Suiza refina oro extra¨ªdo por ni?os en Burkina Faso
?C¨®mo puede ser que todos los a?os Suiza importe toneladas de oro desde Togo, un pa¨ªs que no produce este mineral? es lo que se pregunta la ONG suiza Berne Declaration (BD).
Est¨¢ organizaci¨®n lleva m¨¢s de 40 a?os luchando por una relaci¨®n m¨¢s equitativa entre el pa¨ªs europeo y los pa¨ªses en desarrollo. En un informe titulado A Golden Racket demuestra que el oro procede de las minas artesanales de Burkina Faso, donde se extrae en condiciones p¨¦simas tanto para adultos como para ni?os, se lleva de contrabando hasta Togo y desde all¨ª es importado por una compa?¨ªa suiza con sede en Ginebra.
El viaje del oro se inicia en las minas artesanales de Burkina Faso. En ese pa¨ªs existen 200 unidades mineras artesanales reconocidas oficialmente. En una unidad pueden operar diferentes mineros a t¨ªtulo individual. Junto a ellas hay otras 27 unidades semi-mecanizadas. Pero la gran mayor¨ªa de la miner¨ªa artesanal es ilegal; se estima que en Burkina Faso existen m¨¢s de 600 unidades clandestinas. Algunas fuentes calculan que en estas unidades se extraen m¨¢s de 20 toneladas de oro al a?o. Las cifras oficiales dicen que en 2014, Burkina Faso solo produjo 36 toneladas de oro.
Una vez extra¨ªdo y semirefinado, el oro es sacado clandestinamente del pa¨ªs y llevado hasta Lom¨¦, la capital de Togo. La revista Invetig?action apunta a que el contrabando del oro no ser¨ªa posible sin la complicidad de pol¨ªticos y funcionarios del gobierno de Uagadug¨² que comparten los beneficios de los contrabandistas. El informe de BD se?ala como a uno de los principales intermediarios en el contrabando de oro a la compa?¨ªa SOMIKA, propiedad de El Hadj Adama Kindo, un poderoso hombre de negocios que cuenta con numerosas concesiones de minas de oro en Burkina Faso y estuvo muy cercano y protegido por el r¨¦gimen del antiguo presidente Blaise Compaor¨¦, continuando sus actividades tras la ca¨ªda de ese. Evidentemente, la compa?¨ªa niega toda implicaci¨®n en el comercio ilegal de este metal.
Cuando el oro llega a Lom¨¦ es comprado por Waafex S¨¤rl, una sucursal del grupo Ammar que aglomera diversas compa?¨ªas propiedad de una familia libanesa. Luego, la filial suiza del grupo, MM Multitrade, importa el oro en el pa¨ªs helv¨¦tico. Aviones de Air France lo transportan desde Lom¨¦ hasta Paris y de ah¨ª a Zurich. En 2014, unas 7 toneladas de oro salieron desde Togo para Suiza de esta forma.
Desde Zurich el metal es llevado a la refiner¨ªa Valcambi, que esta cerca de Lugano y es una de las m¨¢s grandes del mundo. Esta refina el oro procedente de Togo y lo vende en barras o lingotes, acreditando su valor equivalente en onzas troy de oro en la cuenta de MM Multitrade en el Arab Bank de Ginebra.
Se calcula que en Burkina Faso entre el 30 y el 50 % de los trabajadores de las minas artesanales son ni?os. Estos menores arriesgan sus vidas descendiendo a pozos mineros, altamente inestables y mal ventilados, atados a una cuerda como ¨²nica medida de seguridad y con una linterna atada a la cabeza como ¨²nica iluminaci¨®n, en busca del metal precioso.
Se trata de ni?os de incluso solo 12 a?os que tienen que realizar las mismas tareas que los adultos, trabajando en turnos de d¨ªa y noche de 12 horas de duraci¨®n. Dada la angostura de los pozos artesanales es siempre m¨¢s f¨¢cil deslizar a un menor en ellos que a un adulto. La Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) califica el trabajo en minas artesanales como una de las peores formas de trabajo infantil ya que esta actividad ¡°pone en riesgo el bienestar f¨ªsico, mental o moral del ni?o¡±.
Muchos de estos menores tienen que manejar sustancias altamente t¨®xicas, como el mercurio, sin protecci¨®n pr¨¢cticamente a diario. Las medidas de seguridad, como hemos apuntado anteriormente, son pr¨¢cticamente inexistentes y los accidentes y muertes ocurren con mucha frecuencia en este tipo de explotaciones debidos, principalmente, a los derrumbes. Adem¨¢s son comunes enfermedades relacionadas con el trabajo incluyendo las que afectan a las v¨ªas respiratorias y las enfermedades pulmonares debido a la exposici¨®n al polvo y las lesiones de huesos debido a los accidentes y a los grandes pesos que tienen que manejar. La exposici¨®n permanente al mercurio, por su parte, perjudica gravemente los sistemas digestivo e inmunol¨®gico, pulmones y ri?ones.
Lejos quedan los tiempos de Thomas Sankara, cuando el algod¨®n era llamado oro blanco y representaba el 57% de las exportaciones de Burkina Faso. A partir de 2009, el oro amarillo tom¨® el relevo. Solo en 2013, las minas de este metal han aportado a las arcas del Estado, en t¨¦rminos de impuestos y tasas aduaneras, unos 198 millones de francos CFA (unos 300.690 euros). En la actualidad, el oro representa el 5% del PIB de Burkina Faso, uno de los pa¨ªses m¨¢s pobres del mundo (puesto 183, de 188, en el ?ndice de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas de 2015).
A diferencia de su extracci¨®n, el contrabando de oro es un negocio muy lucrativo para todas las partes implicadas en ¨¦l: los contrabandistas burkineses evitan el pago de los impuestos que gravan la exportaci¨®n del oro, entre ellos una tasa de 500 francos cfc (0,76 euros) por gramo, mientras que el Grupo Ammar se beneficia de las generosas tasas de exportaci¨®n de Togo, diez veces m¨¢s baratas que las de Burkina Faso.
Evidentemente, las perdidas que la miner¨ªa ilegal y el tr¨¢fico de oro suponen para este pa¨ªs son muy grandes. BD estima que en 2014 esa p¨¦rdida ascendi¨® a unos 6 millones de euros, lo que equivale a una cuarta parte de la ayuda al desarrollo que Suiza envi¨® a Burkina Faso ese mismo a?o.
Destaca la organizaci¨®n suiza que el c¨®digo de conducta de Valcambi presume de ¡° las m¨¢s altas normas de trazabilidad en toda su cadena de suministro¡±. De hecho, esta empresa, al conocer el informe de BD sac¨® un comunicado de prensa negando las acusaciones. la ONG suiza contest¨® afirmando que Valcambi no aportaba ninguna prueba que negase sus alegaciones por lo que las manten¨ªa.
Tambi¨¦n denuncia la ONG que las autoridades suizas cierran los ojos, confiando en la buena fe de las empresas del pa¨ªs y en sus propias iniciativas para que estas no se involucren en violaciones de derechos humanos.
Para saber m¨¢s sobre las explotaciones artesanales de oro en Burkina Faso se puede leer el reportaje: Una generaci¨®n cegada por el oro, en Planeta Futuro.
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