A punto de estrellarse
El secesionismo deber¨ªa ir pensando en una soluci¨®n para aminorar los da?os
El llamado ¡°proceso¡± independentista catal¨¢n sigue cobr¨¢ndose nuevas v¨ªctimas. La fragmentaci¨®n y los enfrentamientos, p¨²blicos o solapados, entre formaciones pol¨ªticas independentistas est¨¢n a la orden del d¨ªa.
Otros art¨ªculos del autor
Primero fue la separaci¨®n entre Converg¨¨ncia y Uni¨® (que a su vez se escindi¨® en dos); despu¨¦s la forzada coalici¨®n electoral Junts pel S¨ª, formada b¨¢sicamente por Converg¨¨ncia, Esquerra Republicana y los escindidos de Uni¨®; hace poco, la reconversi¨®n del partido fundado por Jordi Pujol en uno ¡°nuevo¡±, denominado Partit Dem¨°crata Europeu Catal¨¤ (PDeCAT), al que no se ha afiliado el fundador; en las ¨²ltimas semanas, los constantes recelos entre Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, m¨¢s la cruz que para ambos supone depender parlamentariamente de la CUP, que les pone de los nervios.
?ltimamente, rizando el rizo, dentro del mismo PDeCAT hay tensiones debido a la firmeza con la que Puigdemont defiende el refer¨¦ndum ¡°s¨ª o s¨ª¡±, es decir, legal o ilegal, y la tibieza y las dudas que esta f¨®rmula suscita en los nuevos y biso?os dirigentes del ¡°nuevo¡± partido, Marta Pascal y David Bonveh¨ª, que representan a muchos m¨¢s exconvergentes que hoy no dan todav¨ªa la cara. Entre medio, enmara?¨¢ndolo todo, el despechado Artur Mas, un aut¨¦ntico jarr¨®n chino que nadie sabe d¨®nde colocar.
En definitiva, la impotencia y el pesimismo cunden en las filas independentistas: s¨®lo el 5% de los consultados por la empresa que elabora los sondeos para La Vanguardia cree que esta independencia puede ser a corto plazo, aunque el 41,9% declara que votar¨ªa afirmativamente y algo menos, el 39,7%, que otorgar¨ªa su voto en contra de la independencia. O los sondeos no est¨¢n bien hechos, o el encuestado enga?a a quien le pregunta o las contradicciones y confusiones forman hoy parte de la mentalidad de los catalanes, cosa que ser¨ªa natural.
En todo caso, ya parece del todo obvio que Artur Mas y los suyos se tiraron en el a?o 2012 a una piscina sin agua y, cuando lo pudieron remediar, dado que los resultados no les fueron favorables, en las llamadas elecciones ¡°plebiscitarias¡± de septiembre de 2015 (en realidad, unas elecciones auton¨®micas), negaron sus resultados, se aliaron con la CUP e, irresponsablemente, se declararon vencedores. Ahora andan por ah¨ª desanimados, lamentando en voz baja las equivocaciones del pasado e intentando salvar el pellejo como se pueda.
Los errores se pagan, se puede mentir de vez en cuando pero no siempre. La partida tiene un l¨ªmite temporal, a m¨¢s tardar se acabar¨¢ en septiembre. No hay choque de trenes sino un convoy, el independentismo, que va a la deriva y est¨¢ a punto de estrellarse. La soluci¨®n se podr¨¢ vislumbrar cuando este hecho acaezca. Ahora s¨®lo cabe ir pensando en esa soluci¨®n para, en lo posible, aminorar los da?os causados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.