Yo te dir¨¦
Es muy desconcertante que la Conferencia Episcopal se haya implicado en una pel¨ªcula tan poco devota de Dios y de la Patria, y tan llena de rojos, como '1898. Los ¨²ltimos de Filipinas'
Los ¨²ltimos de Filipinas de Antonio Rom¨¢n, un acontecimiento del cine espa?ol de la posguerra, es patri¨®tica, cat¨®lica y militarista. En cambio, 1898. Los ¨²ltimos de Filipinas de Salvador Calvo es antibelicista, descre¨ªda y esc¨¦ptica. Cada una es hija de su tiempo pero es curioso c¨®mo una misma historia ¡ªla tozuda resistencia de ¡°los h¨¦roes de Baler¡±¡ª ha recibido dos miradas que apenas tienen que ver. Quiz¨¢ lo que m¨¢s las une es la habanera Yo te dir¨¦, que en 1945 cant¨® Nani Fern¨¢ndez y en 2016 borda Carmen Par¨ªs.
Pero lo que parece m¨¢s desconcertante es la implicaci¨®n de la Conferencia Episcopal ¡ªa trav¨¦s del canal 13 TV¡ª en una pel¨ªcula tan poco devota de Dios y de la Patria, y tan llena de rojos, como la reci¨¦n estrenada. Hubo una ¨¦poca, durante el esplendor del nacionalcatolicismo, en que la Iglesia tuvo un peso decisivo en nuestro cine, del que apreciaba su poder engatusador y adoctrinante. Pero hace demasiado que la Iglesia contempla al cine espa?ol con recelo, indiferencia o, directamente, asco y desprecio. Que haya resucitado su inter¨¦s con una pel¨ªcula alejada con tanto descaro de sus eternas convicciones marca un llamativo punto y aparte. Merece la pena especular c¨®mo se ha podido producir el milagro.
Barajo tres posibilidades: que la confianza que inspiraba la primera versi¨®n hiciera que nadie se molestara en leer el guion de la segunda; que alguien, en su ¨ªmpetu por desmentir la imagen de la Iglesia como una instituci¨®n fosilizada, fanatizada y sectaria, perdiera el oremus o que el encargado de informar de los guiones en la Conferencia Episcopal haya resultado ser un quintacolumnista. Cualquier otra explicaci¨®n me va a decepcionar casi seguro.
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