Cuenta atr¨¢s en la investidura

En la recta final de las negociaciones para la investidura de Pedro S¨¢nchez como presidente del Gobierno, los dirigentes de Podemos han abordado la reuni¨®n con el PSOE, Comprom¨ªs e Izquierda Unida bajo la idea de mostrar un gran inter¨¦s por el pacto con estos partidos. Esa nueva fase de exploraciones pol¨ªticas, destinada a ensanchar la base de apoyo a la eventual investidura, contrasta con los condicionamientos previos de Pablo Iglesias y los mensajes de que cualquier intento socialista de apoyarse, a la vez, en Podemos y en Ciudadanos podr¨ªa hacer fracasar una negociaci¨®n de por s¨ª muy dif¨ªcil. En todo caso, es evidente que las conversaciones llevadas a cabo entre PSOE y Ciudadanos han espoleado a los otros actores pol¨ªticos, hasta el punto de que Podemos retira el veto a Ciudadanos.

Pero las dificultades siguen siendo grandes. Para que Pedro S¨¢nchez sea investido hace falta que le apoyen o se abstengan el Partido Popular o Podemos. Que esta ¨²ltima formaci¨®n deje paso libre a S¨¢nchez, sin participar en su posible Gobierno, ser¨ªa contradictorio con el tajante planteamiento previo sobre la obtenci¨®n de una fuerte cuota de poder dentro de la coalici¨®n. Lo mismo que resulta ingenuo pensar que el PP, al fin y al cabo la fuerza m¨¢s votada del 20-D, dejar¨¢ paso franco a S¨¢nchez sin negociaci¨®n.

Lo m¨¢s positivo de las conversaciones entre PSOE y Ciudadanos es que han creado una din¨¢mica que cambia el rumbo derrotista de la pol¨ªtica espa?ola hacia la inexorable repetici¨®n de las elecciones por exceso de bloqueos mutuos. Bienvenidos sean los intentos de explorar las combinaciones posibles en el tiempo ¨²til que queda hasta las votaciones de investidura. Sin embargo, los actores pol¨ªticos no deben levantar falsas expectativas. Este pa¨ªs necesita un pacto muy serio y un Gobierno estable, no gestos destinados a la galer¨ªa ni frivolidades t¨¢cticas.