Infancia y cambio clim¨¢tico

Estos d¨ªas se discute en Par¨ªs un acuerdo fundamental que tendr¨¢ repercusi¨®n en la vida de cada uno de nosotros y particularmente, en la de la pr¨®xima generaci¨®n. Estamos ante uno de los mayores desaf¨ªos de nuestro tiempo y, si no somos capaces de enfrentar el problema, sufriremos devastadoras consecuencias que debilitar¨¢n la capacidad de todos los pa¨ªses para lograr un desarrollo sostenible. Y, como siempre ocurre, los m¨¢s d¨¦biles ser¨¢n los que sufran esas consecuencias de una forma m¨¢s severa. La infancia est¨¢, de nuevo y nunca mejor dicho, en el ojo del hurac¨¢n, y, sin embargo, hasta la fecha, se la ha ignorado en gran medida.

El cambio clim¨¢tico implica m¨¢s sequ¨ªas, inundaciones, olas de calor y otros fen¨®menos clim¨¢ticos severos que contribuir¨¢n a la creciente propagaci¨®n de la desnutrici¨®n, el paludismo y la diarrea, que se cuentan entre las principales causas de mortalidad infantil. Pero no todos los fen¨®menos tienen las mismas consecuencias en los ni?os. Ser¨¢n los m¨¢s peque?os los que vean impedido su desarrollo temprano con un impacto irreversible en sus vidas. Adem¨¢s, el cambio clim¨¢tico crea un c¨ªrculo vicioso: un ni?o privado de agua y saneamiento adecuados antes de una crisis sufrir¨¢ de manera m¨¢s aguda los efectos de una inundaci¨®n, una sequ¨ªa o de un hurac¨¢n; tendr¨¢ menos capacidad de reponerse r¨¢pidamente y estar¨¢ en mayor riesgo cuando tenga que enfrentarse a otra crisis.

El n¨²mero de ni?os expuestos a los riesgos del cambio clim¨¢tico es alarmante. Unos 530 millones de ni?os viven en zonas de alto riesgo de inundaciones, de los cuales m¨¢s de 300 millones viven en pa¨ªses donde m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n vive con menos de 3,10 d¨®lares al d¨ªa. Casi 160 millones de ni?os viven en ¨¢reas en las que las sequ¨ªas son severas o muy severas de los que 50 millones est¨¢n en pa¨ªses donde la mitad de la poblaci¨®n vive con menos de 3,10 d¨®lares al d¨ªa.

El cambio clim¨¢tico puede socavar (de hecho ya lo est¨¢ haciendo) muchos de los resultados obtenidos para la salud y el bienestar de los ni?os en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Por ese motivo, es un asunto que en UNICEF hemos convertido en una de nuestras prioridades.

Ante este desaf¨ªo proponemos priorizar las necesidades de adaptaci¨®n de las personas m¨¢s vulnerables a ese cambio, incluidos los ni?os y las ni?as; reducir las desigualdades entre los ni?os y las familias pobres, a fin de mejorar su capacidad para soportar el impacto del cambio clim¨¢tico; invertir en la infancia ejecutando planes nacionales en materia de mitigaci¨®n y adaptaci¨®n clim¨¢tica y adoptar medidas para proteger a los ni?os y las ni?as que han sido desplazados como resultado del cambio clim¨¢tico. La formaci¨®n jugar¨¢ un papel fundamental y es preciso proporcionar educaci¨®n sobre cambio clim¨¢tico a ni?os y j¨®venes y poner en valor su rol como agentes para abordar el cambio clim¨¢tico.

La infancia tiene que estar muy presente en los debates parisinos, porque no hacer nada para mitigar y adaptarse al cambio clim¨¢tico es una violaci¨®n de los derechos de los ni?os. El camino est¨¢ marcado a trav¨¦s de la agenda que los gobiernos de todo el mundo han aprobado a trav¨¦s de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. El n¨²mero 13 de esos objetivos se?ala expresamente ¡°la adopci¨®n de medidas urgentes para combatir el cambio clim¨¢tico y sus efectos¡±.

Estamos ante un problema que la comunidad internacional debe trabajar de forma coordinada y la cita de Par¨ªs es trascendental. Una cita que debe desembocar en un ¡°nuevo acuerdo internacional sobre el clima aplicable a todos los pa¨ªses, con el objetivo de mantener el calentamiento global por debajo de los 2^oC¡±. Esperamos que la ciudad de la luz alumbre un acuerdo ambicioso. A menos que actuemos ahora, el impacto del cambio clim¨¢tico puede tener un efecto devastador en la vida de los ni?os.

Carmelo Angulo Barturen es Presidente UNICEF Comit¨¦ Espa?ol.