Los curanderos, entre la impunidad y el limbo legal
Profesionales de las terapias sin aval cient¨ªfico se aprovechan de la indecisi¨®n pol¨ªtica
¡°Si se ha equivocado, se ha equivocado ¨¦l¡±. Con esta frase elud¨ªa su responsabilidad Jos¨¦ Ram¨®n Llorente, quien se presentaba como especialista en medicina naturista y ortomolecular cuando comenz¨® a pasar consulta a Mario Rodr¨ªguez. Se trata de un curandero de libro, aquel que, seg¨²n el diccionario, ejerce pr¨¢cticas curativas sin tener el t¨ªtulo de m¨¦dico. Su caso ha terminado en el juzgado por el tes¨®n del padre de Mario, un joven de 21 a?os que muri¨® tras abandonar la quimioterapia mientras su curandero le recetaba ¡°pastillas de br¨®coli¡±, seg¨²n la Audiencia Provincial de Valencia. Pero no sabemos cu¨¢ntos curanderos como ¨¦l hay en Espa?a, tratando gripes, depresiones, dolores de espalda o tumores, ni cu¨¢ntos problemas de salud podr¨ªan estar provocando al pretender curar a pacientes con falsos remedios, t¨¦cnicas in¨²tiles y p¨ªldoras que no son m¨¢s que placebos.
Ciudadanos quiere obligar a los m¨¦dicos a denunciar cuando tengan conocimiento de pr¨¢cticas ¡°alejadas de la evidencia cient¨ªfica [que] pudieran causar un perjuicio real en la salud¡±
Para dar respuesta a casos como este, el grupo de Ciudadanos en el Congreso present¨® una Proposici¨®n no de Ley (PDF) para obligar a los m¨¦dicos a denunciar cuando tengan conocimiento de una situaci¨®n similar: pr¨¢cticas ¡°alejadas de la evidencia cient¨ªfica [que] pudieran causar un perjuicio real en la salud directa de sus pacientes¡±. La intenci¨®n ¨²ltima: ¡°Detectar malas pr¨¢cticas que pongan en peligro la salud p¨²blica o la vida de los pacientes¡±. Francisco Igea, m¨¦dico y diputado impulsor de esta PNL, defiende su propuesta como un intento ¡°¨²til¡± de ¡°acabar con la impunidad¡±. ¡°Ni siquiera hay un registro de las lesiones o muertes que podr¨ªan estar causando¡±, lamenta Igea, ¡°no sabemos nada¡±.
Una de las asociaciones m¨¢s representativas del sector, la Asociaci¨®n de Profesionales de las Terapias Naturales (APTN-Cofenat), asegura que hay 60.000 profesionales que "ejercen y pagan sus impuestos¡±. Pero es que en 2009 ya dec¨ªan que eran 60.000 profesionales. Todo el mundo, partidarios, detractores, m¨¦dicos y pol¨ªticos, consideran que se trata de una pr¨¢ctica que no deja de crecer; no tendr¨ªa sentido que fueran los mismos ¡°profesionales¡± desde hace casi una d¨¦cada. Esa asociaci¨®n, la mayor, dice contar con casi 10.500 miembros. El 13% de los espa?oles prefiere este tipo de pseudoterapias, seg¨²n el CIS, aunque un estudio realizado por el sector asegura que el 24% ha recurrido a estas pr¨¢cticas en alguna ocasi¨®n, pero incluye en ese porcentaje la pr¨¢ctica del yoga.
La norma que regula los establecimientos sanitarios indica que debe haber un "m¨¦dico" en los centros de terapias naturales. Los dem¨¢s est¨¢n fuera de la ley
Poco se sabe a ciencia cierta sobre este sector. El ¨²ltimo gobierno socialista trat¨® de acotar el concepto, o el problema, poniendo en marcha un grupo de trabajo en 2007 que identificara, para regularlos, todos los aspectos que engloban las llamadas terapias naturales o alternativas. El informe resultante, publicado en 2011, dejaba claras tres cosas: que el problema es ampl¨ªsimo y con innumerables derivadas; que estas terapias no tienen ninguna capacidad de curar m¨¢s all¨¢ del efecto placebo; y que la regulaci¨®n era insuficiente. Estamos hablando de 139 t¨¦cnicas, donde conviven la acupuntura, que Sanidad considera ¨²til contra determinados dolores, con la sanaci¨®n por medio de piedras de cuarzo, por poner un ejemplo sin aval alguno.
En el decreto vigente desde 2003, que regula los establecimientos sanitarios, hay un apartado dedicado a las terapias no convencionales, pero el texto indica que se trata de una ¡°unidad asistencial en la que un m¨¦dico es responsable de realizar tratamientos¡±. Es decir, que se exige alguien con titulaci¨®n en Medicina para que la autonom¨ªa pueda dar el permiso pertinente, una situaci¨®n rar¨ªsima, como reconoc¨ªa Sanidad en su informe (PDF): en 2008, solo hab¨ªa 230 establecimientos acreditados con este perfil. ¡°Estas cifras no son indicativas de la situaci¨®n real de los centros en los que se aplican terapias naturales, ya que en gran parte de ellos no hay un m¨¦dico al frente¡±, reconoc¨ªa. Y a?ad¨ªa como ejemplo que una simple b¨²squeda en la web de las P¨¢ginas Amarillas ofrec¨ªa 1.704 centros de naturopat¨ªa en 2011 (hoy ya son 2.163) y 934 de homeopat¨ªa (hoy, 1.439).
Como muestra, un bot¨®n: en la localidad del joven Mario Rodr¨ªguez, Burjassot (37.000 habitantes) hay 11 establecimientos que se publicitan como locales en los que, de un modo u otro, se asegura que se cuida o mejora la salud de los clientes con pseudoterapias (ninguno aparece en la web de las P¨¢ginas Amarillas). Se trata de un trabajo de campo realizado a modo de ejemplo por la Asociaci¨®n para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocient¨ªficas (APETP), impulsada por el padre de Mario, para ilustrar el alcance del problema. ¡°No cumplen el decreto de autorizaci¨®n de centros. Los tribunales lo tienen clar¨ªsimo, da igual si las terapias que realizan son reales o ficticias¡±, dice Fernando Fr¨ªas, abogado y asesor jur¨ªdico de la asociaci¨®n. Seg¨²n este colectivo, que se est¨¢ reuniendo con los grupos pol¨ªticos para transmitir su preocupaci¨®n, estos centros no cumplen y la inspecci¨®n de Sanidad de cada comunidad aut¨®noma deber¨ªa cerrarlos. Llorente, obligado por la sanidad valenciana, se limit¨® a cambiar su cartel de "medicina natural y ortomolecular" por otro que vende "centro de terapias naturales".
El PSOE quiso regularlo incluyendo un diagn¨®stico previo de un m¨¦dico, vigilar las terapias m¨¢s peligrosas y que se mantuviera un registro de pacientes
Intentos fracasados de regularlo
El gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero trat¨® de darle espacio legal al sector, un apartado espec¨ªfico en la norma para estos profesionales de las terapias que no cuentan con aval cient¨ªfico. Catalu?a lo hizo , pero la justicia se lo tumb¨®. El Pa¨ªs Vasco aprob¨® en julio una proposici¨®n no de ley para hacerlo. El programa electoral del PSOE sigue incluyendo la idea de ¡°regular, desde el consenso, el sector de las terapias naturales, que permita al ciudadano acudir a estos t¨¦cnicos con las debidas garant¨ªas¡±. Guadalupe Mart¨ªn, diputada del PSOE en la comisi¨®n de Sanidad, cree que esa es la soluci¨®n, y reconoce que ahora se est¨¢ dando un incumplimiento masivo de la ley, porque los centros de terapias alternativas no cuentan con profesionales sanitarios y porque vulneran la ley al publicitarse indebidamente como lugares en los que se ofrecen soluciones para la salud, como tambi¨¦n denuncian Ciudadanos y APETP.
Mart¨ªn, tambi¨¦n m¨¦dica, no cree que la propuesta de Ciudadanos sea la soluci¨®n: ¡°No comparto que se ponga la carga en los profesionales sanitarios, que tengan que hacer de polic¨ªas. Para eso ya est¨¢, o deber¨ªa estar, la inspecci¨®n sanitaria¡±. Los colegios m¨¦dicos tampoco se han mostrado a favor de que se les obligue por ley a denunciar a los curanderos, a pesar de que algunos, como la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial, son muy beligerantes contra las pseudoterapias. La diputada socialista cree que se debe dar carta de naturaleza a los profesionales de las terapias naturales mejor formados para dar m¨¢s seguridad a los ciudadanos. ¡°Pero si regulas determinada profesi¨®n, supone reconocer una titulaci¨®n, una formaci¨®n¡ y eso es reconocer validez a pr¨¢cticas que no tienen ninguna base cient¨ªfica¡±, reconoce. ¡°Pero eso ayudar¨ªa a cerrar a los verdaderos estafadores¡±, a?ade. Adem¨¢s, cree fundamental formar e informar a la poblaci¨®n. En este momento ese objetivo parece muy lejano cuando la radio p¨²blica espa?ola tiene un programa para la promoci¨®n de estas pseudoterapias.
Estos profesionales cuentan desde 1990 con un ep¨ªgrafe como parasanitarios en el que inscribirse para tributar por su negocio, pero no pueden registrar su establecimiento y tienen prohibido hacer publicidad de ¡°productos y servicios de car¨¢cter creencial y de los productos-milagro¡±. As¨ª, las tarifas de un sector que est¨¢ fuera de la ley son ingobernables: a la familia de Mario Rodr¨ªguez, el tratamiento del curandero le cost¨® unos 4.000 euros. El plan del Gobierno socialista pon¨ªa el foco en que la regulaci¨®n de este colectivo incluyera un diagn¨®stico previo de un m¨¦dico titulado, tener especial vigilancia sobre las terapias m¨¢s invasivas y peligrosas y que se mantuviera un registro de pacientes que permita controlar mejor el sector. La presidenta de la APETP, la cient¨ªfica Elena Campos, lo tiene claro: ¡°Se est¨¢ incumpliendo desde hace 13 a?os la legislaci¨®n vigente. La salud debe estar en manos de un profesional sanitario acreditado. Los ayuntamientos y las comunidades son responsables de lo que est¨¢ pasando¡±.
Cu¨¦ntanos tu caso: javier@esmateria.com
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.