copa menstrual dar¨ªa pie a todo tipo de chistes sobre ¡°Copa, Liga y Champions¡±

3. LA PEL?CULA DE TERROR 'CARRIE' SER?A PROTAGONIZADA POR UN CHICO Y SE LLAMAR?A 'HARRY'

Recordemos que en Carrie todo se desencadena cuando a la protagonista le viene la regla en el ba?o del colegio y sus amigas se burlan de ella y acaban nombr¨¢ndola reina de la promoci¨®n solo para tirarle encima un cubo de sangre de cerdo durante la fiesta. Ahora bien, con los hombres ¨Cel 90% de los presidentes del mundo lo son¨C en posesi¨®n de ella, muy probablemente la regla ser¨ªa visible por ley, ya no entrar¨ªa en el ¨¢mbito de lo tab¨², ni estar¨ªa asociado al estigma, a la verg¨¹enza, ni al castigo. Y menos al terror. Ergo, rodar una pel¨ªcula como Carrie no ser¨ªa una buena idea, y menos un remake tan malo.

4. MESSI Y RONALDO HAR?AN ANUNCIOS DE TAMPONES

Mis ataques de mala leche pueden hacer miserable a toda la gente que me rodea. Pero si tuviese la regla, al menos tendr¨ªa una raz¨®n para ello" Santiago Roncagliolo, escritor

Casi un hecho es que se har¨ªan compresas con estampados del escudo del Bar?a y el Madrid. Futbolistas como Messi o Cristiano Ronaldo anunciar¨ªan tampones con rostros aliviados. La copa menstrual dar¨ªa pie a todo tipo de chistes sobre ¡°Copa, Liga y Champions¡±. Y, quiz¨¢, hasta existir¨ªan mujeres capaces de comprar en Internet calzoncillos manchados de sangre por puro fetichismo.

5. LOS HOMBRES JUSTIFICAR?AN SU MALA LECHE

Hay t¨ªos que ver¨ªan la regla como una forma (positiva) de justificarse a s¨ª mismos. El escritor peruano Santiago Roncagliolo, por ejemplo, admite que al menstruar tendr¨ªa un motivo para explicar su legendario mal humor. "Mis ataques de mala leche pueden hacer miserable a toda la gente que me rodea. Pero si tuviese la regla, al menos tendr¨ªa una raz¨®n para ello.Y ciertas fechas predecibles en las que encerrarme en un armario. El ¨²nico problema es que soy muy distra¨ªdo y definitivamente me olvidar¨ªa de comprar compresas, de modo que llevar¨ªa mis manchas y mi olor a todas partes. Total, que ser¨ªa una compa?¨ªa muy poco apetecible. Admiro profundamente a todos los hombres que puedan llevar su menstruaci¨®n con dignidad". Al cierre de esta edici¨®n, el escritor Rodrigo Fres¨¢n, que no sinti¨® que pudiera aportar nada a este art¨ªculo, dijo saber por qu¨¦ se despertar¨ªa gritando a las 3 de la madrugara.

6. LA REGLA MASCULINA SER?A M?S LARGA

En caso de que hombres y mujeres la tuvi¨¦ramos y comparti¨¦ramos ese trance, se dar¨ªan situaciones muy curiosas. Gracias a la Luna las parejas que viven juntas sincronizar¨ªan sus periodos y no faltar¨ªa el d¨ªa en que ¨¦l nos dijera saliendo del cine: ¡°Mi amor, ?tienes un tampax?¡±. Preguntamos a la modelo Alba Galocha sobre el tema: ¡°No estoy segura de querer imaginarme a un hombre y a una mujer con la regla. Me hace pensar que no nos aguantar¨ªamos, aunque¡­ a lo mejor ellos nos comprender¨ªan mucho m¨¢s¡±. La cineasta Isabel Coixet es m¨¢s contundente: ¡°Seguro que los hombres se las arreglar¨ªan para quejarse m¨¢s y dar m¨¢s la lata. Porque seguro que la regla masculina ser¨ªa m¨¢s larga¡­¡±.

7. EXISTIR?A "LA FLAUTA ROJA"

El sexo oral durante la menstruaci¨®n tiene infinidad de nombres, entre ellos el conocido ¡°beso del payaso¡±. Si fueran ellos los que menstruaran, ?c¨®mo se llamar¨ªa? ?La flauta roja?, ?el chupachup de fresa? Nuestra c¨®mplice de predicciones, Laura Gaelx, profetiza que si los hombres tuviesen la regla: "Conocer¨ªan el inmenso placer de hacer el amor con ella".

8. MANCHAR?AN LAS S?BANAS

Enfrentados cada mes a la visi¨®n de su propio l¨ªquido oscuro ¨Ca veces manchando las s¨¢banas de la cama en la que duermen con alguien; otras su propia ropa (una huella en el pantal¨®n caqui de explorador, otra en el de chaqu¨¦)¨C acaso habr¨ªa menos guerras en el mundo. O todo lo contrario, y una vez al mes, tendr¨ªamos un pico en las estad¨ªsticas de violencia machista. En cualquier caso, la regla les servir¨ªa para victimizarse (m¨¢s).

9. HIJO M?O, YA ERES UN HOMBRECITO

Un buen d¨ªa los hijos ense?ar¨ªan escandalizados a sus padres sus calzoncillitos mancillados de cu¨¢gulos bermell¨®n. Pap¨¢ y el ni?o tendr¨ªan una conversaci¨®n ¨Cla gran conversaci¨®n¨C, llena de intimidad y confesiones, que acabar¨ªa con una sonora declaraci¨®n entre l¨¢grimas: "Hijo m¨ªo, ya eres un todo un hombrecito". Este rito de iniciaci¨®n cambiar¨ªa profundamente las relaciones entre padres e hijos. No volver¨ªan a saludarse nunca m¨¢s con un apret¨®n de manos.

10. Y ELLOS TENDR?AN LA POSIBILIDAD DE ENGENDRAR VIDA

Y vendr¨ªan, claro, las preguntas filos¨®ficas. ?Si los hombres menstruaran ya no ser¨ªan hombres? ?Qu¨¦ ser¨ªan? ?Mujeres? ?Otra raza de ser humano? ¡°Eso significar¨ªa que los hombres tendr¨ªamos la habilidad de engendrar vida. Cosa con la que yo estar¨ªa encantado y solucionar¨ªa de un plumazo mis ansias de ser padre¡±, anuncia el director de cine Daniel S¨¢nchez Ar¨¦valo. La modelo Alba Galocha apuesta: ¡°Los t¨ªos ser¨ªan m¨¢s independientes, tendr¨ªan menos mamitis¡­¡±. Aunque es probable que un simple c¨®lico menstrual los llevar¨ªa al hospital. A esta utop¨ªa, la periodista especializada en c¨®mic y feminismo Elisa G. Mc Causland prefiere oponer otra: ¡°Ser¨ªa interesante que tod@s fu¨¦ramos un poco 'Orlando', o que la tecnolog¨ªa nos dejara transitar todas las posibilidades durante la existencia. Ser¨ªa delirante una biolog¨ªa en modo aleatorio, impredecible y cambiante a lo largo de la vida¡±.

Conclusi¨®n: definitivamente, s¨ª, el mundo cambiar¨ªa mucho si los hombres tuvieran la menstruaci¨®n. Como esto no es posible, empecemos preocup¨¢ndonos porque absolutamente todas las mujeres tengan acceso a condiciones sanitarias durante el periodo. Y, luego, todo lo dem¨¢s...