Corresponsal en la zona
La t¨¦cnica de ofrecer menos datos de los disponibles, para inducir a enga?o, alcanza a los actos m¨¢s cotidianos del periodismo
Se puede decir una mentira sin mentir. Se puede enga?ar contando datos verdaderos. El truco consiste en exponer unos hechos ciertos y, silenciando otros, inducir a una interpretaci¨®n falsa.
Cuando se da menos informaci¨®n relevante de la que se tiene o se puede obtener, el p¨²blico la completar¨¢ mediante unos mecanismos psicol¨®gicos en los que influyen el contexto, las analog¨ªas, la experiencia, los recuerdos, las creencias...
Si nos cuentan de un amigo aficionado a la velocidad y el riesgo que se ha matado en un accidente de coche, pensaremos de inmediato que era ¨¦l quien conduc¨ªa. S¨®lo cuando nos aclaren que viajaba en el asiento trasero saldremos del error. Y si nadie nos precisa eso, asumiremos sin dudar la creencia equivocada.
La t¨¦cnica de ofrecer menos informaci¨®n de la que se tiene, para llevar a conclusiones falsas, alcanza a veces a los actos m¨¢s cotidianos del periodismo. As¨ª sucede cuando desde la Redacci¨®n central se anuncia la cr¨®nica del ¡°corresponsal en la zona¡±.
Los significados de ¡°zona¡± o ¡°regi¨®n¡± dependen del contexto. Hablamos de una zona de la casa o de una zona del mundo; de una regi¨®n como La Rioja o de toda la regi¨®n sudamericana. Pero en periodismo se dice a veces ¡°la zona¡± para omitir el lugar concreto donde se halla el periodista, disimular la distancia real y dar una apariencia de cercan¨ªa con la noticia.
El pasado domingo se cometi¨® un atentado en Egipto (murieron al menos 23 personas) y un locutor de radio present¨® as¨ª al compa?ero a quien dio paso: ¡°Informa nuestro corresponsal en la zona¡±. Esa zona ten¨ªa un radio de unos 400 kil¨®metros, porque se trataba del corresponsal en Jerusal¨¦n. En otras ocasiones ocurre algo en un pa¨ªs de Am¨¦rica Latina y el corresponsal radicado en M¨¦xico o Buenos Aires se hallar¨¢ quiz¨¢s a unos 5.000 kil¨®metros del suceso y ser¨¢ tambi¨¦n ¡°corresponsal en la zona¡±.
Al o¨ªr eso, el p¨²blico entender¨¢ ¡°zona¡± como el entorno m¨¢s inmediato de los hechos y supondr¨¢ al periodista sobre el terreno, quiz¨¢ porque ¨¦sa es la imagen que se ha configurado hasta ahora en su mente sobre el trabajo de los reporteros.
El 11 de marzo de 2011, cuando se desat¨® el tremendo terremoto de Jap¨®n, una cadena de televisi¨®n tambi¨¦n dio paso a su ¡°corresponsal en la zona¡±. Pero la periodista se encontraba en Pek¨ªn (eso se ocult¨®), a unos 2.000 kil¨®metros del se¨ªsmo. Ahora bien, el presentador no dijo ning¨²n dato falso. ?sa es la zona que llamamos Oriente.
Recorrer el lugar del suceso, describir lo que se ve y obtener testimonios directos no queda al alcance del corresponsal en la zona, sino del periodista que s¨ª est¨¢ en ese lugar. La cr¨®nica que elabore desde otro pa¨ªs cercano apenas se diferenciar¨¢ de la que podr¨ªa ofrecer desde Barcelona o Madrid; y por eso se silencia ese dato, para que el p¨²blico imagine al informador donde no se halla.
Ahora bien, los corresponsales en la ¡°zona¡± o en la ¡°regi¨®n¡± suelen conocer muy bien las fuentes y la situaci¨®n pol¨ªtica de los pa¨ªses de su entorno. Tal vez se diera m¨¢s valor a esas cr¨®nicas si fuesen presentados como el ¡°especialista de la emisora en Oriente Pr¨®ximo¡±, o como el ¡°entendido en temas latinoamericanos¡±... y f¨®rmulas similares. La opci¨®n ¡°nuestro corresponsal en la zona¡± puede derivar en enga?o. Y los medios deben huir siempre de las trampas, incluidas las que parecen peque?as.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.