Volver posible lo imposible
La implementaci¨®n r¨¢pida del acuerdo con las FARC es decisiva para que la paz se consolide
Luego de m¨¢s de 50 a?os de conflicto armado, luego de m¨¢s de 34 a?os de intentar sin ¨¦xito alcanzar la paz, muchos colombianos perdieron la esperanza y creyeron que la paz ser¨ªa inalcanzable. Un imposible. Hoy, despu¨¦s de seis a?os de largas, dif¨ªciles y complejas negociaciones, podemos decir que los colombianos logramos volver posible lo imposible. Convertimos el sue?o de la paz en realidad.
Otros art¨ªculos del autor
El camino no ha sido f¨¢cil. La derrota del plebiscito, aun por tan estrecho margen, sorprendi¨® a Colombia y al mundo entero. Pero la voluntad de paz, el anhelo de paz de los colombianos nunca desfalleci¨®.
Por eso inici¨¦ un gran di¨¢logo nacional para escuchar y recoger las preocupaciones y las propuestas de los que promovieron el no y tambi¨¦n de los defensores del s¨ª. Esas propuestas las acogimos e hicimos nuestras para llevarlas a la mesa de negociaciones con las FARC.
De all¨ª surgi¨® un nuevo acuerdo, enriquecido, ajustado y modificado con la inmensa mayor¨ªa de las iniciativas y alternativas sugeridas por los m¨¢s diversos sectores de la sociedad. As¨ª lo han reconocido las v¨ªctimas, las comunidades ind¨ªgenas y afrodescendientes, la Iglesia, los empresarios, los gremios, las Altas Cortes, los gobernantes locales.
?C¨®mo podr¨ªa alguien cuestionar la legitimidad del poder legislativo? All¨ª se re¨²nen las voces de todos los departamentos y regiones y todas las opciones pol¨ªticas?
Este nuevo acuerdo fue tambi¨¦n debatido y refrendado por el Congreso de la Rep¨²blica, tanto en el Senado como en la C¨¢mara de Representantes. ?C¨®mo podr¨ªa alguien cuestionar la legitimidad del poder legislativo? All¨ª se re¨²nen las voces de todos los departamentos y regiones, todas las opciones pol¨ªticas est¨¢n representadas. Es en su seno, por mandato expreso de nuestra Constituci¨®n, como lo es en toda democracia, donde reside la representaci¨®n popular. As¨ª lo ha se?alado tambi¨¦n el Consejo de Estado, la alta Corte m¨¢s antigua y que se?ala al Gobierno lo que puede y no puede hacer.
Es el foro natural y leg¨ªtimo para la discusi¨®n y aprobaci¨®n de las normas que rigen la naci¨®n, y no podr¨ªa haber tema m¨¢s importante que el de la paz y el fin del conflicto. En la gran mayor¨ªa de las democracias es el Congreso quien autoriza al Ejecutivo a declarar la guerra (en Colombia as¨ª lo se?ala el art¨ªculo 212 de la Constituci¨®n Nacional).
El acuerdo de paz alcanzado es una oportunidad hist¨®rica para Colombia. Pero como todas las oportunidades, hay que actuar de manera decidida y eficaz, para no perderla.
Consolidar la paz alcanzada necesita que el acuerdo firmado con las FARC se lleve a la pr¨¢ctica a la brevedad, sin dilaciones ni demoras. El ¨¦xito de todo acuerdo est¨¢ directamente ligado a su r¨¢pida implementaci¨®n. No hacerlo promueve la desconfianza entre los actores, mina el buen entendimiento y termina por poner en riesgo el acuerdo mismo.
La construcci¨®n de la paz es un largo y dif¨ªcil camino que requerir¨¢ de la participaci¨®n, el compromiso y el trabajo de todos los colombianos. La paz no es de un presidente, ni de un Gobierno. Es del pa¨ªs entero. Esta es una ocasi¨®n ¨²nica en la historia de la Rep¨²blica.
La comunidad internacional entera ha respaldado de manera un¨¢nime y contundente la negociaci¨®n y el acuerdo de paz de Colombia. En ello la Uni¨®n Europea y Espa?a han jugado un papel fundamental. Ahora, frente el reto de la construcci¨®n de la paz, los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea siguen al lado de Colombia y nos apoyan en esta tarea transformadora. As¨ª qued¨® plasmado con la creaci¨®n del Fondo Fiduciario para el Posconflicto, que moviliza 590 millones de euros. A Europa, a Espa?a, va nuestro m¨¢s profundo y sincero agradecimiento.
Estoy convencido, as¨ª lo he dicho y lo reitero, que es posible alcanzar un acuerdo nacional para la implementaci¨®n del acuerdo. No tendremos que ponernos de acuerdo en todo. Pero estoy seguro que es posible encontrar puntos esenciales alrededor de los cuales podemos unirnos todos los colombianos.
Unidos como naci¨®n, haremos de Colombia un lugar mejor, donde la violencia no reine, donde las diferencias se tramiten con respeto por el otro, donde el progreso y el bienestar no sigan frenados por el conflicto. En esa Colombia tolerante y diversa podr¨¢n aflorar nuestros talentos, podr¨¢ desarrollarse plenamente nuestro potencial y hacer de nuestro pa¨ªs el pa¨ªs que queremos y nos merecemos todos.
Juan Manuel Santos es presidente de Colombia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.