Francia activa la m¨¢quina de asustar turistas
Las alertas terroristas y la ola de protestas golpean al mayor negocio del pa¨ªs
Suena incre¨ªble, pero el pa¨ªs con m¨¢s turistas del mundo ¡ª84 millones al a?o¡ª ha activado frenos ante tan suculento negocio (el 7% del PIB). Los atentados recientes, la abundante presencia militar y policial en las calles o el estado de excepci¨®n, por no hablar de las inundaciones, son causas objetivas que influyen para que lleguen a Par¨ªs un 56% menos de japoneses que el a?o pasado en las mismas fechas. O un 35% menos de rusos y un 24% menos de italianos.
Los franceses hasta pueden comprender, a rega?adientes, que Washington advierta a los suyos del ¡°alto riesgo de potenciales atentados¡± durante la Eurocopa o el Tour.
Lo que no entienden es que sean los suyos los que metan miedo a los turistas. El jefe de los esp¨ªas, Patrick Calvar, ha dicho que ¡°Francia es hoy, sin duda, el pa¨ªs m¨¢s amenazado¡± y que se esperan atentados con bomba en lugares con mucho p¨²blico. La Eurocopa y el Tour est¨¢n a la vuelta. El Gobierno ha creado diez llamadas fans zones para api?ar a los hinchas. La de Par¨ªs, junto a la Torre Eiffel, acoger¨¢ a 92.000 personas. ¡°Un riesgo a?adido¡±, airea el expresidente Nicolas Sarkozy.
Huelgas, bloqueos, manifestaciones, un coche policial en llamas y refiner¨ªas a bajo rendimiento se pasean por portadas de todo el planeta. Hasta el transportista oficial de la Eurocopa ¡ªla SNCF, la Renfe francesa¡ª hace huelga y los pilotos de Air France la convocan para los primeros d¨ªas de la Eurocopa. ¡°Los acontecimientos sociales y las escenas de guerrilla en pleno Par¨ªs difundidas por el mundo refuerzan el sentimiento de miedo¡±, se queja Fr¨¦d¨¦ric Valletoux, presidente del Comit¨¦ de Turismo de Par¨ªs.
Las reservas en zonas de Par¨ªs han bajado el 20%. El primer ministro, Manuel Valls, ha salido al rescate para afirmar que a Francia ¡°se puede venir con tranquilidad¡± y que m¨¢s de 100.000 agentes cuidar¨¢n de la seguridad en la Eurocopa. Cierto, pero para algunos es tarde. Pensaron que se les exig¨ªa ser valientes para llegar hasta la Torre Eiffel.
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