Tabletas y m¨®viles ya estropean el sue?o de los preescolares

Cada d¨ªa es m¨¢s com¨²n ver ni?os desactivados delante de una tableta o un m¨®vil y, tambi¨¦n, padres y madres preocupados por el efecto que esto pueda tener en el desarrollo de los m¨¢s peque?os. A medida que avanza la investigaci¨®n en este campo, m¨¢s claro parece que la utilizaci¨®n de pantallas interactivas perjudica al sue?o de los menores. Ahora, por primera vez, se ha publicado un trabajo que analiza c¨®mo afecta a un grupo especialmente delicado, los menores de tres a?os, y que concluye que influye negativamente en su forma de dormir.

Por cada hora diaria que pasan con la tableta o el m¨®vil, los menores de tres a?os reducen 26 minutos su tiempo de sue?o nocturno

Los investigadores de la Universidad de Londres encontraron una correlaci¨®n muy clara entre el uso de pantallas interactivas por parte de chiquillos de entre seis meses y tres a?os y una reducci¨®n en el tiempo que pasan durmiendo. En concreto, por cada hora diaria que pasaban con la tableta, reduc¨ªan 26 minutos su sue?o nocturno. En total, reduc¨ªan un cuarto de hora el tiempo diario dedicado a dormir, porque al usar las pantallas aumentaban tambi¨¦n en 10 minutos el tiempo dedicado a las siestas diurnas. Probablemente, suponen los investigadores, porque su organismo trata de compensar a lo largo del d¨ªa el sue?o perdido por la noche.

Adem¨¢s, los peque?os tambi¨¦n tardan m¨¢s tiempo en coger el sue?o a medida que aumenta su uso de estas tecnolog¨ªas, seg¨²n este estudio publicado en Scientific Reports. El uso de la televisi¨®n, otro de los aparatos que padres y madres usan como canguro, solo reduce el tiempo de las siestas diurnas y no afectaba al sue?o nocturno. "Debido a un posible impacto negativo, se ha aconsejado limitar la exposici¨®n a aparatos t¨¢ctiles durante la infancia, pero estos consejos no estaban basados en evidencia cient¨ªfica. Este estudio es el primero en aportar dicha evidencia", afirma Tim Smith, principal autor de esta investigaci¨®n que se sirvi¨® de datos de 715 familias del Reino Unido.

"Dado que la plasticidad neuronal es mayor, es probable que el sue?o tenga el mayor impacto en el cerebro y en la cognici¨®n durante este per¨ªodo cr¨ªtico", advierten

"Dado que la plasticidad neuronal es mayor en la primera infancia, es probable que el sue?o tenga el mayor impacto en el cerebro y en la cognici¨®n durante este per¨ªodo cr¨ªtico de desarrollo temprano", explican los cient¨ªficos.

Las evidencias ya hab¨ªan llegado para los ni?os y ni?as de entre seis y 18 a?os, en estudios como el publicado hace unos meses en JAMA Pediatrics. Esta revisi¨®n de m¨¢s de una veintena de trabajos previos, que engloba a m¨¢s de 125.000 menores en total, mostraba que "los ni?os que utilizan dispositivos de medios port¨¢tiles con pantallas antes de acostarse tienen m¨¢s del doble de riesgo de dormir un tiempo insuficiente en comparaci¨®n con los ni?os que no tienen acceso. Tambi¨¦n afecta a la somnolencia diurna y la calidad del sue?o".

Los mecanismos que provocan que el uso de pantallas reduzca el tiempo dormido todav¨ªa est¨¢n por definirse por completo, pero hay algunas explicaciones plausibles. Por ejemplo, se sabe que la luz azul que emiten estos aparatos manda se?ales que confunden los ritmos naturales de sue?o del cerebro. Adem¨¢s, seg¨²n se?ala el equipo de Smith, dependiendo del tipo de uso de los aparatos podr¨ªan estar activando excesivamente a los menores con juegos o pel¨ªculas o incluso robando directamente minutos al sue?o cuando ni?os y ni?as se llevan el aparato al dormitorio.

Adem¨¢s, los peque?os tambi¨¦n tardan m¨¢s tiempo en coger el sue?o a medida que aumenta su uso de estas tecnolog¨ªas

"Con este estudio no podemos inferir causalidad, dado que es simplemente una descripci¨®n de lo que las familias est¨¢n haciendo", explica Irati S¨¢ez de Urabain, que tambi¨¦n particip¨® en el estudio. Y a?ade: "Para inferir causalidad deber¨ªamos controlar el uso de los dispositivos para un grupo de familias y comprobar si efectivamente el sue?o cambia, una intervenci¨®n que requiere mucho cuidado y la consideraci¨®n de todos los problemas ¨¦ticos que podr¨ªa conllevar".

Eso s¨ª, estos especialistas est¨¢n convencidos de que no todo es tiempo de uso pantalla es pernicioso, siempre que el contenido est¨¦ dise?ado de forma educativa, y padres y madres se involucren con los menores durante el tiempo de exposici¨®n. Todo lo contrario que el cl¨¢sico gesto de aparcar a los cr¨ªos con la pantalla delante de la cara. "El siguiente paso es investigar los efectos a largo plazo del uso de aparatos t¨¢ctiles en la infancia, y estudiar las teor¨ªas sobre el cerebro y los mecanismos cognitivos que pueden verse afectados por dichos efectos", se?ala Smith.