Karim Wade sale de prisi¨®n
Karim Wade, el d¨ªa que fue condenado a seis a?os de c¨¢rcel. / AFP
Karim Wade, hijo del ex presidente de Senegal Abdoulaye Wade y hasta hoy el preso m¨¢s famoso del pa¨ªs, sali¨® anoche de la prisi¨®n de Rebeuss, en Dakar, tras beneficiarse de un decreto de gracia presidencial. El que fuera uno de los hombres m¨¢s poderosos del pa¨ªs, apodado el superministro del Cielo y de la Tierra y aspirante a suceder a su padre en el poder, fue condenado a seis a?os de prisi¨®n, a una multa de 210 millones de euros y a la confiscaci¨®n de todos sus bienes por un delito de enriquecimiento il¨ªcito en marzo de 2015, aunque estaba detenido desde abril de 2013, es decir, hab¨ªa cumplido ya la mitad de su pena. El decreto de gracia presidencial firmado anoche por el presidente Macky Sall le exime de seguir en prisi¨®n pero no de pagar la sanci¨®n econ¨®mica.
La decisi¨®n fue hecha p¨²blica anoche. Macky Sall firmaba un decreto concediendo la gracia presidencial a Karim Wade y a dos de sus principales c¨®mplices, tambi¨¦n condenados a penas de cinco a?os, Ibrahima Aboukhalil (conocido como Bibo Bourgi y aut¨¦ntico hombre de paja de Karim) y Alioune Samba Diass¨¦. Sobre la una y media de la madrugada los tres sal¨ªan de prisi¨®n con rumbo desconocido, aunque los rumores acerca de la inmediata salida del pa¨ªs de Karim Wade en un avi¨®n que podr¨ªa haber partido hacia Qatar son intensos.
Macky Sall, presidente de Senegal. / AFP
La liberaci¨®n de Karim Wade, quien tambi¨¦n es oficialmente el candidato del principal partido de la oposici¨®n, el PDS, para las elecciones presidenciales de 2019, era esperada en Senegal desde el pasado 15 de junio. Ese d¨ªa, aprovechando el inicio del Ramad¨¢n, Macky Sall le comunic¨® a los principales l¨ªderes religiosos del pa¨ªs que la salida de prisi¨®n de Wade era inminente dado que ya hab¨ªa cumplido la mitad de su pena y que, por tanto, era susceptible de recibir medidas de gracia por parte del presidente. Hace solo unos d¨ªas, el peri¨®dico senegal¨¦s Le Quotidien aseguraba en portada que Karim iba a pasar la fiesta de la Korit¨¦ (fin del Ramad¨¢n, previsto para dentro de dos semanas) fuera de prisi¨®n. Las previsiones se han cumplido.
Sin embargo, esta liberaci¨®n tiene una lectura pol¨ªtica incuestionable. El refer¨¦ndum constitucional del pasado mes de marzo, el primer gran test al que se somet¨ªa Macky Sall ante los ciudadanos tras su contundente victoria electoral de 2012, supuso una amarga victoria para el presidente. Destacados miembros de la coalici¨®n que le ayud¨® a llegar al poder se posicionaron en su contra, as¨ª como movimientos ciudadanos y sociales, mientras la fractura pol¨ªtica con la oposici¨®n se ahondaba. Para tratar de apaciguar los ¨¢nimos, el propio Macky Sall les convocaba a un proceso de di¨¢logo pol¨ªtico para la aplicaci¨®n de las quince medidas de la reforma constitucional aprobada en las urnas.
Abdoulaye Wade, presidente del PDS y ex presidente de Senegal. / AFP
A principios de junio llegaba la sorpresa cuando el Partido Democr¨¢tico Senegal¨¦s (PDS), el partido que estuvo doce a?os en el poder con Abdoulaye Wade a la cabeza y principal fuerza de oposici¨®n, anunciaba su participaci¨®n en dicho di¨¢logo pol¨ªtico frente al boicot anunciado por la mayor¨ªa de los partidos. Entre bambalinas comenz¨® a surgir el rumor de que la condici¨®n planteada por Wade era la liberaci¨®n de su hijo y as¨ª lo manifestaron con claridad pol¨ªticos con largo recorrido como Idrissa Seck, ex primer ministro y eterno candidato a la Presidencia. As¨ª las cosas, Macky Sall ha vuelto a jugar sus cartas con sutileza, cumpliendo la principal demanda de sus enemigos pol¨ªticos sin saltarse la ley y aprovechando un periodo tan especial para los musulmanes como es el Ramad¨¢n.
Pese a que el perd¨®n presidencial ha sido muy estudiado y no exime a los tres afectados de pagar las correspondientes multas, lo cierto es que cuenta tambi¨¦n con detractores. Sin embargo, Macky Sall ha querido hacerlo cuando a¨²n faltan tres a?os para las elecciones presidenciales alejando as¨ª el fantasma de que su posible rival en las urnas, al que nunca se priv¨® de sus derechos pol¨ªticos, se presente como un m¨¢rtir ante los ciudadanos.
Karim Wade hace el gesto de la victoria. / AFP
El proceso judicial que condujo al encarcelamiento de Karim fue complejo y estuvo salpicado de acusaciones de vendetta pol¨ªtica. Fue el Tribunal para la Represi¨®n del Enriquecimiento Il¨ªcito el ¨®rgano jurisdiccional encargado de investigar el potente patrimonio acumulado por el hijo del ex presidente durante los a?os que form¨® parte del engranaje del poder en Senegal: cuentas bancarias que acumulaban 1,4 millones de euros, ocho veh¨ªculos de lujo, tres inmuebles valorados en 23 millones y, sobre todo, su presencia accionarial a trav¨¦s de sociedades interpuestas en una quincena de empresas y compa?¨ªas, la parte m¨¢s dif¨ªcil de rastrear que sus abogados se encargaron siempre de negar. En abril de 2013 Karim Wade era detenido y conducido a prisi¨®n a la espera de juicio.
Tras un proceso de dos a?os, el tribunal especial concluy¨® en marzo de 2015 que al menos unos 105 millones de euros de su vasto patrimonio proced¨ªan de actividades incompatibles con su cargo de ministro e ilegales, lo que le llev¨® a dictar una pena de seis a?os de c¨¢rcel para ¨¦l y otras penas de hasta cinco a?os para sus principales colaboradores, tambi¨¦n detenidos. La oposici¨®n puso el grito en el cielo y habl¨® de caza de brujas, opini¨®n apuntalada en las malas relaciones personales entre Karim y Macky Sall que a mediados de la d¨¦cada pasada condujeron a la dimisi¨®n de Sall como presidente de la Asamblea Nacional despu¨¦s de que, ya entonces, intentara promover una comisi¨®n de investigaci¨®n contra el hijo del ex presidente, y a su definitiva salida del PDS.
Ahora falta por resolverse una de las grandes inc¨®gnitas de cara al futuro pol¨ªtico de Senegal. ?Ser¨¢ finalmente Karim Wade el candidato del PDS para intentar arrebatar el sill¨®n presidencial a Macky Sall en 2019? Hoy por hoy salvo la figura emergente del alcalde de Dakar, el socialista Khalifa Sall, que a¨²n tendr¨¢ que desbrozar su camino hacia la candidatura en el seno de un esclerotizado Partido Socialista, no parece que haya otro aspirante tan serio como Karim Wade. Su anciano padre sue?a con esa posibilidad, aunque en su contra juega la imagen de ni?o mimado y protegido que Karim, quien fue criado en Francia entre algodones, todav¨ªa arrastra. Habr¨¢ que estar atentos a los movimientos que se produzcan en los pr¨®ximos meses para despejar la X de esta ecuaci¨®n.
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