F¨®rmulas para una ciudad de diez
La nueva agenda urbana propone crear espacios inclusivos y aprovechar nuevos recursos
La Real Academia Espa?ola define ciudad como ¡°un conjunto de edificios y calles, regido por un Ayuntamiento, cuya poblaci¨®n densa y numerosa se dedica por lo com¨²n a actividades no agr¨ªcolas¡±. Tal explicaci¨®n, sin c¨¢lculos de habitantes ni componentes emocionales, languidece al enfrentarla al nuevo concepto: el medio urbano ha de ser un espacio inclusivo, participativo y sostenible. Los factores principales para lograr esos objetivos se reparten entre un cambio en la movilidad, una legislaci¨®n acorde y una financiaci¨®n adecuada.
Al menos es en lo que han coincidido los participantes de la jornada Los objetivos de desarrollo sostenible y la nueva agenda urbana, celebrada este mi¨¦rcoles en el Colegio de Arquitectos de Madrid. All¨ª, regidores de distintas capitales de comunidades espa?olas y expertos en ordenaci¨®n ciudadana expusieron los ¡°retos y oportunidades¡± que plantean estos nuevos paradigmas. Reunidos por la Oficina Regional para Am¨¦rica Latina y el Caribe del Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (ONU H¨¢bitat), todos remarcaron que tratar estos asuntos es de vital importancia, pues ya se estima que la mitad de la poblaci¨®n vive en estos entornos y que para 2030 la cifra alcanzar¨¢ el 60%.
¡°?Qu¨¦ es lo primero? Realizar un diagn¨®stico¡±, avis¨® Joan Clos, alcalde de Barcelona desde 1997 hasta 2006 y actual director ejecutivo de ONU H¨¢bitat. ¡°Hay que marcar las diferencias entre las ciudades en los pa¨ªses desarrollados y las de pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo¡±, matiz¨®, ¡°para encontrar fen¨®menos globales¡±. Dos de ellos, indic¨®, son el cambio clim¨¢tico y la accesibilidad. ¡°El consumo urbano genera un 70% del total de gases emitidos a la atm¨®sfera¡±, se?al¨®, refiri¨¦ndose al primer punto, ¡°y los n¨²cleos est¨¢n encareci¨¦ndose de tal forma que se ha provocado la expulsi¨®n de la clase media a la periferia y la estratificaci¨®n por clases sociales en barrios¡±.
En las metr¨®polis del ?frica subsahariana el 65% de la poblaci¨®n reside en asentamientos precarios
Con ejemplos de Par¨ªs y sus?banlieues (suburbios), pero tambi¨¦n de metr¨®polis del ?frica subsahariana, donde la urbanizaci¨®n ha reca¨ªdo en manos privadas y el 65% reside en asentamientos precarios, Clos subray¨® que las ciudades contemplan unos desaf¨ªos de transporte y servicios b¨¢sicos desconocidos. ¡°La diferencia entre el pago de una vivienda y el salario se ha ido acortando, acarreando la disgregaci¨®n y la imposibilidad de crear una comunidad con voz que la defienda¡±, acus¨®.
¡°No podemos tener ciudades binomiales donde unos vayan a colegios privados y vivan en condominios cerrados y otros sufran la inseguridad de la pobreza¡±, a?adi¨® Fernando Garc¨ªa Casas, Secretario de Estado de Cooperaci¨®n Internacional y para Iberoam¨¦rica. ¡°De la lista mundial de ciudades m¨¢s peligrosas, 11 pertenecen a Iberoam¨¦rica. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) ya ha decretado como pandemia m¨¦dica los asesinatos de lugares como el tri¨¢ngulo formado por Guatemala, El Salvador y Honduras, que superan los 5.000 anuales¡±. Y agreg¨® que, en cuesti¨®n de movilidad, ya hay 300 coches por cada 1.000 habitantes en muchas partes del continente y de que en Brasil m¨¢s de 8.000 motoristas fallecen al a?o en accidentes de tr¨¢fico.
El encuentro reuni¨® a tres de las principales figuras que han dado un vuelco al panorama pol¨ªtico nacional en los ¨²ltimos tiempos: Manuela Carmena y Ada Colau ¡ªalcaldesas de Madrid y Barcelona con las formaciones Ahora Madrid y Barcelona En Com¨², respectivamente¡ª y Joan Rib¨®, alcalde de Valencia y l¨ªder municipal de Comprom¨ªs. Cada uno de ellos desgran¨® sus prioridades a la hora de construir ese entorno cooperativo en comp¨¢s con los vecinos y el medioambiente. Con actuaciones parecidas en los lugares que representan, abogaron por el optimismo, criticaron las partidas presupuestarias y dialogaron sobre el turismo o los agentes sociales.
Explic¨® Rib¨® que t¨¦rminos como eficiencia energ¨¦tica o turismo responsable se escenifican cuando se concentra la urbanizaci¨®n, reduciendo el gasto en transporte y en suelo, o cuando ¡ªpor ejemplo¡ª se consigue que una fiesta como las Fallas se declare Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. ¡°Si hablamos de objetivos de desarrollo¡±, anot¨®, ¡°en Valencia nos preocupa fomentar una movilidad limpia y, en cuanto a la comida, promover la diversidad de mercados directos, del labrador al consumidor. Coincidimos con la FAO [Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Alimentaci¨®n y la Agricultura] en que el hambre no es un problema de producci¨®n, sino de reparto, de desperdicio y de ordenamiento social¡±.
Ada Colau tom¨® el relevo y habl¨® de que el funcionamiento de las ciudades depende de los actores pol¨ªticos y no de ¡°ejecutores t¨¦cnicos¡±. ¡°Somos los protagonistas y los que necesitamos el contacto directo con la gente d¨ªa a d¨ªa para anteponernos a retos globales que, como los tiempos actuales, han de solucionarse de forma r¨¢pida y en red¡±, expres¨®, enfatizando el valor del transporte p¨²blico y la necesidad de una vivienda accesible. En este sentido, Colau coment¨® c¨®mo la subida de hasta un 15% en el alquiler de pisos en algunos puntos de Barcelona ha expulsado a miles de ciudadanos, ha debilitado la identidad y ha eliminado a la juventud, convirti¨¦ndola ¡°en otra cosa¡±. ¡°No nos podemos permitir ciudades desiguales por falta de oportunidades, por problemas de seguridad y por degradaci¨®n perif¨¦rica¡±, concluy¨®.
El consumo urbano genera un 70% del total de gases emitidos a la atm¨®sfera
Su hom¨®loga madrile?a, Manuela Carmena, secund¨® la necesidad de viviendas ajustadas a los ingresos (el Ayuntamiento que dirige, afirm¨®, ha creado un alquiler social que depende del salario del inquilino) y recurri¨® a la rama donde ha trabajado a lo largo de su vida: el derecho. ¡°Los alcaldes no estamos solos. Tenemos la legislaci¨®n y sus aplicadores. Hemos trabajado mucho en los derechos de la ciudad y las leyes, que suelen ser abstractas, deben ligarse a lo concreto de la ciudad con registros claros del suelo y con la corrupci¨®n¡±, argument¨®.
?Medidas? ¡°En Madrid vemos los problemas de las ciudades como asuntos pedag¨®gicos. La violencia, por ejemplo, se ha enfocado construyendo vallas, poniendo m¨¢s polic¨ªa y no ha funcionado. Nosotros hemos pensado que este fen¨®meno hay que encararlo de forma pac¨ªfica, como un tema educacional¡±, dijo. En resumen: barrios equilibrados, igualitarios y pr¨®speros en los que ese conjunto habitacional no sea un decorado sino una construcci¨®n colectiva. Sostenible, inclusiva y resiliente: que se adapte ¡ªen contra del diccionario¡ª a las nuevas realidades.
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