El sue?o de Arrhenius sigue vivo
La vida no se origin¨® en la Tierra desde cero, sino que parti¨® de una qu¨ªmica org¨¢nica que nos regalaron los cometas, en una forma blanda de panspermia que no carece de inter¨¦s filos¨®fico
¡°Los ingredientes para la vida llegaron de fuera de la Tierra¡±, como puedes leer en Materia en una interesante entrevista con Luisa Lara, astrof¨ªsica y cazadora de cometas. El sue?o de Arrhenius, la panspermia u origen extraterrestre de la vida, sigue por tanto vivo, aunque solo en una versi¨®n blanda: no es que la primera bacteria llegara aqu¨ª desde el espacio (panspermia dura), sino que se form¨® aqu¨ª con unos materiales qu¨ªmicos llegados del espacio (panspermia blanda). Cient¨ªficamente no es lo mismo, pero filos¨®ficamente tiene un alcance similar. La Tierra joven no era aut¨®noma para generar vida. Los componentes esenciales de la biolog¨ªa, la l¨®gica profunda de la qu¨ªmica org¨¢nica, nos llovieron del cielo. Puede considerarse una humillaci¨®n a nuestra ruin parcela del cosmos, aunque tambi¨¦n un v¨ªnculo que nos une al gran plan del universo, uno en el que somos un producto de las leyes de la naturaleza. Decida el lector si eso le consuela.
Puede considerarse una humillaci¨®n a nuestra ruin parcela del cosmos, aunque tambi¨¦n un v¨ªnculo que nos une al gran plan del universo
La panspermia, ya sea dura o blanda, es cualquier cosa menos una novedad filos¨®fica. Hace ya 2.500 a?os que el concepto apareci¨® por escrito en una obra de Anax¨¢goras, y seguramente ya era una pieza de tradici¨®n oral antes de la Grecia cl¨¢sica. Tampoco es una novedad cient¨ªfica, pues hay una larga y noble lista de f¨ªsicos que la han defendido con argumentos: Berzelius, Richter, Kelvin, Helmholtz y Arrhenius, por no mencionar a los m¨¢s recientes Hoyle, Wickramasinghe, Crick y Venter. Algunos de estos cient¨ªficos apuestan por la propagaci¨®n de la vida ¡ªen forma de algo parecido a nuestras bacterias¡ª a bordo de meteoritos, asteroides o cometas, y otros prefieren una mano conductora en forma de civilizaci¨®n tecnol¨®gica que expande sus esporas con los cohetes m¨¢s avanzados.
La gran bi¨®loga Lynn Margulis, que muri¨® hace unos a?os, se part¨ªa de risa con todas esas hip¨®tesis pansp¨¦rmicas de los f¨ªsicos. Dec¨ªa que no hab¨ªan entendido la naturaleza profunda de la vida, sus principios generales de autoorganizaci¨®n, su l¨®gica autoalusiva. Como la mayor¨ªa de los bi¨®logos, Margulis cre¨ªa que la vida se hab¨ªa originado en la Tierra a partir de sus meros componentes qu¨ªmicos, las mismas mol¨¦culas que forman hoy el coraz¨®n metab¨®lico de cada una de nuestras c¨¦lulas. Margulis tambi¨¦n se re¨ªa de que la panspermia no resolviera ning¨²n problema cient¨ªfico ni filos¨®fico. Solo lo desplazaba a otro lugar anterior, como un mal pol¨ªtico.
Pero la panspermia blanda ¨Cla de los compuestos qu¨ªmicos que nos llegaron de los cometas¡ª ya es ortodoxia cient¨ªfica. Hay al menos unos cuantos problemas de la qu¨ªmica org¨¢nica que podemos diferir a una situaci¨®n anterior. Como los malos pol¨ªticos.
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