De fiesta con Kendall Jenner y DiCaprio

¡°I¡¯m coming out! I want the world to know¡±, cant¨® Diana Ross. La diva de Motown apareci¨® en mitad del escenario de la enorme carpa situada en el Port Cant¨® de Cannes, con un vestido azul el¨¦ctrico y una melena m¨¢s asalvajada que nunca, como mandaba el dress code de la noche en la fiesta de Chopard que ella presidi¨® con su m¨²sica. Detr¨¢s de ella, una cascada de leds y un gran tigre creado a partir de luces rosas y naranjas miraba a todos los exclusivos invitados, que se mov¨ªan entre plantas gigantes, como en una selva de lujo.

Wild Party se llamaba la tradicional fiesta anual que la marca de joyas Chopard, uno de los principales patrocinadores del Festival, dise?adores y creadores de su s¨ªmbolo y premio, la Palma de Oro, organiz¨® en la noche del lunes en el extremo opuesto de La Croisette al Palais des Festivals. En su invitaci¨®n se exig¨ªa vestir ¡°Wild chic¡± y Diana Ross lo interpret¨® con su melena rizada y su concierto de m¨¢s de media hora. Pero el sarao hab¨ªa empezado antes de que ella apareciera en el escenario, cuando Kendall Jenner entr¨® por el pasillo de espejos y neones.

Con un minivestido de plumas y transparencias blanco de Elie Saab, la supermodelo acapar¨® la atenci¨®n de la fiesta, y solo le arrebat¨® el protagonismo su madre, Kris Jenner, a quien se le acercaban m¨¢s curiosos a pedir selfies. Siempre que su famoso guardaespaldas, Pascal Duvier, lo permitiera. Con ellas estaba tambi¨¦n, Scott Disick, cu?ado y yerno, marido de Kourtney Kardashian; y hasta su mesa se acerc¨® a saludar Lottie Moss, la hermana de 18 a?os de Kate Moss, quien apareci¨® m¨¢s tarde en la fiesta, pero corri¨® hasta un rinc¨®n oscuro y cercano al escenario desde donde no perdi¨® detalle del concierto de la l¨ªder de las Supreme.

Al otro lado de la pasarela, por la que desfilaron modelos vestidas de negro que dejaran brillar la colecci¨®n de joyas de Chopard, junto a Kate Moss, tambi¨¦n bailaba los ¨¦xitos de Diana Ross, Poppy Delevingne, con su melena larga platino y enfundada en un vestido de lentejuelas plateadas. Cerca andaban Adriana Lima, el ¨¢ngel brasile?o de Victoria¡¯s Secret; la modelo rusa Daria Strokous, con un espectacular vestido blanco de espalda al descubierto; y la actriz Mischa Barton.

Con Upside Down y su versi¨®n ABC, de los Jackson 5, el p¨²blico se subi¨® a las banquetas a bailar. El actor franc¨¦s Olivier Martinez saltaba con su grupo de amigos, cuando Paris Hilton, tambi¨¦n con un vestido blanco, pas¨® apresurada entre ellos para llegar a los pies de Diana Ross. Solo un invitado permaneci¨® entre las sombras, de inc¨®gnito, mientras dur¨® el concierto: Leonardo DiCaprio. Con su eterna gorra para intentar taparse la cara, el actor intentaba esconderse mientras apuraba su cigarro electr¨®nico. Animal nocturno, DiCaprio acude todos los a?os al Festival, pero apenas hace apariciones oficiales, viene atra¨ªdo por sus fiestas y, probablemente, por las bellezas que le rodean.

Cantando I Will Survive, de Gloria Gaynor, Diana Ross se despidi¨® a lo grande del evento, y tras su salida, desaparecieron a la carrera algunos invitados famosos. Kate Moss sali¨® disparada, saludando brevemente a DiCaprio, quien sigui¨® un rato hasta verse rodeado de modelos.

El DJ Mark Ronson fue el encargado de poner m¨²sica al resto de la velada de lujo y luces de colores. Otra m¨¢s en Cannes, el Festival por el que estrellas mundiales del cine han pasado desde hace 69 a?os para presentar sus pel¨ªculas, pasear sus alfombras rojas, descalzas o no, pero sobre todo, al que han venido y vienen por sus fiestas. Porque Cannes es una fiesta.