A Ciudadanos y Podemos siempre les quedar¨¢ La 2
Es sorprendente que Albert Rivera y Pablo Iglesias vayan a disfrutar del mismo tiempo que el Partido Animalista contra el Maltrato Animal (PACMA) y Recortes Cero
Una catarata de v¨ªdeos cargados de promesas est¨¢ a punto de inundar la televisi¨®n. La ley establece que los partidos tienen derecho a bloques de propaganda electoral en los medios de comunicaci¨®n p¨²blicos. El reparto depende del n¨²mero de esca?os obtenido en los comicios equivalentes anteriores. La proporcionalidad manda. A m¨¢s diputados, m¨¢s cu?as gratis. Siguiendo esta ecuaci¨®n, en la campa?a para las legislativas del 20 de diciembre, PP y PSOE disfrutar¨¢n en el circuito nacional de TVE de 90 anuncios de 30 segundos, respectivamente. Coalici¨®n Unidad Popular tendr¨¢ 60, y UPyD 30. En total, los cuatro partidos aparecer¨¢n durante 71 minutos en La 1 y 64 en La 2.
Para evitar que estas emisiones sean un coto cerrado se abren espacios a los partidos extraparlamentarios que han presentado listas en m¨¢s del 75% de las circunscripciones. En esta situaci¨®n est¨¢n las dos fuerzas emergentes, Ciudadanos y Podemos, que no concurrieron a las elecciones generales de 2011 pero a las que las encuestas sit¨²an entre las cuatro listas m¨¢s votadas.
Lo sorprendente no es que Albert Rivera y Pablo Iglesias queden relegados a La 2 (la cadena con menos audiencia), sino que vayan a disfrutar del mismo tiempo que el Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (PACMA) y Recortes Cero, que bien podr¨ªan obtener cero esca?os. Con el aval de la Junta Electoral Central, la corporaci¨®n estatal ha metido en el mismo saco a las cuatro candidaturas. Para cada una de ellas, TVE habilitar¨¢ 20 anuncios de medio minuto, aunque resulta evidente que mientras Podemos y Ciudadanos est¨¢n en disposici¨®n de gobernar, es dudoso que las otras dos listas consigan siquiera un esca?o en el Congreso de los Diputados. Un desequilibrio de tal naturaleza pone de relieve lo obsoleto de un sistema que distribuye la propaganda pol¨ªtica dando la espalda a la realidad social.
Fuera de toda l¨®gica est¨¢ tambi¨¦n la cobertura informativa de la campa?a en la televisi¨®n p¨²blica, seg¨²n la cual cada partido tendr¨¢ en los telediarios un tiempo proporcional a los resultados obtenidos en los comicios de 2011. Los periodistas de TVE han expresado su desacuerdo con tan peculiar vara de medir las noticias. ¡°No es el mero reparto de tiempos lo que garantiza el pluralismo, la neutralidad y la igualdad, sino los criterios profesionales¡±, dicen. Y plantean que con la exigencia de un orden y una duraci¨®n predeterminado se vulneran los principios democr¨¢ticos y se vapulea el derecho a elaborar una informaci¨®n sin injerencias externas.
Atendiendo a la instrucci¨®n que la Junta aprob¨® en primavera, TVE dar¨¢ tambi¨¦n acceso a Podemos y Ciudadanos, pero en un segundo plano. Es obvio que al debutar en unos comicios legislativos tienen consideraci¨®n de extraparlamentarios. Sin embargo, como apuntan los periodistas de la televisi¨®n p¨²blica, poseen la condici¨®n de ¡°grupo pol¨ªtico significativo¡±. Los espectadores tienen derecho a conocer sus promesas.
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