Los robots atacan
Casi la mitad de los trabajadores en los pa¨ªses avanzados corren el riesgo de perder sus puestos por la automatizaci¨®n de sus funciones
Tras a?os en la gruta de la crisis, salimos a la luz. Para encontrarnos frente a un enemigo a¨²n m¨¢s amenazante: los robots. Cerramos un buen a?o para el empleo. Pero abrimos unas d¨¦cadas de l¨®gico temor ante la imparable robotizaci¨®n de nuestros trabajos.
Los augures han destripado todas las v¨ªsceras estad¨ªsticas. Sus profec¨ªas son siniestras. Casi la mitad de los trabajadores en los pa¨ªses avanzados, y m¨¢s todav¨ªa en los emergentes, corren el riesgo de perder sus puestos por la automatizaci¨®n de sus funciones. Taxistas, dependientes de tiendas, pero tambi¨¦n contables, auditores o t¨¦cnicos especializados. Toda actividad que incluya rutinas, por complejas que sean y por a?os de formaci¨®n que requieran, es susceptible de ser apropiada por las m¨¢quinas.
?Qu¨¦ podemos hacer? Como siempre, cuanto m¨¢s incierto es el futuro, m¨¢s hay que mirar al pasado. Ello nos ayudar¨¢ a aterrizar los miedos y a cribar las soluciones m¨¢s sensatas.
Lo primero que nos ense?a la historia es que anteriores procesos de mecanizaci¨®n han trazado un patr¨®n similar. Al p¨¢nico inicial sobre la p¨¦rdida de puestos de trabajo sigue, un tiempo despu¨¦s, la ilusi¨®n por la creaci¨®n de nichos de ocupaci¨®n en sectores insospechados. Las distintas olas de industrializaci¨®n no s¨®lo no menoscabaron las oportunidades profesionales de los trabajadores, sino que permitieron la expansi¨®n de la masa laboral de un pa¨ªs, incorporando, por ejemplo, a mujeres que hasta entonces hab¨ªan estado apartadas de la econom¨ªa formal. Los caballos y los bueyes perdieron. Los humanos ganamos.
El pasado tambi¨¦n nos indica la mejor estrategia a seguir frente al miedo que todo salto tecnol¨®gico desata. Hist¨®ricamente, no funcion¨® el escapismo de los obreros que destru¨ªan m¨¢quinas ni el de los intelectuales que, resignados a un futuro sin trabajo, propon¨ªan soluciones ut¨®picas, como una renta b¨¢sica incondicionada. Lo que funcion¨® fue el dise?o de seguros p¨²blicos inteligentes que combinaran protecci¨®n a las v¨ªctimas temporales de la mecanizaci¨®n junto con incentivos al trabajo.
As¨ª fue como Bismarck, o la socialdemocracia, derrotaron a Terminator. @VictorLapuente
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