La capacidad para superar una ruptura pasa muy a menudo por cambiar una cama por otra. Para muchos, es la ¨²nica opci¨®n posible. Para los expertos, un arma de doble filo.
"La mancha de mora con otra verde se quita". Posiblemente esta fue una de las frases que m¨¢s escuch¨¦ aquellas noches de los 90 en las que m¨¢s de uno de mis amantes desaparec¨ªan por la marabunta de la Sala El Sol. Toda una reflexi¨®n de amigas hartas de melodramas. Quer¨ªan que me dejara de idioteces y levantarme el ¨¢nimo, lo cual no siempre funcionaba. A veces las consecuencias de seguir esta recomendaci¨®n me dejaban a¨²n peor.
Siento decirles que los aquelarres para poner verde al sexo contrario no son nada saludables. Esas reuniones solo hunden en la amargura y la desesperanza. Mejor distraerse en un parque de paintball si quieren, que buscar placer en la cr¨ªtica desmesurada. Tirarse a los brazos de cualquiera que pase por all¨ª, tampoco es lo mejor en estos casos. Y mucho menos unir un amante con otro para olvidar al que huy¨®. Isabel Serrano, psicoterapeuta de pareja y sex¨®loga cl¨ªnica, alerta de la posibilidad de caer en una adicci¨®n sexual si se sigue esa conducta. "Se llena el vac¨ªo de la anterior relaci¨®n con un sexo consumo que nos aleja de nosotros mismos y nos hunde m¨¢s en el dolor y en el vac¨ªo. El resultado es una autoestima da?ada, estados depresivos y no conseguir superar la ruptura".
DESEO Y ATRACCI?N SEXUAL, MEJOR JUNTOS QUE POR SEPARADO
Utilizar el sexo buscando el dolor de la persona que nos ha abandonado no solo establece que deseamos mantener el v¨ªnculo con quien est¨¢bamos, adem¨¢s buscamos hacerle da?o. Se llama venganza y no dice mucho del que la practica aparte de que, como sostiene Jos¨¦ Bustamante, psic¨®logo y sex¨®logo, deja bien claro que sigue existiendo una relaci¨®n emocional. "La relaci¨®n sexual que comience debe partir del deseo, jam¨¢s del reproche o la venganza. Solo as¨ª tendr¨¢ sentido y nos ayudar¨¢ a recuperarnos". Seg¨²n Lori Brotto y Morag Yule, sex¨®logas que participan en los estudios que publica la revista Archives of Sexual Behavior, el deseo y la atracci¨®n sexual determinan c¨®mo actuaremos la primera vez que tengamos sexo despu¨¦s de una ruptura. Sus estudios parten de discernir entre atracci¨®n sexual y deseo. La atracci¨®n sexual es una estimulaci¨®n a diferentes sensibilidades que evolucionan a lo largo de nuestra vida. Nos sentimos atra¨ªdos por ejemplo por los senos grandes en la adolescencia, pero con la edad, puede que nos atraigan los peque?os. Para que deseemos a una persona necesitamos que todo fluya; es una respuesta emocional completa a un c¨²mulo de caracter¨ªsticas que nos motivan para tener sexo. Por eso, es probable que alguien con un atractivo sexual abrumador deje de interesarnos si no nos trata bien o si las peleas son constantes en la convivencia. La atracci¨®n sexual favorece el sexo por despecho, pero eso no quiere decir que incluya deseo por el nuevo amante. Ojal¨¢ el deseo y la atracci¨®n sexual fueran de la mano en todos y cada uno de nuestros polvos.
Saquemos algo positivo del sexo por despecho. Y hag¨¢moslo conscientemente. Para Isabel Serrano, el despecho significa enfado, rabia y es una emoci¨®n activadora frente a la tristeza o la depresi¨®n que nos paran: "La ira te pone en marcha para remontar y salir del bache. La canci¨®n de Paquita la del Barrio lo describe muy bien: tres veces te enga?¨¦, la primera por despecho, la segunda por capricho, la tercera por placer. En una ruptura puede darse esta escalada positiva pero teniendo en cuenta que con la ira perdemos la capacidad de raciocinio y, por tanto, corremos riesgo en meternos en relaciones de las que nos arrepentiremos. Mejor tener la cabeza fr¨ªa si hay sexo por despecho para no hacernos da?o. La autoestima es amor y respeto hacia uno mismo. No lo olvidemos nunca. Nunca".?
EL DUELO: PUNTO DE PARTIDA PARA LA RECUPERACI?N.
Pasar el duelo es la ¨²nica manera de resolver el conflicto interior que provoca una ruptura. "En toda ruptura hay un conflicto no resuelto. Las rupturas acaban con la convivencia, pero no con los conflictos que favorecieron el final de la relaci¨®n. Si no se pasa por el duelo, se corre el riesgo de desplazar todo lo no resuelto a la siguiente relaci¨®n. El objetivo del duelo es poder poner la energ¨ªa y el afecto que antes estaba en la pareja, primero en nosostros mismos aunque hayamos sido abandonados y despu¨¦s, si aparece, en la siguiente relaci¨®n", explica Isabel Serrano. "Las fases del duelo son: negaci¨®n, ira, tristeza, regateo y salida del duelo. Primero anestesian brevemente la herida, luego la limpian y finalmente la cierran dejando una m¨ªnima cicatriz que no duela para las siguientes relaciones".
?Qu¨¦ tal si la pr¨®xima vez nos curamos las heridas con una buena terapia? Prueben a elegir la canci¨®n apropiada para bailarla desnudos en el sal¨®n con las ventanas abiertas.
Mis vecinos claman por que me deje pronto el pen¨²ltimo que me rob¨® el coraz¨®n...
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