La jornada parcial holandesa, una conquista y un problema

Los holandeses suelen encabezar las listas elaboradas por la ONU de las personas m¨¢s felices del mundo. En la correspondiente a 2013 ocupaban la cuarta plaza, por detr¨¢s de Suiza y Noruega, con Dinamarca en primera posici¨®n. Los ni?os, de su lado, son los m¨¢s afortunados de Europa, seg¨²n un estudio elaborado ese mismo a?o por Unicef. Para ambos organismos, el ¨¦nfasis puesto en la vida familiar supone la clave de tanta dicha. Hay tambi¨¦n una explicaci¨®n laboral: m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n activa trabaja a tiempo parcial, es decir, menos de 36 horas semanales, tal y como indicaba en 2015 Eurostat, la oficina de estad¨ªstica de la Uni¨®n Europea.

Cuadrar las cuentas a fin de mes con dicho horario se explica, en parte, por la riqueza del pa¨ªs, que el pasado julio sumaba un 6% de paro (con 17 millones de habitantes). Pero las cifras de Eurostat incluyen un dato m¨¢s dom¨¦stico. En el resto de la UE, un 32% de las mujeres y un 8,7% de los hombres tienen jornada partida. En Holanda, un 76,6% de f¨¦minas y un 26,8% de varones.

A pesar de que ambos sexos tienen derecho desde el a?o 2000 a pedir esa clase de contrato, sociol¨®gicamente se espera que las madres regresen al hogar antes de que los ni?os acaben el colegio. Como el horario de salida de primaria oscila entre las 12.30 y las 15.00, el medio d¨ªa de trabajo se logra a base de guarder¨ªas, parvularios y apoyo privado o familiar. Tanto, que Holanda es el pa¨ªs europeo que m¨¢s usa estas ayudas para menores hasta los tres a?os, seg¨²n acaba de calcular el Centro Nacional de Estad¨ªstica. ?Qu¨¦ significa todo ello para la presencia de las mujeres en puestos de responsabilidad? El Gobierno ha reiterado su amenaza de imponer cuotas si en 2016 no hay un 30% en la cima directiva. Un aut¨¦ntico reto, porque el bucle cultural no se desriza. Este mayo, una encuesta del mismo centro indicaba que solo el 3% de las chicas de entre 12 y 25 a?os desea trabajar a tiempo completo cuando tengan hijos. Ahora lo hace un 15% de las madres y un 85% de los padres.