Abusadores

Debo de tener un fondo muy conservador, porque cada vez que alguien de la derecha tiene un gesto realmente liberal en lo pol¨ªtico (en lo econ¨®mico es distinto) me conmuevo y empiezo a decir a los cuatro vientos que por fin en Espa?a tenemos una derecha democr¨¢tica.

Pero siempre hay alguien de esa derecha que me pone de nuevo en mi sitio y me viene a decir: ¡°?D¨®nde vas con el cab¨¢s!¡±, que es una expresi¨®n que usaba mucho una t¨ªa m¨ªa, s¨®lo que ella la redondeaba con un ¡°Nicol¨¢s¡± que yo creo honradamente que sobraba.

Bueno, ¡°a lo que estamos, Fernanda¡±, que dec¨ªa tambi¨¦n otra t¨ªa m¨ªa para obligarle a uno a no meterse en disgresiones absurdas: y es que Rajoy, que deber¨ªa, seg¨²n casi todos los comentaristas pol¨ªticos, estar buscando la manera de dar el paso a un lado que le exigen muchos en su partido, ha decidido poner su legitimidad por encima de la de todos los dem¨¢s.

No quiero ponerme muchas medallas, pero ya advert¨ª de que su braceo al andar se hab¨ªa hecho m¨¢s marcial. Ahora ya es decididamente imperial. No quer¨ªa ir condicionado a Europa para hablar de los refugiados sirios, y ahora no quiere que el Parlamento que no ha podido elegirle presidente porque no se present¨®, entre otras razones, pueda pedirle cuentas de lo que har¨¢n ¨¦l y su partido con los votos que ya se extinguieron.

Y han montado estos se?ores del PP una de cuidado. ?De qu¨¦ se van a quejar ahora cuando la exalcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, se niega a darles explicaciones incluso a ellos? Si hablamos de corrupci¨®n, los del PP van a empezar a no colaborar con nadie, si fueron elegidos con votos que ya no est¨¢n vigentes. Tenemos una buena preparada: un choque de trenes programado para que no salga nadie vivo salvo los del PP, que recibir¨¢n un aviso a tiempo para abandonar en marcha los vagones de pasajeros.

Patxi L¨®pez, que hab¨ªa recibido unas clases suplementarias de urbanidad, est¨¢ ahora recibiendo mensajes que le urgen a recuperar los modales de perito industrial, o sea, de metal¨²rgico vizca¨ªno, para tratar con joyas versallescas como Rafael Hernando y otros de su clase. Aunque el cuerpo lo pida, eso hay que dej¨¢rselo a Pablo Iglesias. Patxi, no hagas caso.