La plaza convertida en escenario
En la comuna de B¨¹rchen, en el cant¨®n suizo de Valais, al sur del pa¨ªs, el paisaje alpino sobre el valle del R¨®dano es tan sobrecogedor que el pueblo viv¨ªa encerrado en s¨ª mismo contemplando la naturaleza circundante y trabajando en una industria derivada del propio paisaje, un aserradero. Con el tiempo incluso un lugar tan buc¨®lico necesit¨® una puesta al d¨ªa. La llegada de los excursionistas cambi¨® la naturaleza del pueblo. Cerraron el aserradero y la mayor¨ªa de los habitantes pas¨® de talar los abedules a contemplarlos. As¨ª estaba el lugar cuando convocaron un concurso para realizar una plaza p¨²blica y un hotel privado. La idea era recuperar con la obra el trabajo del viejo aserradero y el arquitecto tinerfe?o Fernando Menis gan¨® el concurso con una propuesta a corto y largo plazo que, explica, ¡°ten¨ªa en cuenta las necesidades privadas y p¨²blicas de lugar¡±.
Menis cuenta que esta plaza, que es a la vez antesala, lugar de encuentro y escenario, es el primer paso para la transformaci¨®n del pueblo. La idea es la del foro cl¨¢sico: un lugar para reunirse, para encontrarse, para presenciar espect¨¢culos y tambi¨¦n para recibir a los visitantes. As¨ª, esta es una plaza que se ha hecho un hueco en medio de las viviendas, un espacio en el que la propia topograf¨ªa del lugar parece querer entrar en el casco urbano. Pero es tambi¨¦n el principio de una transformaci¨®n. La de un pueblo de monta?a en un lugar tur¨ªstico (con las ventajas y los inconvenientes que eso pueda comportar) y la de una poblaci¨®n desempleada en un pueblo contento tras haber logrado reabrir la peque?a industria del lugar: el aserradero.
As¨ª las cosas, no sorprende que Menis hable de genius loci. La naturaleza est¨¢ presente conceptual y f¨ªsicamente. Tambi¨¦n, por supuesto, la madera de abedul ha aparecido en esta plaza p¨²blica que es a la vez, la entrada en el pueblo y su mirador sobre el valle. Es tambi¨¦n un primer paso de cara a su transformaci¨®n. Fernando Menis explica que ¡°la secuencia de acceso (casi procesional) desde la parte de debajo de la comuna hacia arriba cuenta la historia de una manera m¨ªstica¡±. El camino se ve a veces estrechado -comprimido por el efecto de los vol¨²menes de las viviendas- y luego se descomprime en la plaza como antesala de las vistas al paisaje.
La que se ha inaugurado es la primera de una serie de intervenciones destinadas a crear plazas que funcionen como lugares de encuentro y como transici¨®n entre el espacio urbano y el de la naturaleza. Esta primera obra ofrece adem¨¢s, la posibilidad de un escenario p¨²blico, con grandes piezas de madera de abedul convertidas en gradas.
El uso de la madera no es caprichoso. Emplearla como material principal ha sido lo que ha permitido hacer lo que la mayor¨ªa de los habitantes ambicionaba: reabrir el aserradero, ayudando a generar empleo en B¨¹rchen. Hace unas semanas, durante la inauguraci¨®n, la plaza demostr¨® su capacidad como escenario. La presencia de los habitantes, la de la banda, la de los pol¨ªticos y la de los arquitectos confirmaba que la arquitectura m¨¢s pertinente es la que nace de escuchar todas las ambiciones y es capaz de llegar a acuerdos.
Precio por metro cuadrado seg¨²n arquitectos: 177euros/m2
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