Uber prioriza las metr¨®polis africanas

La startup de moda,?Uber, o la alternativa a los tax¨ªmetros impulsada por las nuevas tecnolog¨ªas, se consolida en las principales ciudades africanas. Tres a?os despu¨¦s de que la empresa norteamericana aterrizara en Sud¨¢frica, y casi dos a?os desde que K¨¦nia o Nigeria adoptaran la aplicaci¨®n m¨®vil, la escasez de trabajos o la insuficiente red de transportes urbanos, han facilitado a la compa?¨ªa la expansi¨®n en el continente. Engrosando la lista de las cerca de 400 ciudades en las que opera actualmente la empresa, la competencia y las especificidades de los usuarios en las urbes africanas han obligado a la compa?¨ªa a adecuar ciertos aspectos de su modus operandi para "uberificar" el continente. Y es que Uber se ha convertido en un verbo internacional.

Mientras las principales capitales africanas luchan contra unas tasas de desempleo juvenil calamitosas - del 42% de la juventud en el caso de Nairobi o del 40% en Johannesburgo-, Uber se abre paso a una realidad socioecon¨®mica ¨¢vida de posibilidades de trabajo y oportunidades esperanzadoras para millones de africanos y africanas. Operando actualmente en 15 ciudades de 8 pa¨ªses del continente, es en Sud¨¢frica, donde la aplicaci¨®n se puede utilizar en Johannesburgo, Tshwane, Ciudad del Cabo o Port Elizabeth, donde hay m¨¢s fidelidad en toda la regi¨®n subsahariana. Sin embargo, tal como recientemente informaba Uber, el Cairo - megaurbe con 19 millones de habitantes- es la metr¨®polis africana con m¨¢s clientes en la plataforma.

Adaptarse o morir

Si bien Alon Lits, Director General de Uber en ?frica Subsahariana, afirmaba hace pocos meses durante el pistoletazo de salida de la aplicaci¨®n en Dar Es Salaam y Accra, que "?frica es la mayor y m¨¢s reciente prioridad de expansi¨®n" para la compa?¨ªa, su desarrollo en las metr¨®polis africanas no es a¨²n una batalla ganada.

Los GPS no pueden guiar a un conductor por todas las calles de las principales ciudades africanas, cuyos barrios informales (donde reside aproximadamente un 60-70% de la poblaci¨®n) no est¨¢n debidamente identificados por los servicios de cartograf¨ªa en l¨ªnea de Google. Tampoco todos los pasajeros utilizan cuentas bancarias para sus pagos. Por ello, Uber ha tenido que adaptarse, en pa¨ªses como K¨¦nia, a las din¨¢micas de los negocios de transporte locales, y cambiar Google Maps por la compa?¨ªa keniana Okhi, que utiliza im¨¢genes del lugar de destino para ayudar al conductor a localizar la direcci¨®n buscada. Tambi¨¦n ha incorporado el sistema de pago a trav¨¦s del tel¨¦fono M-PESA, de la compa?¨ªa tambi¨¦n keniana Safaricom. En este sentido, la adaptaci¨®n de Uber al mercado africano tambi¨¦n ha hecho que la startup incorpore la posibilidad de compartir viajes (UberPOOL) con otros clientes que hacen la misma ruta, para abaratar costes a sus pasajeros.

A pesar de todo, los principales desaf¨ªos de Uber en ?frica no son tecnol¨®gicos, sino m¨¢s bien sociales. El rechazo del sector transportes en Nairobi se hizo patente cuando presuntamente, un grupo de taxistas, incendiaban un coche que operaba para Uber, con su conductor dentro, a principios de 2016. Otro incidente violento en Sandton, Johannesburgo, obligaba a la plataforma a suspender temporalmente sus servicios dos meses m¨¢s tarde.

Competidores (o cobayas) de Uber en ?frica

Aunque, el m¨¢ximo competidor de Uber en el continente, la aplicaci¨®n sudafricana Easy Taxi - tambi¨¦n financiada, como Uber, por Goldman Sachs-, abandonara el mercado africano a principios de 2016 para centrarse en el mercado latinoamericano; a Uber le siguen saliendo competidores locales por doquier.

La empresa estonia Taxify, presente en el panorama sudafricano, o las moto-taxis de la compa?¨ªa saud¨ª Mondo Ride en K¨¦nia o Tanzania, le disputan el emporio a Uber en Nairobi o Dar Es Salaam. En la capital keniana, empresas locales como Little Cab o Maramoja, que conocen mucho mejor el terreno local y cobran por zonas, muestran un mayor ¨¦xito entre la clase media del pa¨ªs. En Etiop¨ªa, ZayRide pretende suplir la ausencia de Uber en la capital que aloja la Uni¨®n Africana. Y es que los patrones que se vienen desarrollando en materia de aplicaciones m¨®viles para solicitar transporte privado en otras ciudades como Lagos, hacen patente que compa?¨ªas como la m¨¢s veterna, Oga Taxi, o la m¨¢s innovadora, Afrocab, que incluye pr¨¢cticas de mercado como el regateo como formas fundamentales para acordar el precio por trayecto, se adecuan mejor a las necesidades de los clientes de la regi¨®n.

Estas peque?as, y no tan peque?as, compa?¨ªas locales, representan competidores africanos eficaces para frenar el avance de la gigantesca aplicaci¨®n norteamericana en ?frica; pero a la vez, son perfectas cobayas para que Uber siga averiguando como adaptarse a los usuarios del continente.