Velocidad
Pienso que si el alma humana existe, solo si no tiene masa y por tanto tampoco tiene peso, podr¨ªa ir al cielo o al infierno a la velocidad de la luz cuando con la muerte se separe de tu cuerpo
Para dulcificar el insomnio acostumbro a o¨ªr tangos. Sus letras melanc¨®licas me ayudan a navegar la noche, pero en medio de esos amores malevos que canta Carlos Gardel, a veces elaboro in¨²tiles disquisiciones que a?aden m¨¢s confusi¨®n a la oscuridad y entonces me duermo. Para conciliar el sue?o, a altas horas de la madrugada, con m¨²sica de tango, pienso, por ejemplo, si la f¨®rmula e=mc?, energ¨ªa es igual a materia por velocidad al cuadrado, con la que Einstein expres¨® la Teor¨ªa de la Relatividad, se puede aplicar tambi¨¦n al esp¨ªritu humano, ahora que la f¨ªsica cu¨¢ntica y el telescopio Hubble est¨¢n ya invadiendo el terreno de la teolog¨ªa. Nada puede viajar por el universo a la velocidad de la luz ni a una superior a ella, seg¨²n el postulado de Einstein, que nadie discute. Solo si un objeto no tuviera masa, como los fotones, podr¨ªa trasladarse a 300.000 kil¨®metros por segundo. Mientras Gardel vuelve con la mente marchita de no se sabe donde, pienso que si el alma humana existe, solo si no tiene masa y por tanto tampoco tiene peso, podr¨ªa ir al cielo o al infierno a la velocidad de la luz cuando con la muerte se separe de tu cuerpo. Pero no est¨¢ demostrado que el alma exista, sobre todo que la tengan algunos hijos de perra, y por otra parte si el para¨ªso y el infierno est¨¢n situados en un punto extremo del universo, sin duda, tardar¨¢ miles de a?os luz en llegar; en cambio estos pensamientos inanes con los que paso la noche, que tampoco tienen peso alguno, congelan el tiempo y el espacio y superan la velocidad de la luz porque al recordar alguna magdalena de Proust de mi ni?ez la vuelvo a vivir en la memoria y si pienso en la estrella m¨¢s remota de la ¨²ltima galaxia, solo de pensarla, ya estoy en ella; aunque de esa estrella se vuelve, como Gardel, con la mente tan marchita y cansada que uno enseguida se queda dormido.
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