Una boda, un embarazo y cien euros por concursante: esto es lo que se esconde detr¨¢s de First Dates

Son las 11 de la ma?ana. Para muchos, los que somos incapaces de desayunar nada m¨¢s despertarnos, significa que es la hora de llevarse algo a la boca, una tostada de aceite y tomate, quiz¨¢s, o algo de boller¨ªa. Para los participantes de First Dates, sin embargo, es la hora de cenar. Calma, no estamos hablando de m¨²ltiples universos paralelos en los que copias de nosotros viven en planos diferentes en el tiempo, nos referimos al programa que se emite en Cuatro en prime time y en el que los participantes acuden a una primera cita en busca de su media naranja.

Se graba ininterrumpidamente de 11 a 19 horas de lunes a viernes. Este mes, el 17 de abril, se cumple un a?o de la emisi¨®n del primer cap¨ªtulo. Hasta la fecha, alrededor de 3.600 adultos de todas las edades y preferencias sexuales se han sentado en una de las sillas del restaurante esperando que la persona con la que van a compartir mesa sea su alma gemela. Desde entonces, hemos sido testigos de c¨®mo se han formado parejas, forjado amistades y hasta de los m¨¢s sonoros rechazos. Entre los mayores ¨¦xitos del programa: una boda y un embarazo.

Yolanda Mart¨ªn, directora de First Dates, asegura que el porcentaje de aciertos es aproximadamente del 50%. Pero ojo, esa cifra responde a las veces que las parejas han dicho que s¨ª a una segunda cita. Realmente, el porcentaje de fracaso es mayor si hacemos un seguimiento desde que salieron del restaurante. Entonces lo que sucede es un fiel reflejo de la vida, donde a menudo nos damos cuenta de que lo nos separa puede m¨¢s que lo que nos une.

Si est¨¢s pensando presentarte y este ¨²ltimo p¨¢rrafo te ha desanimado, no decaigas en tu empe?o. Nadie dijo que dar con la tecla en el amor fuese f¨¢cil, de serlo quiz¨¢s vivir¨ªamos en un mundo mucho m¨¢s amable. Lo que s¨ª es cierto es que si esperas un m¨¦todo cient¨ªfico para encontrar tu media naranja, te equivocas. ?Te has preguntado alguna vez c¨®mo eligen a las parejas? El programa no dispone de un ej¨¦rcito de psic¨®logos que analizan tu perfil y entran a saco en tu personalidad para encontrarte la pareja id¨®nea. ¡°Yo llevo 21 a?os con mi pareja y la primera cita, a ciegas, la realiz¨® una amiga m¨ªa que no es psic¨®loga. A ti te gusta, pues a ¨¦l tambi¨¦n le gustas. ?Qu¨¦ hor¨®scopo? Capricornio los dos¡±, recuerda Mart¨ªn. No hay m¨¦todo cient¨ªfico, pero s¨ª un pu?ado de buenas intenciones.

Lo que s¨ª se hace es que a cada concursante se le entrega un cuestionario para conocerle un poco y saber qu¨¦ espera de la persona amada. ?Qui¨¦n dise?a ese cuestionario? En su mayor¨ªa, un grupo de redactores que suelen ser periodistas. Ellos son los encargados de escribir preguntas del tipo: ¡°?Qu¨¦ buscas en una pareja?, ?Qu¨¦ impresi¨®n se suelen llevar de ti cuando te conocen por primera vez?, ?Eres religioso?, ?D¨®nde te gustar¨ªa llegar laboralmente?, ?Qu¨¦ signo del hor¨®scopo eres?¡±

Con esa informaci¨®n, y un v¨ªdeo personal que el aspirante env¨ªa hablando sobre s¨ª mismo, el equipo pone en marcha toda su maquinaria para encontrar la pareja perfecta. A la vista est¨¢ de que no siempre lo consiguen, y a veces incluso uno se pregunta qu¨¦ se han fumado para juntar a estos dos, pero lo cierto es que se toman muy en serio su labor. Es m¨¢s, como algo personal.

Marta es de Barcelona. Fue a grabar al programa el 10 de octubre y su paso por el restaurante se emiti¨® el 6 de diciembre. De la experiencia opina que ¡°es todo un montaje¡± porque ¡°no me pusieron lo que yo ped¨ªa en el cuestionario. Me encontraron a alguien que es todo lo contrario a m¨ª. Est¨¢ todo muy preparado. A la camarera, Lidia Torrent, le dije que a m¨ª el chico no me gustaba y ella trat¨® de convencerme de que s¨ª que me gustaba. Entonces, a la hora de la verdad dijimos de tener una segunda cita pero cuando salimos decidimos que no¡±.

Cada cita dura una hora y cuarenta minutos. Ese es el tiempo que tienen los participantes para encontrar el amor. Durante ese periodo, las camareras tienen un papel importante, m¨¢s all¨¢ de servir la comida. ¡°Mi misi¨®n es hacer de celestina y de camarera. Las dos cosas¡±, explica Torrent. A veces, cuando los comensales olvidan la comida y se pierden en la conversaci¨®n, ellas interceden para que se ajusten al tiempo. Otras, ocurre lo contrario, que los pretendientes no tienen nada de qu¨¦ hablar, en ese caso proponen alg¨²n tema que puedan tener en com¨²n.

¡°Te dicen que tienes que dejar el tel¨¦fono en la mesa y que ellos pueden enviarte un mensaje para que vayas al servicio y all¨ª puedas llamar a un familiar, o te dan alguna directriz en el caso de que vean que no hay feeling, para que puedas sacar alg¨²n tema de conversaci¨®n que os interese a los dos. A m¨ª me enviaron un mensaje en el que me dec¨ªan que si me gustaba el chico le tocara la mano¡±, explica Yunita Belle, una de las primeras participantes de First Dates. Su programa se grab¨® el 29 de abril y se emiti¨® el 5 de julio. Vino desde Valencia para conocer a su pareja, y aunque dijeron que s¨ª a una segunda cita, la cosa despu¨¦s no funcion¨®.

Otro de los encargados de velar por el buen ambiente en el programa es Carlos Sobera. El presentador vasco ha vivido muchas an¨¦cdotas desde el comienzo. ¡°Una chica lleg¨® muy nerviosa porque su padre no autorizaba su presencia y sab¨ªa que le iba a desagradar. Ella estaba buscando continuamente excusas para no quedarse y hubo un momento en el que me dijo, antes de que llegase su cita, que no quer¨ªa a alguien mayor porque eso su padre s¨ª que no lo iba a poder soportar. Entonces vino un chico estupendo, que ten¨ªa 41 a?os, era un se?or elegante, glamuroso, guapo de cara. Ella estaba esperando en la sala cuando pregunt¨® cu¨¢ntos a?os tiene, al decirle su edad se quiso echar atr¨¢s porque lo ve¨ªa demasiado mayor, entonces le pregunt¨¦ qu¨¦ edad ten¨ªa ella y me dijo que 40 y se march¨® sin tener la cita¡±, recuerda.

El presentador tambi¨¦n ha vivido momentos emotivos y recuerda con cari?o a Cristian y Cristina, una pareja que particip¨® hasta tres veces. ¡°La primera vez fue cuando se enamoraron, luego vinieron al cabo de un tiempo porque se iban a casar, a la ceremonia fueron Lidia y Mat¨ªas. El otro d¨ªa volvieron porque quieren tener un hijo. ?l le declar¨® su amor en el restaurante y fue un momento muy tierno.¡± Es precisamente por estos momentos por los que el presentador asegura que cuando le preguntan, y lo hacen a menudo, si en el caso de no estar casado -lo est¨¢ desde hace 17 a?os-, ir¨ªa al programa, entonces responde de esta forma: ¡°A los concursos que he presentado como Quieres ser millonario o Atrapa un mill¨®n no ir¨ªa como concursante, ni de co?a, porque me sentir¨ªa un poco abrumado por la situaci¨®n. Sin embargo, en este programa tengo la sensaci¨®n de que todo fluye con mucha naturalidad, todo es muy aut¨¦ntico. Lo ¨²nico que expones es aquello que podemos exponer los hombres y las mujeres, el coraz¨®n, y ah¨ª no siento tanto pudor, porque creo que el pudor es una barrera para el amor¡±.

En la productora trabajan cerca de cien personas, entre equipo de producci¨®n, guionistas, edici¨®n, c¨¢maras¡­ y como hacen muchos compa?eros de trabajo, para comunicarse entre ellos tienen un grupo de WhatsApp. Cada vez que hay un acierto se vive la experiencia con mucha intensidad, tanto que el equipo muestra su euforia en la redacci¨®n y los mensajes de felicitaci¨®n en el chat se multiplican. Una alegr¨ªa para los que viven la experiencia en tiempo real y no tanto para los que no han estado atentos a su m¨®vil y se encuentran con una sorpresa en forma de cientos de mensajes sin leer.

Cada d¨ªa, en el restaurante de First Dates se graban unas diez citas. El n¨²mero de citas que vemos a diario en la televisi¨®n se reduce a cinco. A diferencia de su hom¨®logo ingl¨¦s, el programa original, aqu¨ª se emite a diario, all¨ª una vez a la semana. A los concursantes, por participar, se les da una paga en met¨¢lico de alrededor de 100 euros. Este es el precio habitual, pero la cantidad var¨ªa seg¨²n el tipo de programa que se emita. A veces se graban especiales en el que se cuenta con muy poco tiempo para encontrar a un perfil determinado y cuando lo encuentran esta puede regatear el precio, llegando a subir su cach¨¦. A los participantes se les dice, antes de entrar en el restaurante, que de ese dinero se guarden 15 euros para pagar la cena. Aunque a veces vemos actos de galanter¨ªa y uno asume la cuenta de los dos.

El programa ha tenido tanto ¨¦xito que, seg¨²n Mart¨ªn, cada d¨ªa reciben cerca de cien solicitudes para participar: ¡°Hoy en d¨ªa la gente no liga como lo hac¨ªa antes. Las personas no tienen mucho tiempo y van a tiro hecho¡±. Lo vemos a diario, la manera en la que conocemos a nuestras posibles parejas ha cambiado. Antes te relacionabas de noche, en los bares o por medio de amigos, ahora hay muchas aplicaciones para encontrar a tu media naranja sin moverte de la cama. Aunque estas herramientas sirven para eso, para un primer contacto, a la hora de la verdad es el tiempo quien se encarga de decir si es amor, enamoramiento, o un simple capricho. First Dates en eso es como la vida misma, una forma m¨¢s de buscar un compa?ero o compa?era de viaje, pero con c¨¢maras y en prime time.