As¨ª se esconde el c¨¢ncer
La moderna inmunoterapia se basa en desenmascarar las c¨¦lulas tumorales
La idea de que sea el propio sistema inmunitario el que se encargue de eliminar las c¨¦lulas cancerosas como si fueran una bacteria, un virus o cualquier otro organismo extra?o ha explotado en los ¨²ltimos cinco a?os. El camino ha sido largo. Pero, hoy d¨ªa, todos los laboratorios punteros que trabajan en oncolog¨ªa est¨¢n en esa carrera, como se est¨¢ viendo en el congreso de la Sociedad Americana de Oncolog¨ªa Cl¨ªnica (ASCO), que empez¨® el viernes en Chicago.
De momento, ¡°estamos ante la punta del iceberg¡±, advierte Jos¨¦ Luis P¨¦rez Gracia, de la Cl¨ªnica Universitaria de Navarra, que present¨® el domingo datos del uso del atezolizumab (de Roche) en c¨¢nceres del sistema urinario (sobre todo, vejiga) que ya han recibido cirug¨ªa y quimioterapia y que actualmente no se pueden curar. ¡°Son pacientes que fallecen en un tiempo relativamente breve¡±, afirma. En un estudio con 310 enfermos se vio que alrededor del 20% respond¨ªan al nuevo medicamento, y, sobre todo, que su efecto era continuado y que se beneficiaban de que tienen menos efectos adversos. ¡°Hablamos de que al a?o y medio el 80% segu¨ªan bien¡±, declar¨® satisfecho el onc¨®logo, cuando antes viv¨ªan ¡°dos, cuatro, seis meses¡±. El resultado ha hecho que la agencia estadounidense del medicamento (FDA) lo aprobara sin necesidad de comparar sus resultados con el de la mejor alternativa actual, lo que es una prueba de su impacto, afirma P¨¦rez Gracia satisfecho.
Este caso es solo un ejemplo del mecanismo que lidera en este momento la investigaci¨®n en inmunoterapia: la interacci¨®n entre una de las prote¨ªnas de la superficie del tumor, la PD1, y una de los linfocitos (las c¨¦lulas encargadas de destruir a los microorganismo extra?os), la PDL-1. Son la pareja de moda del congreso.
El mecanismo que lidera en este momento la investigaci¨®n en inmunoterapia es la interacci¨®n entre una de las prote¨ªnas de la superficie del tumor y otra de las c¨¦lulas encargadas de destruir a los microorganismo extra?os
El proceso en el que intervienen es el siguiente: muchas c¨¦lulas cancer¨ªgenas tienen muchas prote¨ªnas PD1 en la superficie (est¨¢n sobreexpresadas, en argot cient¨ªfico). Son su mecanismo (o, mejor dicho, el que ahora mejor se conoce) para evitar ser atacadas como un cuerpo extra?o por los gl¨®bulos blancos que deber¨ªan localizarlas y destruirlas. Funcionan uni¨¦ndose a las PDL-1 de los linfocitos. Es como si le dieran al interruptor que apaga si funci¨®n defensora, con lo que los desactivan. Evitar esa uni¨®n por cualquier medio es, ahora, el objetivo. Por eso dos de las palabras que m¨¢s se oyen estos d¨ªas en las presentaciones del congreso son ¡°anti-PD1¡±, si bloquean la prote¨ªna de la c¨¦lula cancer¨ªgena, y ¡°anti-PDL1¡±, si lo hacen con las del linfocito. En ambos casos el efecto es el mismo: la llave no entra en la cerradura, y el proceso natural no se altera.
Pero el juego de disfraces va m¨¢s all¨¢. En algunos c¨¢nceres, como el de colon, las c¨¦lulas tumorales no muestran las prote¨ªnas PD1, explica Josep Tabernero, del hospital Vall d¡¯Hebron de Barcelona. Por eso lo que se intenta es obligarlas a que los asomen. Para ello se est¨¢ ensayando es tenderles una emboscada: tratarlas primero con otro medicamento que haga que las c¨¦lulas cancerosas reaccionen, y, al intentar defenderse, saquen sus PD-1. Entonces quedan expuestas al ataque de la inmunoterapia.
El hecho de que la PDL-1 de los linfocitos exista independientemente de que la persona tenga un c¨¢ncer o no, y de que muchos tumores sobreexpresen la PD-1 permite, adem¨¢s, que los medicamentos destinados a impedir su uni¨®n para desactivar el escudo cancer¨ªgeno se prueben en m¨²ltiples neoplasias diferentes. Es el caso de los ensayos CheckMate de BMS en c¨¢ncer de pulm¨®n, cabeza y cuello y melanoma, cuyo inhibidor de la PD-1, nivolumab, fue aprobado en abril por la Comisi¨®n Europea para carcinoma renal metast¨¢sico. Tambi¨¦n en pr¨®stata.
Los distintos avances en identificaci¨®n de mol¨¦culas de superficie y procesos inmunitarios hacen que se hable ya de 14 tipos de c¨¢nceres de pulm¨®n
Otro ejemplo de esta importancia es que dos grandes laboratorios como Merck y Pfizer de hayan unido para desarrollar un anti-PDL-1, el avelumab, para tratamiento de c¨¢nceres avanzados de c¨¦lulas de Merkel, mesoteliomas, vejiga y g¨¢strico, ovario, ri?¨®n y pulm¨®n.
Este ¨²ltimo merece una menci¨®n aparte merece el c¨¢ncer de pulm¨®n. O los c¨¢nceres de pulm¨®n, porque los distintos avances en identificaci¨®n de mol¨¦culas de superficie y procesos inmunitarios hacen que se hable ya de 14 tipos de estas neoplasias. De los cuatro c¨¢nceres m¨¢s frecuentes (mama, pr¨®stata, colorrectal y pulm¨®n) es, en general, el que peor pron¨®stico tiene. Por eso los avances en esta patolog¨ªa son tan importantes. En general, se divide entre tumores de c¨¦lulas peque?as y de no peque?as. Y, estos ¨²ltimos, pueden tener marcadores ALK, EGFR o ser sensibles a quimioterapia y, ahora a inmunoterapia, afirma Enriqueta Felip, del Instituto de Oncolog¨ªa del hospital Vall d¡¯Hebron.
Como ejemplo, aparte de los ya mencionados, tambi¨¦n MSD y Roche presentan resultados de inmunoterapia. Y, tambi¨¦n, centrados en la pareja PD1-PDL1. El ensayo POPLAR, afirma ?ngel Artal, del hospital Miguel Servet de Zaragoza, demuestra beneficios de esta aproximaci¨®n similares a la quimioterapia (un 20%), pero con dos ventajas, son m¨¢s duraderos en el tiempo y ofrecen menos efectos secundarios, que, adem¨¢s, no aumentan con el tiempo.
No son soluciones definitivas, pero la oncolog¨ªa actual avanza peque?os grandes pasos.
EL PA?S ha acudido al congreso invitado por Roche.
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