La historia de Grecia vista por un rey sin corona

A Constantino de Grecia (Atenas, 1940) le despojaron de todas sus dignidades mon¨¢rquicas una vez el pueblo heleno decidi¨®, en un refer¨¦ndum en 1974, que su pa¨ªs ser¨ªa una Rep¨²blica. As¨ª que las memorias del exmonarca y hermano de la Reina Sofia no pod¨ªan llamarse de otra forma: Sin t¨ªtulo, un chiste sobre su particular situaci¨®n una vez que el paso del tiempo le permite mirar atr¨¢s sin rencor, en particular hacia la agitada vida de la Casa de Gl¨¹cksburg en Grecia.

"Cuando has estado en el centro de la historia de una naci¨®n durante una era es tu deber hablar cuando llegue el momento", escribe Constantino en el prefacio de sus memorias. En contraposici¨®n con el boato que caracteriz¨® a la monarqu¨ªa helena, el antiguo rey ha elegido un formato m¨¢s bien popular para su distribuci¨®n: los fasc¨ªculos. El primero de tres tomos en que se dividen las casi 1.100 p¨¢ginas se vendi¨® el pasado domingo junto al diario To Vima y en unas horas todas las copias se agotaron.

Las memorias no han sido en realidad escritas por Constantino, sino recopiladas por los periodistas Yorgos Malujos y Yannis Diamantis quienes durante tres a?os registraron de forma "minuciosa, casi d¨ªa a d¨ªa, los recuerdos, pensamientos y opiniones" del exmonarca para luego ponerlos negro sobre blanco. "Se trata de uno de los testimonios hist¨®ricos m¨¢s importantes de nuestro tiempo, que sin duda se convertir¨¢ en obra de referencia de la historiograf¨ªa del futuro", ha dicho Malujos.

El tomo ya publicado comienza en 1863, con el acceso de su bisabuelo, el dan¨¦s Jorge I, al trono de Grecia, por imposici¨®n de los grandes poderes de la ¨¦poca, quienes no aceptaron el plebiscito por el que los helenos ped¨ªan que Alberto I, segundo v¨¢stago de la reina Victoria de Gran Breta?a, fuese su nuevo Jefe de Estado. En estas p¨¢ginas, Constantino desgrana la historia de Grecia a trav¨¦s de los ojos de la realeza, desde la Primera Guerra Mundial al exilio en Alejandr¨ªa durante la ocupaci¨®n nazi hasta la muerte de su padre, Pablo I, en 1964.

Pero no todo es historia con may¨²sculas en este libro, ya que trufa sus vivencias y las de sus antepasados con an¨¦cdotas como la ocurrida durante su primer viaje a EE UU, donde sufri¨® un peque?o accidente de coche: "El problema es que ni yo ni Sime¨®n ten¨ªamos nuestros documentos de identidad con nosotros ¡ªse lee en las memorias¡ª. El polic¨ªa que lleg¨® nos pregunt¨®:

-?C¨®mo te llamas, chaval?

-Constantino

-?Apellido?

-No tengo. Soy el pr¨ªncipe de Grecia.

-?Y quien es el otro tipo?

-Mi primo, pero de hecho es el Rey de Bulgaria".?

Como era de esperar, tras este di¨¢logo surrealista, ambos terminaron en comisar¨ªa, de donde salieron cuando el Departamento de Estado confirm¨® que, en realidad, s¨ª eran quienes dec¨ªan.

M¨¢s enjundia pol¨ªtica se prev¨¦ para el segundo tomo ¡ªque se publicar¨¢ este fin de semana¡ª ya que ha prometido "contarlo todo" sobre su breve reinado, entre 1964 y 1967. Ese ¨²ltimo a?o fue en el que un grupo de ultraderechistas coroneles griegos dio un golpe de estado, refrendado por el propio Constantino. Algo de lo que el rey se arrepentir¨ªa, por lo que unos meses intentar¨ªa un contragolpe que, tras fracasar, supuso su deposici¨®n y sustituci¨®n a la cabeza del Estado por el dictador Yeoryios Papad¨®pulos. El tercer volumen abordar¨¢ su exilio, despu¨¦s de que, una vez derrotada la dictadura, los griegos decidiesen poner fin a la monarqu¨ªa en un plebiscito y, posteriormente, el gobierno del socialista Andreas Papandreu aprobase una ley para despojarle de la nacionalidad griega, sus t¨ªtulos y propiedades.

Hace dos a?os, Constantino decidi¨® regresar finalmente a Grecia junto a su hijo el pr¨ªncipe Nicol¨¢s ¡ªdicen algunas lenguas que debido a los altos precios de la vivienda en Londres, donde resid¨ªa¡ª y se instal¨® en la exclusiva localidad costera de Porto Jeli. Incluso lanz¨® algunos mensajes buscando la reconciliaci¨®n, por ejemplo pidiendo "una oportunidad" para el primer ministro izquierdista Alexis Tsipras cuando este fue elegido a principios de a?o. Pero muchos griegos siguen sin perdonar los pasadas interferencias de Palacio en la pol¨ªtica del pa¨ªs ¡ªlos tejemanejes de Constantino provocaron la ca¨ªda de un gobierno progresista en 1965¡ª o el apoyo dado por la Familia Real a diversas dictaduras que sufri¨® Grecia. De hecho, el peri¨®dico izquierdista Efimerida ton Syntakton denuncia las memorias de Constantino como un "simple intento de lavado de cara" de la monarqu¨ªa.