Arte, ¨¢ngeles y candidatos
Par¨ªs se pone las alas, la vieja Francia y Sybilla en Miami
Par¨ªs se pone las alas
Por primera vez, el desfile de Victoria¡¯s Secret se ha celebrado en la capital de la moda. Y la moda se ha rendido a sus pies. O al menos, se ha sentado en primera fila. ?C¨®mo el que se re¨²ne con sus amigos a ver ( y criticar) el festival de Eurovisi¨®n? Entre los asistentes, iconos de la frenchattitude. La exmodelo In¨¨s de la Fressange, el actor Vincent Cassel o los dise?adores Azzedine Ala?a y Haider Ackermann, todos (en teor¨ªa) no muy de la onda surfera y el relleno en el sujetador, pero¡
La vieja Francia
El resto de Francia vive de primaria en primaria, ajena a los ¨¢ngeles con push up. La derecha ya ha elegido a su caballero de reluciente armadura. Entre Jupp¨¦ y Fillon, los chers compatriotes se han quedado con el m¨¢s guerrero. Y con un pelazo envidiable, por si no lo han notado. Hollande, un poco desguarnecido despu¨¦s de un quinquenio marcado por la crisis y los atentados grav¨ªsimos, se retira de la contienda y deja sitio a Valls y Montebourg. Tambi¨¦n tienen pelazo. ?Tendr¨¢ algo que ver?
Sybilla en Miami
La capital de la moda, con el permiso de Par¨ªs, en diciembre se muda a Miami. Todo los que no estaban en la capital del Sena est¨¢n en Art Basel, la cita imprescindible de la alegre tribu que se mueve por el planeta como ustedes nosotros por el pasillo del Carrefour. El mundo de la moda necesita nuevos escenarios y lo que comenz¨® como una t¨ªmida toma de contacto moda-arte con alguna fiestecilla de Gucci o Calvin Klein para la multitud arty, este a?o ha dado paso al gran desembarco. Dior, Anya Hindmarch, Missoni, Loewe, Saint Laurent e incluso Sybilla, con el vestuario para la obra de la core¨®grafa Pam Tanowitz.
Por cierto, Oscar Wilde muri¨® en una semana como esta hace 116 a?os. Lo que hubiera disfrutado.
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