La ciencia tras 40 a?os de libertad
La recuperaci¨®n de la ciencia espa?ola requiere un Pacto de Estado por la Ciencia y necesita una financiaci¨®n que llegue al menos al 2% del PIB
El fin de la dictadura de Franco, que hab¨ªa supuesto un evidente retroceso de la ciencia espa?ola, coincidi¨® en 1975 con dos peque?os hitos que ahora resulta conmovedor recordar: la vuelta del Premio Nobel Severo Ochoa desde Estados Unidos, y con ella la fundaci¨®n del Centro de Biolog¨ªa Molecular, y la creaci¨®n del Instituto Astrof¨ªsico de Canarias, ambos referencias internacionales en sus disciplinas. Por supuesto continuaron su labor algunas instituciones de car¨¢cter cient¨ªfico-tecnol¨®gico que proced¨ªan del per¨ªodo anterior, como el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), la Junta de Energ¨ªa Nuclear (JEN) o el Instituto Nacional de T¨¦cnica Aeroespacial (INTA), vinculadas en alg¨²n caso a intereses estrat¨¦gicos internacionales. Continuaba en activo una parte de los investigadores ligados al r¨¦gimen franquista, pero ya aparec¨ªan destacados cient¨ªficos en el sistema, algunos de los cuales suscribieron en 1980 un Manifiesto de los Cient¨ªficos Espa?oles quej¨¢ndose de la situaci¨®n de la ciencia espa?ola. Otros viv¨ªan ya muy mayores en el exilio, especialmente en M¨¦xico donde hab¨ªan editado hasta entonces la revista Ciencia, o en el exilio interior, depurados por sus actividades republicanas.
La Constituci¨®n de 1978 se?alaba que ¡°los poderes p¨²blicos promover¨¢n la ciencia y la investigaci¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica en beneficio del inter¨¦s general¡±, todo un s¨ªmbolo del cambio democr¨¢tico y la aspiraci¨®n a conseguir una ciencia moderna en Espa?a. Un a?o m¨¢s tarde el presidente Adolfo Su¨¢rez creaba el Ministerio de Investigaci¨®n y Universidades para acometer el reto de la reforma de la investigaci¨®n universitaria y del CSIC, en un momento en el que la inversi¨®n en ciencia era de alrededor del 0.5% del PIB, muy alejada de otros pa¨ªses europeos.
La llegada al poder de Felipe Gonz¨¢lez en 1982 supuso un nuevo impulso para la planificaci¨®n de la investigaci¨®n cient¨ªfica. La Ley de Reforma Universitaria de 1983, la reorganizaci¨®n y creaci¨®n de nuevos institutos de investigaci¨®n en el CSIC, tres a?os m¨¢s tarde la Ley General de Sanidad y la Ley de la Ciencia, y en 1988 la aprobaci¨®n del primer Plan Nacional de I+D fueron clave para la organizaci¨®n de la ciencia espa?ola. El PP logr¨® la creaci¨®n en 1998 del Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas y del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares un a?o m¨¢s tarde, dirigidos por Mariano Barbacid y Valent¨ªn Fuster, dos cient¨ªficos recuperados del extranjero. Adem¨¢s intent¨® relanzar su actividad pol¨ªtico-cient¨ªfica con la creaci¨®n en el a?o 2000 del Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa y la descentralizaci¨®n auton¨®mica. El gobierno del PSOE, al reestructurar las responsabilidades de la investigaci¨®n en Espa?a en su nuevo mandato iniciado en 2004 con Rodr¨ªguez Zapatero, impuls¨® el Programa Ingenio 2010 con la idea de intentar alcanzar el 2% del PIB en el a?o 2010. La llegada de la crisis econ¨®mica en los ¨²ltimos a?os del Gobierno socialista y la nueva pol¨ªtica cient¨ªfica del gobierno de Rajoy ha conducido a una ca¨ªda del gasto hasta los niveles de 2007, una reducci¨®n notable en el n¨²mero de empresas con actividad en I+D y a una p¨¦rdida de personal cient¨ªfico. Por otra parte, en el sistema p¨²blico seguimos sin una Agencia Estatal de Investigaci¨®n y el esfuerzo en la inversi¨®n en I+D sigue siendo desigual, estando liderado por el Pa¨ªs Vasco, Navarra, Madrid y Catalu?a.
Espa?a ha destacado en estos ¨²ltimos a?os en biotecnolog¨ªa, nanotecnolog¨ªas y tecnolog¨ªas relacionadas con el medio ambiente, adem¨¢s de en paleoantropolog¨ªa con el proyecto de Atapuerca liderado por Arsuaga, Carbonell y Berm¨²dez de Castro, en qu¨ªmica con la destacada figura de Avelino Corma, en trasplantes de ¨®rganos y en nuevos materiales, aunque en la Estrategia Espa?ola dise?ada hasta el 2020 aparecen otras ¨¢reas como la salud, los alimentos, la investigaci¨®n marina, la energ¨ªa, los sistemas de transporte, el cambio clim¨¢tico, la econom¨ªa y la sociedad digital, los cambios sociales, etc., y se echan en falta objetivos en el ¨¢rea de las humanidades, cuyos conocimientos dan sentido a nuestra propia actividad vital. Es necesario sensibilizar a la sociedad espa?ola sobre la importancia de la ciencia para el crecimiento econ¨®mico, la calidad de vida y la felicidad, con programas de cultura cient¨ªfica y de formaci¨®n. En este sentido considero que habr¨ªa que plantearse seriamente la creaci¨®n de un Museo Cajal de la ciencia espa?ola que responda a nuestro nivel de desarrollo cultural, como sucede con nuestros grandes museos de arte.
La recuperaci¨®n de la ciencia espa?ola requiere un Pacto de Estado por la Ciencia y necesita una financiaci¨®n que llegue al menos al 2% del PIB, que permita la participaci¨®n en grandes instalaciones y proyectos internacionales. Es necesario un incremento de los recursos humanos y de su movilidad, que pueda incluir la recuperaci¨®n del talento ¡°perdido¡± por la emigraci¨®n cient¨ªfica, tanto la junior -los de la supuesta ¡°leyenda urbana¡±- como la senior, de la que forman parte cient¨ªficos como Juan Ignacio Cirac, Carlos Duarte, Jordi Bascompte, Juan Carlos Izpis¨²a, etc. Finalmente hay que buscar una buena formaci¨®n predoctoral y posdoctoral a trav¨¦s de una carrera cient¨ªfica, y establecer un sistema de organizaci¨®n cient¨ªfica abierto, democr¨¢tico, con igualdad de g¨¦nero, excelente, atractivo y competitivo internacionalmente, con alianzas estrat¨¦gicas con la UE y terceros pa¨ªses, no burocratizado y sujeto a los vaivenes pol¨ªticos como sucede actualmente en algunos organismos como el CSIC. Espa?a todav¨ªa espera a su nuevo Premio Nobel en ciencia, que seguro ir¨¢ asociado al despegue definitivo de su sistema de investigaci¨®n, desarrollo e innovaci¨®n.
Miguel ?ngel Puig-Samper es profesor de investigaci¨®n del Instituto de Historia del CSIC y coordin¨® el libro Tiempos de investigaci¨®n. JAE/CSIC Cien a?os de ciencia en Espa?a (editorial CSIC).
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