Elige tu propia aventura... er¨®tica
Los libros interactivos de tu infancia se fusionan con la literatura picante y el formato digital en 'M¨®jate', segunda obra de la autora Melanie Rostock
Dicen en 120 pies, la editorial que publica M¨®jate, que los libros electr¨®nicos son perfectos para la literatura er¨®tica porque ¡°se pueden sujetar con una sola mano y son discretos¡±. A?ade Melanie Rostock, la autora de la novela, que son perfectos para desarrollar un libro interactivo. De la fusi¨®n de estas dos ideas nace un libro extra?o, que mezcla algo tan vintage como la interacci¨®n lectora (aquello de ¡°elige tu propia aventura¡± y ¡°si quieres matar al drag¨®n pasa a la p¨¢gina 36¡±) con conceptos tan de actualidad como el ebook y la literatura er¨®tica.
M¨®jate es un soplo de aire fresco en el trillado campo de la literatura picante. Podr¨ªamos caer en la tentaci¨®n de clasificarlo como el 50 Sombras de Grey espa?ol, pero Rostock se apresura a marcar distancias. Reconoce que el best seller de E.L. James ha tenido efectos positivos, como fomentar la lectura y romper tab¨²es sobre un tema -el de la literatura er¨®tica- del que se hablaba m¨¢s bien poco. Pero ah¨ª acaban los cumplidos para el fen¨®meno literario m¨¢s espectacular de los ¨²ltimos a?os. ¡°Dentro de este g¨¦nero abundan los personajes masculinos posesivos¡±, dice Rostock sin mencionar expl¨ªcitamente al ubicuo Grey, ¡°y me da pena que haya gente j¨®ven que crea que esto es normal. Eso ten¨ªa clar¨ªsimo que no quer¨ªa hacerlo¡±, defiende, ¡°mi protagonista masculino puede ser un malote, pero ni de co?a va a ser as¨ª¡±.
Las influencias por tanto son otras. Como por ejemplo Autobiograf¨ªa de una pulga, un an¨®nimo del siglo XIX. O como por ejemplo Lena Dunham. Rostock se?ala su serie -Girls- y su libro -No soy ese tipo de chica- como referencia m¨¢s cercana. ¡°Pero he a?adido m¨¢s humor¡±, puntualiza. ¡°Quer¨ªa que fuera como un juego, as¨ª que ten¨ªa que buscar un toque divertido y realista¡±. En M¨®jate no hay multimillonarios sadomasoquistas ni narcotraficantes fetichistas de los pies. Las fantasias imposibles se han sacrificado en pos del realismo, pues, como defiende Rostock, ¡°ten¨ªa que hacer que el lector se sintiera en la piel de la protagonista¡±.
La protagonista es Irene, una treinta?era que pierde su trabajo y su novio y se encuentra ante un mundo lleno de opciones. Y con opciones, b¨¢sicamente, nos referimos a hombres. ¡°Ella puede elegir y tiene muchas ganas de elegir¡±, comenta Rostock, pero el trabajo no est¨¢ en manos del personaje sino del lector. ¡°Lo bueno es que aqu¨ª si te equivocas puedes volver atr¨¢s. En la vida real no tienes esa opci¨®n¡±, reflexiona la autora.
Puede que el t¨ªtulo de Rostock tenga mucho de innovaci¨®n, sobre todo en la forma. Por eso choca saber que esta joven trabaj¨® durante a?os en una editorial. ¡°All¨ª me di cuenta de que los canales tradicionales est¨¢n bastante agotados¡±, asegura. ¡°Si he aprendido algo es que esto es un negocio y tu libro no es una obra, es un producto¡±. Sabiendo de las dificultades que atraviesa el autor novel en un contexto de crisis, para su primer libro, Rostock apost¨® por la autoedici¨®n. ¡°Yo he buscado autores noveles en Amazon para publicarlos, sab¨ªa que esto funcionaba¡±. Y as¨ª fue. Un mes despu¨¦s de autopublicar en formato digital su primera novela, Bittersweet, ya ten¨ªa un par de ofertas encima de la mesa. Una de ellas est¨¢ a punto de materializarse en un mont¨®n de hojas y una tapa dura. Entonces Rostock hablaba sobre el bullying en un libro destinado al p¨²blico j¨®ven. ¡°Puede que por eso ahora me apeteciera ahora algo m¨¢s divertido y m¨¢s liviano¡±, reflexiona. Y m¨¢s sexual, cabr¨ªa a?adir.
Sin embargo, la decisi¨®n de ponerse manos a la obra con M¨®jate no fue f¨¢cil. ¡°Me dije, ¡®ostras, no has le¨ªdo er¨®tica, le¨ªste un libro de toma tu propia decisi¨®n empresarial¡ pero nada m¨¢s¡¯... pero al final me lanc¨¦¡±. En eso consiste la vida. Y en eso consiste, a veces, tambi¨¦n la literatura. Puede decirse pues, que Melanie Rostock ya ha elegido su propia aventura.
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