El narcisismo de Podemos
Los l¨ªderes del partido emergente han escalado el poder con credenciales del saber. Est¨¢n convencidos de que, desde el claustro universitario, pueden imponer su maqueta de sociedad perfecta. Son capitalistas curriculares y guerrilleros de sal¨®n
Para ¡°entender Podemos¡± no hay que verlo como lo que dice ser, sino como lo que es. No es un n¨²cleo de pensamiento cr¨ªtico, sino un n¨²cleo de narcisismo universitario (t¨ªpicamente latinoamericano) como el que ha estudiado desde hace cuarenta a?os el mexicano Gabriel Zaid. En De los libros al poder escribe: la universidad otorga credenciales de saber para escalar en la pir¨¢mide del poder. A veces, ese asalto al poder ha sido pac¨ªfico, otras no. En Am¨¦rica Latina, a partir de la construcci¨®n imaginaria de la universidad como nueva iglesia, varias generaciones de universitarios buscaron imponer a la realidad la maqueta ideal de la sociedad perfecta. La guerrilla latinoamericana (en Per¨², Centroam¨¦rica) no fue campesina, ni obrera ni popular: la encabezaron profesores y estudiantes. Si la realidad no se ajustaba a sus teor¨ªas, peor para la realidad. Para nuestros pa¨ªses, el costo hist¨®rico de la guerrilla universitaria ha sido inmenso.
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Podemos es la versi¨®n espa?ola de la caracterizaci¨®n de Zaid. La confirmaci¨®n est¨¢ en el texto Entender Podemos, publicado por Pablo Iglesias en la revista inglesa New Left Review (julio/agosto de 2015). Se trata de una vaporosa teor¨ªa de la historia universal que desemboca en¡ Podemos. Ante la ¡°derrota de la izquierda en el siglo XX [informaba Iglesias], el pensamiento cr¨ªtico qued¨® reducido al trabajo de universitarios¡±. Solo en el claustro universitario pod¨ªa surgir la ¡°producci¨®n te¨®rica¡± que hiciera posible una ¡°izquierda realista¡±. Al sobrevenir la crisis financiera global, el ¡°vaciamiento¡± de las soberan¨ªas estatales europeas y la indignaci¨®n social por los casos de corrupci¨®n en las elites pol¨ªticas, Espa?a tuvo la fortuna de contar con ¡°el conocido grupo de docentes e investigadores de la Universidad Complutense de Madrid¡±, que integrar¨ªa Podemos.
El objetivo de ese ¡°n¨²cleo¡± de ¡°pensamiento cr¨ªtico¡± era ¡°agregar¡± las nuevas demandas derivadas de la crisis en torno a un ¡°liderazgo medi¨¢tico¡± capaz de ¡°dicotomizar¡± el espacio p¨²blico. ?C¨®mo lograrlo? Volteando a ¡°las experiencias acontecidas en Am¨¦rica Latina¡±, ricas en ¡°instrumentos te¨®ricos para interpretar la realidad espa?ola¡±. De hecho ¡ªimaginaba Iglesias¡ª, Europa toda se hallaba en un ¡°proceso de latinoamericanizaci¨®n, entendido como la apertura de una estructura pol¨ªtica¡±. Por un lado, hab¨ªa que absorber la obra del fil¨®sofo Ernesto Laclau (principal te¨®rico del populismo en Latinoam¨¦rica). Por otro, hab¨ªa que ¡°pensar pol¨ªticamente en clave televisiva¡±, objetivo que se logr¨® con los programas La Tuerka y Fort Apache, nuevos ¡°partidos¡± que trasladaron la pol¨ªtica del Parlamento a la televisi¨®n. Esos programas ¡ªrevelaba Iglesias¡ª fueron la escuela que ¡°nos form¨® para el asesoramiento en comunicaci¨®n pol¨ªtica que desarrollamos paralelamente en Espa?a y Am¨¦rica Latina¡±. Pero, para superar ¡°ciertos estilos¡± (que Iglesias, enemigo del castellano pero amigo del ox¨ªmoron, llamaba ¡°movimientistas paralizantes¡±), se requer¨ªa algo m¨¢s: ¡°Usar mi protagonismo medi¨¢tico¡±. Era necesario ¡°identificar al pueblo de la televisi¨®n con un nosotros nuevo¡±. As¨ª fue como la ¡°representaci¨®n de las v¨ªctimas de la crisis¡± encarn¨® en su propia persona: ¡°El fen¨®meno televisivo¡±, el ¡°tertuliano-referente¡±, ¡°el significante¡±, ¡°Pablo Iglesias/el profesor de la coleta¡±.
Hay quien piensa que para ser pol¨ªtico no hay nada mejor que ser polit¨®logo
Para los hu¨¦rfanos de ¡°pensamiento cr¨ªtico¡±, estas ideas seminales no son f¨¢cilmente comprensibles. Por eso, en beneficio de los legos, a mediados de 2014 el tertuliano/referente y significante concedi¨® en Venezuela una entrevista para un programa de televisi¨®n donde se le ve escuchando a Hugo Ch¨¢vez: ¡°La revoluci¨®n avanza, la patria avanza [dec¨ªa el Comandante en 2012]. Esto solo es posible en socialismo, solo es posible con un Gobierno que coloque en primer lugar al hombre, al humano, a la mujer, a la ni?a, al ni?o¡±. Visiblemente conmovido, Iglesias reacciona en ¡°clave televisiva¡±: ¡°¡Cu¨¢ntas verdades nos ha dicho este hombre... Lo que est¨¢ ocurriendo aqu¨ª es una demostraci¨®n de que s¨ª hay alternativa, de que la ¨²nica manera de gobernar no es gobernar para una minor¨ªa de privilegiados y contra las mayor¨ªas sociales. Ese es el ejemplo de Am¨¦rica Latina¡ una alternativa para los ciudadanos europeos¡±.
El mensaje era el mismo para el lector de la New Left Review y el ¡°pueblo de la televisi¨®n¡±: el futuro de Espa?a y de Europa era y deb¨ªa ser (historia y norma, poder y deber, hermanados) la Revoluci¨®n Bolivariana encabezada por su respectivo caudillo medi¨¢tico.
Para refutar a Iglesias, alguien se?al¨® lo mucho que Laclau debe a Carl Schmitt, te¨®rico del nazismo, experto en la ¡°dicotomizaci¨®n¡±, que ve¨ªa la historia como el escenario de dos fuerzas: ¡°Amigo¡± y ¡°enemigo¡±. (Traducci¨®n para Espa?a: por un lado ¡°el pueblo¡±, representado por Podemos, representado por Iglesias; por otro el ¡°no pueblo¡±, representado por todas las otras formaciones pol¨ªticas). Pero a estas alturas esos reparos intelectuales son lo de menos. Ahora, la mejor refutaci¨®n de la teor¨ªa de Podemos est¨¢ en la espantosa realidad en la que viven ¡°el hombre, el humano, la mujer, la ni?a, el ni?o¡± en la Venezuela creada por el chavismo, una devastaci¨®n sin precedente en Am¨¦rica Latina, comparable a la provocada en Zimbabue por Robert Mugabe.
La mejor refutaci¨®n de sus? teor¨ªas est¨¢ en la espantosa realidad que viven los venezolanos
El profesor Iglesias, por supuesto, no admitir¨¢ nunca esa realidad. Y se entiende: Podemos tiene intereses creados en creer lo que cree o dice creer. Esos siete millones de euros no se cobraron en vano. Lo que no est¨¢ claro es el sentido de esa operaci¨®n de ¡°asesoramiento en comunicaci¨®n p¨²blica¡±. ?Cobraron por un servicio prestado al chavismo o cobraron por el honor de ser asesorados por Hugo Ch¨¢vez, el mayor experto mundial en ¡°dicotomizar¡± a la sociedad, ¡°pensar pol¨ªticamente en clave televisiva¡± y construir un ¡°liderazgo medi¨¢tico¡±?
Sobre el peso relativo de la teor¨ªa y la pr¨¢ctica en su doble rol de Secretario General y Polit¨®logo, Iglesias confiesa: ¡°Sin el segundo, el primero no habr¨ªa sido posible¡±. Lo cual supone que la universidad prepara a las personas para la vida. ?Es as¨ª? Zaid lleg¨® a la conclusi¨®n de que la mitolog¨ªa universitaria es responsable de ese y otros equ¨ªvocos, que impiden un progreso que sirva a la vida. Cualquier profesionista responsable sabe que la experiencia pr¨¢ctica, con sus errores inevitables, es la verdadera maestra. No obstante, en una extra?a vuelta al platonismo, hay quien piensa que la teor¨ªa prepara para la pr¨¢ctica y en cierta medida la supera. Y que para ser pol¨ªtico nada mejor que ser polit¨®logo.
Los l¨ªderes de Podemos han escalado el poder con credenciales del saber. Son capitalistas curriculares. Son guerrilleros de sal¨®n. Desde los peligrosos ca?averales de la Complutense, construyeron teor¨ªas contra el poder democr¨¢tico financiados por el poder revolucionario. Del ciudadano espa?ol depende desenmascarar su inanidad te¨®rica, su inexperiencia pr¨¢ctica, su vasta mentira, su mala fe.
Enrique Krauze es escritor y director de la revista Letras libres.
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