Retrato de San Petersburgo sin la URSS
PETER ES un proyecto personal que plantea un acercamiento a Rusia, a esta vieja naci¨®n asentada sobre la desmembrada Uni¨®n Sovi¨¦tica hace ahora 25 a?os. Peter, o Piter, como llaman familiarmente sus ciudadanos a San Petersburgo, Petrogrado o Leningrado, seg¨²n el nombre que decidiesen las autoridades, ha sido y es decisiva en la pol¨ªtica y en la vida intelectual del pa¨ªs. La antigua capital imperial nacida por odio a Mosc¨² hace de bisagra con Europa. Con la llegada de la perestroika, las catedrales e iglesias que hab¨ªan sido socializadas, abandonadas, profanadas y utilizadas como almacenes, teatros, clubes de baile, morgues y piscinas empezaron a recuperar su culto y el creciente poder religioso. En estos a?os se han llenado de alimentos las estanter¨ªas, de coches las calles, equiparado el precio del transporte entre rusos y extranjeros. Llegaron las academias de idiomas, los hoteles, los hostels, la moda rusa, los malls, las franquicias o los seguros de veh¨ªculos y del hogar. Tras a?os de abandono gubernamental, est¨¢ recuperando el viejo esplendor que la hizo famosa con el apoyo del presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, que naci¨® en ella. Y se ha acentuado la brecha entre San Petersburgo y Mosc¨² respecto al resto del pa¨ªs.
pulsa en la fotoLa plaza de la Victoria, un recuerdo a los defensores de Leningrado frente el asedio alem¨¢n en la Segunda?Guerra Mundial. (2001).Carma Casul¨¢
Este trabajo, realizado entre 2001 y 2015 y recogido en el libro Peter (RM Verlag, 2016), tiene dos hilos conductores que se entrelazan y complementan. Uno est¨¢ marcado por el recorrido de la ciudad y la vivencia de sus espacios, el de ese centro monumental con aromas del viejo continente que desborda belleza y riqueza. Es el foco m¨¢s tur¨ªstico del pa¨ªs, al que peregrinan casi con devoci¨®n los rusos, que convive con sus austeras periferias sovi¨¦ticas mezcladas con los nuevos bloques de la voraz especulaci¨®n urban¨ªstica. El otro hilo es un trazado descrito por mis paradas. Se adentra en otro mapa de la ciudad, el de la gente y sus hogares, el de sus vidas, y las cuestiones que les interesan o preocupan. En aquello por lo que sienten mayor apego. El mapa de los ciudadanos de Peter.
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