Cambio profundo

La victoria de Mauricio Macri al frente de una coalici¨®n de centroderecha que incluye a la hist¨®rica Uni¨®n C¨ªvica Radical de Raul Alfons¨ªn sobre el candidato del peronismo oficialista, Daniel Scioli, termina con 12 a?os de kirchnerismo en la Casa Rosada. Pero, sobre todo, supone una decidida voluntad de cambio por parte de la sociedad argentina. El pa¨ªs lleva a?os con un dr¨¢stico frenazo a su crecimiento y la inflaci¨®n es galopante, pero los males de Argentina no son solo econ¨®micos; tienen tambi¨¦n que ver con una extrema polarizaci¨®n pol¨ªtica, que obedece a las formas populistas con las que ha gobernado Cristina Fern¨¢ndez, y con una cada vez mayor irrelevancia en el tablero regional, por el af¨¢n de la presidenta de vincularse al proyecto que ha capitalizado Venezuela en los ¨²ltimos a?os.

Los argentinos han decidido cambiar y han roto viejos moldes: es la primera vez que se libra de verdad una elecci¨®n en la segunda vuelta, y es la primera vez que se impone el l¨ªder de un partido minoritario, Propuesta Republicana (PRO), fundado hace solo una d¨¦cada y que llega con af¨¢n modernizador al tiempo que defiende posturas liberales frente al Gobierno anterior, que hizo del proteccionismo extremo una de sus se?as de identidad.

Macri, que finalmente se impuso a Scioli solo por tres puntos de diferencia frente a las expectativas que se levantaron inicialmente, mostr¨® ayer que su mayor prioridad es la de combatir la crisis econ¨®mica por la que pasa Argentina. Para hacerlo anunci¨® un Gabinete con seis carteras orientadas a este fin en el dif¨ªcil contexto internacional de ca¨ªda de precios de las materias primas. Pero Macri podr¨ªa tener que enfrentarse a una situaci¨®n m¨¢s delicada a¨²n porque las reservas del Banco Central han ca¨ªdo de manera notable y quiz¨¢ deba articular medidas de choque frente a una oposici¨®n que no va a darle cuartel, sabiendo que parte de su ¨¦xito procede de muchos votantes frustrados con el peronismo m¨¢s radical y que apostaron por Sergio Massa en la primera vuelta de las elecciones.

La otra pata en la que el presidente electo va a apoyarse para romper con la din¨¢mica de confrontaci¨®n que instal¨® su antecesora es la de recuperar la voz de Argentina en un continente en el que la marca bolivariana atraviesa horas bajas. Ayer Macri afirm¨® que en la pr¨®xima cumbre de Mercosur pedir¨¢ que se aplique la cl¨¢usula democr¨¢tica contra Venezuela, porque las denuncias de los atropellos que all¨ª se est¨¢n produciendo contra la oposici¨®n ¡°son claras, son contundentes, no son un invento¡±. Toma as¨ª, y con urgencia, la bandera de otra transformaci¨®n, la que pretende darle la vuelta al ajado proyecto del socialismo del siglo XXI.

Los electores han elegido un proyecto que promete modernidad frente a las maneras err¨¢ticas de Cristina Fern¨¢ndez. Lo que est¨¢ por ver es c¨®mo va a digerir el peronismo esta derrota. Macri ha avisado que quiere gobernar para todos, pero no va a tenerlo f¨¢cil en una sociedad tan polarizada y en la que una parte importante no ve con buenos ojos sus promesas liberalizadoras. Su ¨¦xito va a depender de la habilidad para conquistar consensos en torno a unas pol¨ªticas que van a ser inevitablemente conflictivas.