La K¨²pula, refugio de africanidad
Josias Nganga (d), charlando con una socia (Autor: La K¨²pula)
Una de las repetidas demandas formuladas porlos africanos residentes en Madrid es la de un espacio donde reunirse, recordar sus ra¨ªces, recrear sus culturas y visibilizar su presencia. Esta petici¨®n, que est¨¢ lejosde cumplirse, podr¨ªa ser una realidad gracias a iniciativas como el Centro Cultural de Arte Internacional Autogestionado, tambi¨¦n conocido como La K¨²pula.
Situado en el madrile?o barrio de Aluche, lo dirge una junta de siete miembros oriundos de Guinea Conakry, Guinea Ecuatorial, Camer¨²n, Mozambique, Rep¨²blica de Congo y Espa?a. "La idea es crear una organizaci¨®n afro para federar la distintas asociaciones africanas", comenta el congole?o Josias Nganga, quien, aunque no le gusta que se diga, juega el papel de l¨ªder del grupo.
Es as¨ª porque lo avala su trayectoria. Afincado en Espa?a desde hace 12 a?os, tiene estudios de Gesti¨®n y Direcci¨®n de Empresa realizados en Francia, pa¨ªs donde cofund¨® la banda musical Bisso Na Bisso, junto con el c¨¦lebre Passi. Pese al ¨¦xito cosechado, decidi¨® montar su propia compa?¨ªa discogr¨¢fica para lanzar j¨®venes talentos africanos y afrodescendientes, con especialenfoqueen el hip hop. Y sabedor de que pocos productores apostaban por ellos en Espa?a, decidi¨®trasladarseaqu¨ª, un mercado a¨²n por conquistar.
Una vez en la pen¨ªnsula, mont¨®un grupo de artistas africanos con los que lanz¨® en Andaluc¨ªa Best Seller, un sencillo en el que retoman la canci¨®n "Noche de bohemia", de Navajita Plate¨¢, del que vendieron 8.000 copias. Posteriormente, fund¨® en la Tabacalera de Madrid -un espacio multicultural para la promoci¨®n de la diversidad- una academia llamada Kick Da Mic, con m¨¢s de 200 raperos. No obstante, este proyecto no tuvo larga vida: "justo cuando empez¨® a tener ¨¦xito, las personas que nos cedieron el espacio, viendo el logro, nos sacaron de all¨ª", lamenta Josias.
Fue en la b¨²squeda de otro espacio para desarrollar su arte que sus compa?eros y ¨¦l se toparon con unas antiguas oficinas de la Seguridad Social en Aluche. El edificio, que llevaba ocho a?os cerrado fue puesto en subasta, pero no hubo comprador. E informados de que los inmueblessin usar de la Seguridad Social pod¨ªan ser cedidos a entidades de utilidad p¨²blica,montaron un proyecto en este sentido. Pero, dado que a¨²n no son reconocidos como tal, la cosa no sali¨® adelante y optaron por negociar un alquiler.
Exposici¨®n fotogr¨¢fica que se celebra ensu sede (Autor: La K¨²pula)
Aunque nodice cu¨¢nto pagan, Josias asegura que el alquiler del local, que ocupan desde 2015, "es muy alto".Por esto, y siendo una asociaci¨®n de autogesti¨®n, han creado sus propios medios de financiaci¨®n. Tienen una sala de gimnasio, un estudio de grabaci¨®nde m¨²sica y un bar. Ceden, asimismo, el local a otras asociaciones de africanos residentes y embajadasacreditadas en Espa?a. Unos, para sus reuniones mensuales, otros para la celebraci¨®n de su fiesta nacional, conferencia y debates en los que han participadopersonalidades como Gaspar Llamazares, Baltazar Garz¨®n y Manuela Carmena, la actual alcaldesa de Madrid.
Tambi¨¦n organizan festivales con mensajes comprometidos, como el que tendr¨¢ lugar los d¨ªas 24 y 25 de septiembre de 2016 en la Plaza de Espa?a, en Madrid. Con anterioridad, actuaron en Lavapi¨¦s, Ciudad Lineal y Legan¨¦s, entre otros lugares."Cada vez que salimos, llevamos todo, nuestro arte, nuestra gastronom¨ªa, nuestras reivindicaciones, nuestro discurso contra los Centros de Internamiento de Extranjeros", asevera. Este activismo cultural se manifiesta tambi¨¦n en los conciertos deC¨²pula Groove, una banda musical de 18 miembros, entre cantantes y m¨²sicos.
En este camino recorrido merece especial atenci¨®n el proyecto afro-gitano-latino, que consiste en visibilizar a estos grupos, tanto en los medios de comunicaci¨®n como otrasplataformas, medianteuna alianza desde la gastronom¨ªa, la m¨²sica yla historia. Para alcanzar su meta, montan talleres de formaci¨®n, delengua (suahili), baile, cante ypintura a los que el p¨²blico espa?ol accede gratuitamente para mejor conocer la cultura de estos vecinos nuevos y no tan nuevos.
La experiencia est¨¢ siendo positiva,pero les quedan mucho por hacer. Sobre todo conseguir que losreconozcancomo asociaci¨®n de utilidad p¨²blica y consolidar de este modo su estatus de refugio de africanidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.