¡°Por no gastar en Ej¨¦rcito invertimos hasta el 8% del PIB en Educaci¨®n¡±
Luis Guillermo Sol¨ªs, presidente de Costa Rica, habla de la desigualdad del pa¨ªs m¨¢s pr¨®spero de Centroam¨¦rica
A pesar de seguir siendo el pa¨ªs m¨¢s desarrollado de la regi¨®n, Costa Rica experimenta una creciente desigualdad y violencia, como consecuencia de la concentraci¨®n de la riqueza y del narcotr¨¢fico. El presidente costarricense, Luis Guillermo Sol¨ªs, historiador y polit¨®logo, habl¨® de esta situaci¨®n con Planeta Futuro poco antes de inaugurar las instalaciones del Museo Nacional de Costa Rica, dedicadas a la abolici¨®n del ej¨¦rcito, al Estado de bienestar y su declive.
?Qu¨¦ ha supuesto para Costa Rica haber prescindido de ej¨¦rcito desde 1948?
Supuso la consolidaci¨®n del modelo democr¨¢tico. En Am¨¦rica Latina los ej¨¦rcitos no han sido solucionadores de problemas, sino sus causantes, se han prestado para pol¨ªticas de seguridad nacional, especialmente propiciadas por los Estados Unidos y por sectores al interior de los pa¨ªses, que han generado violaciones a los derechos humanos e inestabilidad institucional. En Costa Rica ese factor fue eliminado. Adem¨¢s, por no gastar en ej¨¦rcito podemos invertir hasta el 8% del PIB en educaci¨®n y un porcentaje mayor en salud.
El presidente boliviano Evo Morales sostuvo que el ej¨¦rcito de Costa Rica es el de EEUU. ?Qu¨¦ incidencia tiene EEUU en materia de seguridad en Costa Rica?
Es un socio muy importante, especialmente en el combate al crimen organizado. Provee el equipamiento y la capacitaci¨®n de algunos de nuestros expertos. Tambi¨¦n lo hacen Colombia, M¨¦xico, la Uni¨®n Europea. Costa Rica no sirve de plataforma militar a Estados Unidos.
En Am¨¦rica Latina los ej¨¦rcitos no han sido solucionadores de problemas, sino sus causantes
El ministro de Seguridad de su Gobierno, Gustavo Mata, se?ala que el narcotr¨¢fico es el principal problema de seguridad del pa¨ªs. ?C¨®mo combatirlo habida cuenta del rotundo fracaso de la guerra contra las drogas?
Es una combinaci¨®n de represi¨®n y principalmente de prevenci¨®n. Est¨¢ claro que no se puede combatir con mano de seda, son organizaciones muy potentes. Se requiere de una acci¨®n asertiva del Estado, para controlar mar, tierra y aire. Estamos hablando de un narcomenudeo que produce en Costa Rica 11 muertos por cada 100.000 habitantes, una epidemia seg¨²n Naciones Unidas.
?Y en prevenci¨®n?
Eso implica tener presencia del Estado en todo el territorio, las zonas vac¨ªas en Am¨¦rica Central est¨¢n dominadas por el narcotr¨¢fico. Hay que ofrecer educaci¨®n y empleo, especialmente para los j¨®venes hombres, que son productores y v¨ªctimas de la violencia asociada al crimen organizado. Empleo y desarrollo, ese es el reto mayor, vinculado a la acci¨®n social y cultural.
?No existe riesgo de una progresiva militarizaci¨®n de la polic¨ªa como ha ocurrido en Brasil?
No, porque el Cuerpo de Polic¨ªa en Costa Rica no tiene el esp¨ªritu de cuerpo de los ej¨¦rcitos, no est¨¢n sometidos a una jurisdicci¨®n especial. Los polic¨ªas no tienen privilegios por encima de otros, las unidades especializadas est¨¢n siempre bajo el control de las leyes y de la fiscal¨ªa del Estado. No hay militarizaci¨®n, s¨ª m¨¢s especializaci¨®n.
La desigualdad ha aumentado much¨ªsimo. El neoliberalismo y sus ajustes estructurales de los a?os ochenta debilitaron al Estado benefactor y segmentaron a la sociedad
Existe en Costa Rica un 20% de poblaci¨®n pobre o muy pobre y las v¨ªctimas del narcotr¨¢fico suelen ser j¨®venes provenientes de ese sector. ?Qu¨¦ ha hecho este gobierno en ese sentido?
Por primera vez en siete a?os hemos reducido la pobreza en casi 20.000 familias, sacamos las instituciones a las calles, es el Estado el que llega con respuestas. No solamente reciben un subsidio, tambi¨¦n capacitaci¨®n. Hacemos mucho hincapi¨¦ en la lucha contra la pobreza en mujeres, especialmente las j¨®venes, con una red de cuidado infantil, para que tengan m¨¢s posibilidades de trabajar.
Recorriendo el pa¨ªs se puede ver una abrumadora proliferaci¨®n de barrios privados cerrados. ?A qu¨¦ adjudica este levantamiento de muros?
Es la demostraci¨®n de que la desigualdad ha aumentado much¨ªsimo. El neoliberalismo y sus ajustes estructurales de los a?os ochenta debilitaron al Estado benefactor y segmentaron a la sociedad. La sociedad se ha vuelto m¨¢s rica pero m¨¢s desigual, no ha habido distribuci¨®n. Uno de los instrumentos que sigo reivindicando no solo por razones de orden fiscal, sino por ¨¦tica, es el instrumento impositivo para distribuir la riqueza.
?Y c¨®mo revertir esa desigualdad creciente habiendo fracasado la reforma fiscal que usted promueve?
Debemos mantener como prioridad la educaci¨®n p¨²blica, no permitir la privatizaci¨®n de la seguridad social, aumentar la inversi¨®n en programas sociales, especialmente de formaci¨®n t¨¦cnica para j¨®venes. Debemos garantizar un sistema nacional de seguridad en democracia, una polic¨ªa que se mantenga civil, bien entrenada y moderna, as¨ª como garantizar la eficiencia en la lucha contra la corrupci¨®n.
?Cree que en este modelo de sociedad eso es posible?
Sin exagerar, creo que entre los costarricenses hay cierto sentido de cercan¨ªa e igualdad. Es una sociedad que comprende la importancia de un Estado fuerte, no autoritario, un Estado con capacidad de conducci¨®n. A nosotros no nos asusta la idea de un Estado conductor en la econom¨ªa. Deber¨ªa haber un acercamiento entre Estado y mercado, para que se conviertan en caras de la misma moneda.
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