¡°Tiraban a los ni?os por la ventana¡±
Una testigo relata a EL PA?S las escenas de terror vividas durante el incendio de una torre de viviendas en Londres
Amina Sharia, una vecina de la torre Grenfell de Londres, que ha ardido esta noche, ha relatado a EL PA?S las escenas de terror vividas durante el incendio que ha arrasado el edificio. La mujer ha visto c¨®mo las llamas lo devoraban mientras decenas de personas permanec¨ªan atrapadas en su interior.
¡°He visto a muchos ni?os en las ventanas, con las manos apoyadas en las ventanas, gritando, chillando, pidiendo ayuda. ¡®?Ayuda, ayuda, sacadme de aqu¨ª!¡¯, Nadie pod¨ªa hacer nada, nadie pod¨ªa ayudarles¡±, explica Sharia.
La mujer tambi¨¦n ha visto c¨®mo algunas personas lanzaban a sus hijos en un intento desesperado de salvarles la vida: ¡°Todos los ni?os y sus madres estaban en las ventanas gritando, y algunas madres estaban tirando a los ni?os. Y otra mujer estaba intentando tender una cuerda para bajar, pero estaba realmente alto para poder bajar, le dijimos que no lo hiciera¡±.
¡°30 a?os de nuestra vida se han quedado all¨ª¡±
Dos familias gallegas salvaron su vida tras ser alertados por un vecino portugu¨¦s. Tras 28 a?os de emigrante en Londres, la gallega Dorinda Su¨¢rez lo ha perdido todo en el incendio de la Torre Grenfell menos la vida. ¡°S¨¦ que he vuelto a nacer, pero es muy duro. Treinta a?os de nuestra vida se han quedado en ese edificio¡±, se?ala esta mujer, trabajadora de la limpieza, desde el piso de unos amigos, tambi¨¦n gallegos, donde se ha realojado tras la tragedia junto a su marido Jos¨¦, empleado de una constructora inglesa, y su hijo Iv¨¢n, estudiante. Fue un vecino portugu¨¦s que regresaba del aeropuerto el que los despert¨® aporre¨¢ndoles la puerta de su casa en la planta 13 para alertarles de que las llamas estaban devorando el inmueble. ¡°Si no fuera por ¨¦l, estar¨ªamos muertos¡±.
En apenas unos minutos que apenas recuerda, abandonaron la vivienda de alquiler social que les concedi¨® el Ayuntamiento londinense hace 22 a?os, y tras avisar por tel¨¦fono a otra familia gallega que resid¨ªa en el piso s¨¦ptimo, Dorinda corri¨® escaleras abajo con su marido y su hijo. ¡°Dejamos all¨ª tantos recuerdos, fotograf¨ªas¡ Lo que m¨¢s me duele es haber perdido objetos que eran de mis padres, que ya fallecieron. Pero al menos nosotros estamos aqu¨ª¡±, relata por tel¨¦fono, emocionada y abrumada por el aluvi¨®n de mensajes y llamadas de conocidos ofreci¨¦ndoles apoyo para superar una cat¨¢strofe que todav¨ªa ¡°est¨¢n asimilando¡±.
Tras lograr salir del edificio en llamas, Dorinda y su familia se quedaron en la calle presenciando entre l¨¢grimas el horror de la Torre Grenfell. A las tres de la madrugada se refugiaron en la casa de sus amigos, ubicada justo enfrente del edificio incendiado y desde cuyas ventanas esta gallega de Malpica (A Coru?a) observa con dolor el esqueleto del que fue su hogar. All¨ª han pasado el d¨ªa despu¨¦s con el otro matrimonio gallego que ha sobrevivido junto a su hija, el de la planta s¨¦ptima.
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