Todo lo que vamos a echar de menos (y lo que no) del programa de Bert¨ªn Osborne

Hay decisiones incomprensibles, al menos en t¨¦rminos empresariales. ?C¨®mo es posible que TVE haya podido dejar escapar el ¨²nico programa con ¨¦xito de su parrilla? Pues as¨ª ha sido. La cadena p¨²blica no ha llegado a un acuerdo con la productora de En tu casa o en la m¨ªa y ha perdido a la gallina de los huevos de oro de los mi¨¦rcoles. No pasa nada. Con la repercusi¨®n y la audiencia que ha tenido el programa de Bert¨ªn Osborne, seguro que m¨¢s de una cadena privada est¨¢ dispuesta a igualar la oferta, as¨ª que los #bertiners no deben preocuparse. Y los dem¨¢s tampoco, ya que ahora ser¨¢ una entidad particular, y no el dinero p¨²blico, la que se encargar¨¢ del desembolso. Un win-win en toda regla.

Pero, claro, hasta que eso ocurra -y cuando terminen las siete entregas que tiene pendientes¨C, ?qu¨¦ vamos a hacer sin Bert¨ªn? No es que nuestro amor hacia el programa sea muy apasionado ¨Cya hemos dejado claro lo que no nos gusta en varias ocasiones¨C, pero tampoco vamos a quitarle el m¨¦rito. Llegar a estas alturas y conseguir situarse como el ¨¦xito de la temporada no es f¨¢cil y m¨¢s con un formato que, a priori, tampoco pod¨ªa calificarse de arriesgado e innovador ¨Cno era Ad¨¢n y Eva, desde luego-. Vamos, que aunque el presentador no nos tenga mucho cari?o, nosotros incluso le vamos a echar de menos. ?Ven como tenemos nuestro peque?o corazoncito? Eso s¨ª, ojal¨¢ de cara a un salto de cadena consigan pulir algunos aspectos...

Esto es lo que S? vamos a echar de menos...

1. Los cuidad¨ªsimos aspectos t¨¦cnicos. La realizaci¨®n de 'En la tuya o en la m¨ªa' es perfecta. As¨ª de claro. Consiguen un resultado final que muy pocos programas pueden igualar. La imagen, la iluminaci¨®n, los detalles, incluso han desarrollado un estilo propio en la elecci¨®n de la m¨²sica, esos hits en versi¨®n folk que son marca de la casa. Sin duda, es uno de los grandes atractivos del programa.

2. La comodidad de los invitados. Saben los que acuden a casa de Bert¨ªn ¨Co los que le abren la suya¨C que nada malo les va a pasar. Ocurre lo mismo con los que visitan el plat¨® de Mar¨ªa Teresa Campos. No hay recelos ni barreras. Y, claro, gracias a eso se van soltando y acaban dejando titulares para la posteridad. Cuesti¨®n distinta es que nos interese la selecci¨®n de invitados, pero de eso hablaremos luego.

3. El efecto cotilla. Uno de los ganchos de 'En la tuya o en la m¨ªa' era la posibilidad de ver el interior de las casa de los famosos. Al final, esto se ha quedado m¨¢s en una intenci¨®n que en la realidad. Las casas que hemos podido ver ya las hab¨ªamos visto con anterioridad ¨Cen revistas, por ejemplo¨C y las que nos despertaban la curiosidad nos hemos quedado sin verlas. Aun as¨ª, el esp¨ªritu cotilla que tenemos todos los espa?oles siempre sale a flote.

En cambio, esto es lo que NO vamos a echar en falta...

1. La selecci¨®n de invitados. Organizar una escaleta que contente a todo el mundo es imposible. Lo sabemos, s¨ª, pero tampoco sirve como excusa. Carmen Mart¨ªnez-Bordi¨², Ar¨¦valo, Ana Obreg¨®n, Juan y Medio ¨Cesta semana¨C, Los Morancos; invitados que parecen sacados directamente de la m¨¢quina del tiempo. Hay m¨¢s variedad en el panorama nacional. Menos mal que Paco Le¨®n aterriz¨®, habl¨® de su bisexualidad y volvi¨® a situar al programa en 2016.

2. Las salidas de tono. Hacer cierta autocr¨ªtica cuando se protagoniza un programa en 'prime time' en una cadena p¨²blica deber¨ªa ser casi obligatorio. Sentarse a decir -o asentir de forma c¨®mplice- que en Espa?a ya no hay sentido del humor porque no se pueden hacer chistes de mariquitas resulta ofensivo para una parte de la poblaci¨®n. Igual que seguir ahondando en el t¨®pico de preguntarle a los invitados hombres si sus mujeres cocinan bien. Hay cosas que deber¨ªan estar ya desterradas de la sociedad actual.

3. El show de la cocina. Grabar el programa dentro de una casa hace dif¨ªcil buscar excusas para que el invitado no se pase todo el rato en el sof¨¢. Ir a la cocina, claro, es la forma m¨¢s f¨¢cil de romper la entrevista en dos partes diferenciadas, pero, ?es necesario que tengamos que asistir al mismo show semana tras semana? S¨ª, ya sabemos que Bert¨ªn no sabe cocinar y que su mujer se enfada porque lo deja todo perdido. Por favor, basta ya. No es necesario.