Su ¨²ltima contienda lo confirma: Tom Hardy es el m¨¢s salvaje de Hollywood

Richmond, Londres. Un tipo roba una moto y, en su huida, se salta un sem¨¢foro en rojo y choca contra un Mercedes. Pero ese desgraciado ha infringido la ley delante del testigo equivocado: el actor Tom Hardy pasaba por ah¨ª y, tras presenciar el crimen, se pone a correr detr¨¢s del ladr¨®n calle arriba. Despu¨¦s de atravesar varios jardines residenciales saltando las vallas que los dividen, Tom Hardy consigue agarrar al delincuente del cuello de la camisa, le reduce en el c¨¦sped y le cachea en busca de armas. "He cazado a este hijo de puta", les aclara a los espectadores fortuitos de la persecuci¨®n. En cuanto llega la polic¨ªa, el actor se larga. Su trabajo ya est¨¢ hecho. No todos los h¨¦roes llevan capa.

Esta podr¨ªa ser una escena de una pel¨ªcula de acci¨®n, pero es la vida real. Sucedi¨® el martes 24 de abril en el barrio donde Tom Hardy (Londres, 39 a?os) vive con su esposa, la tambi¨¦n actriz Charlotte Riley, y sus dos hijos de nueve y dos a?os. El actor demostr¨® que, como sus personajes de Max en Mad Max, furia en la carretera (George Miller, 2015) o Bane en El caballero oscuro, la leyenda renace (Christopher Nolan, 2012), prefiere reaccionar ante las emergencias con visceralidad e inventar un nuevo nivel de fuerza bruta antes que reflexionar.

Tom Hardy es una bestia. Y no solo porque el 80 % de sus di¨¢logos son gru?idos. Hardy es un amasijo de m¨²sculos, instinto, tatuajes, justicia y vello corporal. Pero dentro de ese animal late un coraz¨®n entra?able. Tom Hardy no es solo una de las estrellas m¨¢s exc¨¦ntricas del Hollywood actual. Tom Hardy es un vikingo. Justo cuando este 2017 (el 15 de septiembre) cumple 40 a?os y reciente su intensa interpretaci¨®n en la serie Taboo, analizamos su visceral vida.

Se prendi¨® fuego para lograr mayor realismo

Durante el rodaje de Black Hawk derribado (Ridley Scott, 2001), Hardy no par¨® de suplicarle al director que le permitiese rodar la escena en la que su personaje ard¨ªa en llamas sin especialistas ni dobles. "Sent¨ª que volv¨ª a nacer", recuerda el actor. Esta entrega f¨ªsica es la ¨²nica vida que ¨¦l conoce. Para hacer de boxeador en Bronson (Nicolas Winding Refn, 2008) hac¨ªa 2.500 flexiones al d¨ªa, y para interpretar a un mastod¨®ntico luchador en Warrior (Gavin O'Connor, 2011) se someti¨® a diez horas de entrenamiento diarias que inclu¨ªan boxeo, ju jitsu, muay thai, pesas y coreograf¨ªas de combate.

No tiene ning¨²n amigo

"No tengo ning¨²n amigo", reconoci¨® el actor, "no los mantengo, ni les doy bola con sus problemas. Me gusta estar solo. Tengo un perro y dos hijos. Mi perro jam¨¢s har¨¢ nada que me moleste, y mis hijos tampoco". Para Hardy, nunca es mal momento para hablar sobre chuchos. Ya sea sobre su est¨¦tica ("los perros har¨ªan cualquier cosa por ti, y nosotros les llevamos a la peluquer¨ªa. Nadie les pregunta a los caniches si quieren llevar el pelo as¨ª, ?verdad? Luego la gente se pregunta que por qu¨¦ los caniches son tan irritables. Que os jodan"), sobre diferentes razas ("de hecho los perros salchicha muerden a m¨¢s gente que los pitbulls, que tienen peor fama"), sobre c¨®mo les deja la tele puesta cuando sale de casa para que no se sientan solos y sobre la necesidad de adoptar m¨¢s perros callejeros en lugar de comprarlos.

Su labrador, llamado Mad Max, muri¨® en 2007, y Hardy acept¨® protagonizar la pel¨ªcula como homenaje a ¨¦l. Las cenizas del difunto perro descansan en una urna sobre el rinc¨®n del sof¨¢ donde le gustaba tumbarse, y en una alfombra roja descubrimos que la carcasa del m¨®vil de Hardy tiene una foto de s¨ª mismo con su perro favorito. La cuenta de Instagram que celebra esta pasi¨®n canina, Tom Hardy abrazando perros, tiene m¨¢s de 86.000 seguidores. Su nuevo mejor amigo se llama Woody y, claro, es un perro.

Habla abiertamente de sus adicciones

A los once a?os, Tom recibi¨® la visita en su escuela de un polic¨ªa que les advirti¨® a los alumnos de los peligros de esnifar pegamento. Lejos de aterrarle, a Tom le pareci¨® una idea estupenda. A los trece ya estaba enganchado a drogas alucin¨®genas. A los diecis¨¦is, beb¨ªa alcohol con regularidad y fumaba crack. "Perd¨ª el control y tengo suerte de no haber sufrido un accidente o terminado en prisi¨®n", confiesa el actor, que decidi¨® desintoxicarse tras tocar fondo en 2003 al ser encontrado inconsciente en el barrio londinense del Soho cubierto de sangre y v¨®mito.

"Ahora conozco a mi bestia y s¨¦ c¨®mo manejarla. Es como vivir con un orangut¨¢n de 200 kilos que quiere matarme. Es mucho m¨¢s poderoso que yo, no habla mi idioma y corre por la oscuridad de mi alma", explic¨® el actor gr¨¢ficamente. Hardy dice que, en su momento de m¨¢s cruenta adicci¨®n, habr¨ªa vendido a su madre por un poco de crack. Lleva sobrio desde 2003.

Confiesa que tuvo relaciones con hombres

No existen tab¨²es en el idioma de Tom Hardy. Reconoce haber mantenido relaciones sexuales con hombres ("pues claro, joder, soy actor, todos jugamos con todos, pero no me siento atra¨ªdo sexualmente por el cuerpo masculino, me interesa, pero no me excita", coment¨®). Se muestra orgulloso de su p¨¢gina de MySpace, atestada de selfies macarras en el ba?o de su casa, porque "no era ning¨²n Adonis, pero me sent¨ªa un Adonis, y eso es lo que importa". Abandon¨® el rodaje de Suicide squad (David Ayer, 2016) porque no le gustaba el guion (todo un visionario Hardy), aunque Shia LaBeouf cont¨® que Hardy y ¨¦l renunciaron al proyecto en cuanto Will Smith apareci¨® exigiendo m¨¢s protagonismo para ¨¦l y menos para ellos dos.

Liberaba tensiones durante el rodaje de 'El renacido' peg¨¢ndose con el director

La obstinaci¨®n del cineasta mexicano Alejandro G. I?¨¢rritu por rodar El renacido con luz natural y nieve aut¨¦ntica alarg¨® el rodaje durante nueve atroces meses. Leonardo DiCaprio y Tom Hardy repet¨ªan tomas sin parar y permanentemente al borde de la hipotermia. Pero Hardy ten¨ªa la soluci¨®n para desestresarse, hacer callo y evitar que I?¨¢rritu les volviera "locos de puto remate": acurrucarse. O al menos as¨ª lo llama ¨¦l. "Cuando la cosa se pon¨ªa seria", cont¨® Hardy, "le dec¨ªa [al director] '?por qu¨¦ no nos acurrucamos un poco delante de toda esta gente?' y acab¨¢bamos tir¨¢ndonos al suelo nevado. Creo que fue positivo". Con DiCaprio no se atrevi¨®, eso s¨ª. La controversia en los medios por las brutales discusiones en aquel rodaje qued¨® zanjada cuando Tom Hardy se hizo una camiseta con una fotograf¨ªa impresa de s¨ª mismo agarrando por el cuello a I?¨¢rritu. Cosas de chicos.

Sus peleas con Charlize Theron con final feliz

Durante el rodaje de Mad Max, furia en la carretera, Charlize Theron intent¨® entablar una amistad de colaboraci¨®n con Hardy, pero se encontr¨® con un muro de hormig¨®n y gru?idos. No se hablaban fuera de c¨¢mara, y la actriz describi¨® aquellos seis meses en el desierto de Namibia como "un largo viaje familiar a ninguna parte". Para disculparse por su aspereza, Hardy dibuj¨® un autorretrato y se lo regal¨® a su compa?era. Charlize Theron lo tiene colgado en su despacho.

Mi pap¨¢ es un salvaje tierno

Para celebrar el d¨ªa de la madre, Hardy apareci¨® en el programa de la BBC CBeebies leyendo el cuento Hay un oso en mi silla. Mitad masa muscular mitad pura ternura, el actor demostr¨® que sus dos hijos son los ni?os m¨¢s afortunados de toda Inglaterra. Si ahora resulta que a las mujeres que no quieren tener hijos se les llama NoMo, habr¨ªa que inventar un t¨¦rmino para definir a las mujeres que no quieren tener hijos, pero que har¨ªan una excepci¨®n con Tom Hardy.

Combate el machismo de Hollywood

Cuando un periodista en Cannes le dijo que si, al leer el guion de Mad Max, furia en la carretera, se pregunt¨® qu¨¦ demonios hac¨ªan todas esas mujeres en una pel¨ªcula de hombres, Hardy respondi¨®: "No, no me lo pregunt¨¦, ni por un momento, obviamente". El actor, que asegura que su mayor apoyo y fuente de sabidur¨ªa siempre han sido mujeres (su madre, su esposa y su agente, Lindy King, cuyo nombre lleva tatuado en el brazo), considera que " se necesitan m¨¢s pel¨ªculas sobre y para mujeres, ya que esta es la ¨²nica forma de ser una sociedad avanzada. "Ya era hora de que tuvi¨¦semos mejores protagonistas femeninas en las pel¨ªculas de acci¨®n tambi¨¦n", coment¨® sobre Imperator Furiosa, el personaje de Charlize Theron. "As¨ª es como debemos reflejar nuestro tiempo. Una situaci¨®n humana con perspectivas desde ambos g¨¦neros", a?adi¨®.

Intenso en el cara a cara

El periodista de eCartelera Javier P. Mart¨ªn, que entrevist¨® a Tom Hardy el pasado febrero con motivo de su serie para HBO Taboo, recuerda la cercan¨ªa y naturalidad con la que el actor recibi¨® a la prensa espa?ola. "Se tir¨® recostado sobre la silla, medio tumbado. Miraba a los ojos de cada entrevistador durante las preguntas, aunque a veces se le iban los ojos al escote de una de las periodistas, y daba su respuesta mirando al vac¨ªo por la ventana", describe Mart¨ªn. "Iba dando caladas a un cigarrillo electr¨®nico sin parar. Al terminar, un periodista h¨²ngaro le pas¨® una nota muy dram¨¢tica pidi¨¦ndole que le AYUDASE (en may¨²sculas) y se hiciese una foto con ellos. Hardy pos¨® con todos los periodistas, a pesar de que la gente de HBO intentaba sacarle de ah¨ª. Es un tipo intenso y encantador".

Su ¨²nica adicci¨®n actual es el DubsMash

S¨ª, esa aplicaci¨®n llamada DubsMash que consiste en grabarse a uno mismo haciendo playbacks de canciones m¨ªticas. Entre el repertorio de Tom Hardy, que generosamente comparte con el mundo entero, est¨¢ 50 Cent o Whitney Houston. En su playback de I will always love you, la banda sonora de El guardaespaldas, Hardy interpreta con tal furia (para ¨¦l no existe otro formato) que parece capaz de atravesar la pantalla del m¨®vil y darte un pu?etazo. Pero seguramente solo te dar¨ªa un abrazo.

Ese es Tom Hardy. Un cordero amoroso con piel de lobo solitario. Pero siempre un animal.