Mar¨ªa Calder¨®n, la alquimista del color
LOS CONOCIMIENTOS sobre los secretos del tinte de Mar¨ªa Calder¨®n la han convertido en la alquimista predilecta de los figurinistas espa?oles. De ah¨ª que m¨¢s de uno la llame la maga. ¡°Estudi¨¦ Qu¨ªmicas y durante casi dos d¨¦cadas trabaj¨¦ en un laboratorio textil haciendo formulaciones y ti?endo miles de metros de tejido. Un d¨ªa decidieron llevarse el taller a Casablanca y yo dije que a Marruecos no me iba. Entonces, hace 18 a?os, me lanc¨¦ a por mi sue?o de poner un taller de tinte para teatro¡±.
ENTONCES NO HAB?A NADIE QUE SE DEDICARA A ESO, HASTA QUE LLEG? ELLA. HA SIDO LA SALVACI?N DE ESTA PROFESI?N.
No ten¨ªa ni un contacto en la profesi¨®n, pero busc¨® trabajo en el lugar adecuado, en la tienda madrile?a Maty, que manufactura y vende art¨ªculos de danza desde hace m¨¢s de 70 a?os. Olga Zentil¨ªn, que trabaja en el establecimiento, recuerda perfectamente el d¨ªa que la conoci¨®: ¡°Me explic¨® que estaba especializada en tinte y me pregunt¨® si sab¨ªa a qui¨¦n pod¨ªa ofrecerse. Entonces no hab¨ªa nadie que se dedicara a eso, y cuando las compa?¨ªas me preguntaban, yo no sab¨ªa orientarlos. Hasta que lleg¨® ella. Ha sido la salvaci¨®n de esta profesi¨®n¡±. A la ma?ana siguiente, Calder¨®n recibi¨® una llamada de la Compa?¨ªa Nacional de Danza. ¡°Mi primer encargo fue un vestuario para Nacho Duato¡±, recuerda. Despu¨¦s tocaron a su puerta el Ballet Nacional, el Centro Dram¨¢tico Nacional, el Teatro Real. Hasta la busc¨® el cineasta Ridley Scott.
¡°Le he dicho dos veces que no porque su encargo requer¨ªa dejarlo todo para ir a su rodaje. Pero he hecho Torrente, El laberinto del fauno, Los del t¨²nel (de estreno en 2017) o El bar, el ¨²ltimo rodaje de ?lex de la Iglesia¡±. Ahora trabaja con sus dos hijas, Sandra (sastra) y M¨®nica (historiadora del arte y asesora hist¨®rica), en la serie La catedral del mar y en una zarzuela.
Estudiamos los tejidos, los tonos de color y c¨®mo funcionan en movimiento.
En las paredes del taller cuelgan con chinchetas recortes de peri¨®dico sobre Mar¨ªa Pag¨¦s o Eva Yerbabuena portando prendas tintadas por ella. Los dise?adores de vestuario Pedro Moreno, Felype de Lima o Pepe Reyes entran como si estuvieran en su casa. ¡°Pinchan sus dibujos en los corchos y nos preguntan si podemos hacer lo que tienen en mente. Estudiamos los tejidos, los tonos de color y c¨®mo funcionan en movimiento¡±. Para ello cuentan con decenas de botes de pintura, colorantes, pan de oro y pulverizadores repartidos por todos los rincones de su local, situado en Madrid. Sandra y M¨®nica recuerdan que, cuando su madre comenz¨®, en los programas de mano de las obras de teatro no se inclu¨ªa el tinte y la ambientaci¨®n. ¡°?Ahora s¨ª!¡±, exclama ella. Al verla en acci¨®n, se comprende. Pliegue a pliegue, pacientemente, introduce las prendas en las ollas con agua y colorante y las pinta al alza.
Mientras las remueve con una cuchara, explica el proceso. ¡°A veces puedo estar 10 horas viendo la evoluci¨®n del color hasta que doy con lo que busco. Dos m¨¢s dos nunca son cuatro en este oficio y, aunque la t¨¦cnica est¨¦ muy avanzada, el color¨ªmetro (una herramienta que identifica el color) no ha conseguido hacerlo como el ojo humano¡±. Sus manos, que esconde avergonzada por tenerlas siempre te?idas, delatan en qu¨¦ anda trabajando. ¡°Abrimos de nueve a nueve. De lunes a domingo. Y hemos llegado a preparar seis estrenos simult¨¢neos¡±.
En ocasiones, su trabajo puede acabar hasta un cuarto de hora antes del estreno. ¡°Nos recuerdo en Carmen, de Carlos Saura, en el Palau de les Arts de Valencia, ti?endo y terminando prendas con los secadores de mano de los ba?os 15 minutos antes de que se levantara el tel¨®n¡±, cuenta entre risas su hija M¨®nica. Pero para nervios los que pasan cuando les faltan botes de pintura. ¡°Hasta que no tienes delante el tejido no sabes cu¨¢nto vas a necesitar. Y los pedidos de color a veces tardan una semana¡±, dice Mar¨ªa. ¡°Porque este arte no es una ciencia exacta¡±, a?ade.
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