Los pinzones de Darwin siguen evolucionando en las Gal¨¢pagos
Los cient¨ªficos descubren el gen maestro del tama?o del pico, que inspir¨® la teor¨ªa darwiniana y ahora la demuestra en acci¨®n
La ciencia debe mucho a los pinzones de las islas Gal¨¢pagos. Esos p¨¢jaros que hab¨ªan llegado del continente como una sola especie y se hab¨ªan diversificado despu¨¦s en cada isla hasta generar m¨¢s de una docena de ellas encendieron la luz en la mente de Darwin: las especies eran inestables y pod¨ªan brotar como ramas desde un tronco com¨²n. Los evolucionistas siguen estudiando las Gal¨¢pagos, porque no solo los pinzones de Darwin siguen all¨ª, sino tambi¨¦n los mecanismos evolutivos que los crearon. Las islas ecuatorianas son un laboratorio vivo de la evoluci¨®n, el equivalente biol¨®gico de un acelerador de part¨ªculas.
La ¨²ltima part¨ªcula que ha emergido de all¨ª se llama HMGA2, y es el gen m¨¢s importante entre los que determinan el tama?o del pico de los pinzones. Junto al gen ALX1, que es el gran dise?ador de la forma del pico, forman la pareja gen¨¦tica que inspir¨® a Darwin: los art¨ªfices moleculares de la moderna teor¨ªa de la evoluci¨®n, si me aceptas la metonimia. Leif Andersson y sus colegas de la Universidad de Uppsala, Suecia, presentan su investigaci¨®n en la revista Science.
Las observaciones originales de Darwin se beneficiaron de dos millones de a?os de evoluci¨®n: los que hab¨ªan pasado desde que la especie original de pinz¨®n lleg¨® a las Gal¨¢pagos desde las costas pac¨ªficas de Suram¨¦rica. Los evolucionistas de Uppsala se basan en un acontecimiento contempor¨¢neo, una sequ¨ªa de las gordas sobrevenida en 2004-2005, y que redujo de manera ostensible el tama?o medio del pico de Geospiza fortis, o pinz¨®n de tierra de tama?o mediano. Esa sequ¨ªa y sus efectos hab¨ªan sido estudiados sobre el terreno por el matrimonio Grant (Rosemary y Peter), dos evolucionistas de la Universidad de Princeton, en New Jersey, que han pasado 20 a?os investigando a esas aves de las Gal¨¢pagos. Los Grant son coautores del actual trabajo.
?Por qu¨¦ se redujo el pico de Geospiza fortis en respuesta a una sequ¨ªa? La raz¨®n, seg¨²n demuestran Andersson y sus colegas, es que la sequ¨ªa elimin¨® las barreras geogr¨¢ficas que manten¨ªan separados a Geospiza fortis y su primo lejano de mayor tama?o, Geospiza magnirostris; y que, al encontrarse las dos especies y empezar a competir por los mismos recursos, los individuos de fortis que luc¨ªan un mayor pico, que hasta entonces hab¨ªan aprovechado las semillas m¨¢s grandes, se vieron barridos por los magnirostris del mont¨®n, que de por s¨ª tienen un pico muy grande y se comen esas semillas como si no hubiera un ma?ana. Fue el propio Darwin quien postul¨® ese mecanismo evolutivo hace casi dos siglos, y los datos gen¨®micos suponen ahora una confirmaci¨®n espectacular de su intuici¨®n.
Las islas ecuatorianas son un laboratorio vivo de la evoluci¨®n, el equivalente biol¨®gico de un acelerador de part¨ªculas
Los investigadores de Uppsala han combinado la biolog¨ªa m¨¢s antigua (la recolecci¨®n de espec¨ªmenes en Daphne mayor, una de las islas Gal¨¢pagos mejor estudiadas) con la m¨¢s moderna (la secuenciaci¨®n gen¨®mica, gatacca¡). Sus resultados son muy s¨®lidos porque consisten en correlaciones directas entre los productos de la evoluci¨®n (la forma y tama?o del pico de seis especies de pinzones), sus efectos (la supervivencia o muerte de quienes tienen el pico mayor o menor) y sus causas ¨²ltimas (el gen HMGA2, redondeando un poco).
Las condiciones ambientales y los accidentes hist¨®ricos plantean el mayor reto a los sistemas biol¨®gicos. Su car¨¢cter impredecible hace imposible reaccionar a ellos con una soluci¨®n estereotipada, por m¨¢s que esa soluci¨®n se haya pulido y engrasado durante millones de a?os. Los pinzones de las Gal¨¢pagos llevan dos millones de a?os superando esos accidentes impredecibles, y la sequ¨ªa de 2004-2005 revela su secreto: no es m¨¢s que la vieja y venerable selecci¨®n natural formulada por el padre de la biolog¨ªa moderna ¨Cla supervivencia del mejor adaptado al cambio¡ª, ayudada, o acelerada, por la simplicidad gen¨¦tica subyacente.
Cuando un solo gen o un par de ellos (como los maestros de la evoluci¨®n del pico, HMGA2 y ALX1) son el principal determinante del sistema, sustituir una variante por otra solo lleva unas pocas generaciones.
HMGA2, por cierto, es tambi¨¦n un gen importante de la estatura humana. Pensadlo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.