Un error inform¨¢tico frustr¨® el aterrizaje en Marte de la nave de ExoMars
Los investigadores buscan los errores tras el accidente de 'Schiaparelli' para evitar repetirlos en la misi¨®n de 2020
La Agencia Espacial Europea (ESA) sospecha que el aterrizaje frustrado de la misi¨®n ExoMars 2016 en Marte se debi¨® a un fallo de software que hizo pensar al ordenador del m¨®dulo de aterrizaje Schiaparelli que estaba en el suelo antes de tiempo.
Jorge Vago, cient¨ªfico del proyecto ExoMars, ha explicado a la revista Nature que los propulsores que deb¨ªan desacelerar la nave durante 30 segundos solo dedicaron 3 a esta tarea y despu¨¦s se apagaron porque el ordenador pens¨® que estaba ya en el suelo. Son los resultados de un an¨¢lisis preliminar que sugiere que el m¨®dulo de aterrizaje inici¨® la maniobra sin problemas, pero que se trunc¨® a los 4 minutos y 41 segundos de una ca¨ªda que ten¨ªa que durar 6 minutos. Seg¨²n Vago, el escudo t¨¦rmico de la sonda y el paraca¨ªdas fueron expulsados antes de tiempo y la desaceleraci¨®n dur¨® mucho menos de lo programado.
La nave cay¨® desde una altura estimada de entre dos y cuatro kil¨®metros antes de golpear contra el suelo a m¨¢s de 300 kil¨®metros por hora, de acuerdo con estimaciones basadas en im¨¢genes del lugar probable del accidente de la sonda, tomadas por el Orbitador de Reconocimiento de Marte de la NASA el 20 de octubre. A diferencia de la misi¨®n Beagle 2 brit¨¢nica, dirigida y operada por la ESA, que desapareci¨® durante su aterrizaje en Marte el d¨ªa de Navidad de 2003, Schiaparelli envi¨® datos a su nave nodriza durante su descenso.
Andrea Accomazzo, responsable de operaciones de naves espaciales de la ESA, se ha mostrado reacio a realizar un diagn¨®stico antes de examinar todos los elementos. A pesar de ello, considera que la causa m¨¢s probable es un fallo en el software de la nave o un problema en la fusi¨®n de los datos procedentes de diferentes sensores, que pueden haber llevado la nave a creer que estaba a una altura m¨¢s baja de lo que realmente se encontraba.
Esta primera fase de ExoMars ten¨ªa dos objetivos: enviar una sonda orbital, llamada Orbitador de Gases Traza, que se ha insertado en la ¨®rbita del planeta con ¨¦xito, y probar tecnolog¨ªas de aterrizaje con Schiaparelli de cara a la segunda fase, cuando se planea enviar un veh¨ªculo de exploraci¨®n m¨®vil a la superficie de Marte que llegar¨ªa en 2021. El presupuesto total de la misi¨®n es de unos 1.300 millones de euros.
Dar con los errores de Schiaparelli y corregirlos es una prioridad, apunta el cient¨ªfico del proyecto. El ordenador, el software y los sensores son algunos de los componentes del m¨®dulo de aterrizaje que se quieren reutilizar en la misi¨®n de 2020, que a diferencia de Schiaparelli, mezclar¨¢ tecnolog¨ªa europea y rusa. Un error en el software es m¨¢s f¨¢cil de corregir que un problema con el sistema de aterrizaje, contemplan en la ESA, que creen que este elemento ha pasado la prueba con creces. Seg¨²n Vago, el equipo de ExoMars intentar¨¢ recrear el error utilizando un sistema de aterrizaje virtual de cara a la misi¨®n de 2020.
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