Lo que puede aprender Espa?a de la lucha contra el hambre en Am¨¦rica Latina
La regi¨®n avanza en la erradicaci¨®n de la inseguridad alimentaria gracias a la colaboraci¨®n entre pol¨ªticos e investigadores. Universidades espa?olas quieren replicar el modelo
La regi¨®n de Am¨¦rica Latina y el Caribe hizo los deberes en la lucha contra el hambre. Un a?o antes de que se cumpliese el plazo marcado por los Objetivos del Milenio, en diciembre de 2014, un informe de la?Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO) constataba que hab¨ªa logrado la meta de "reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, la proporci¨®n de personas que padecen hambre". Se hab¨ªa pasado de un 15,3%?de la poblaci¨®n ¨C68,5 millones de personas¨C sin acceso a alimentos suficientes para cada d¨ªa en 1990 a un 6,1%?¨C37 millones¨C en el momento de la publicaci¨®n. Ahora, el objetivo marcado por la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible es mucho m¨¢s ambicioso: hambre cero y la realizaci¨®n del derecho a una alimentaci¨®n adecuada. Tambi¨¦n Espa?a debe cumplir y tiene mucho que aprender del modelo de colaboraci¨®n entre investigadores y pol¨ªticos que ha funcionado al otro lado del Atl¨¢ntico. Al menos, eso creen las universidades que quieren replicarlo.
Con el prop¨®sito de alcanzar la meta y con el apoyo de la FAO y la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n al Desarrollo (AECID), naci¨® en 2009 el Frente Parlamentario contra el Hambre de Am¨¦rica Latina y el Caribe, una red de m¨¢s de 300 legisladores de diferentes parlamentos y colores pol¨ªticos. Su misi¨®n es impulsar en sus pa¨ªses pol¨ªticas p¨²bicas para erradicar este problema en 2025, cinco a?os antes de la fecha marcada en la agenda internacional (2030). Para conseguirlo, no est¨¢n solos, cuentan con el apoyo del Observatorio del Derecho a la Alimentaci¨®n en la regi¨®n (ODA-ALC), una red de 45 universidades de 17 pa¨ªses que "busca potenciar y difundir actividades acad¨¦micas para incentivar y generar conocimiento y reflexiones en torno al derecho a la alimentaci¨®n adecuada, con el fin de lograr influir en las pol¨ªticas p¨²blicas de seguridad alimentaria y nutricional", se especifica en su p¨¢gina web.
De la colaboraci¨®n entre las universidades y los pol¨ªticos implicados en la lucha contra el hambre han nacido m¨¢s de 20 leyes con ese prop¨®sito
"Les necesitamos para ser eficientes en la formulaci¨®n y modificaci¨®n de leyes", ha dicho Luisa Mar¨ªa Calder¨®n, senadora mexicana y miembro del Frente Parlamentario, en un encuentro en Madrid este mi¨¦rcoles con investigadores latinoamericanos y espa?oles. De esta colaboraci¨®n entre el mundo acad¨¦mico y la pol¨ªtica para erradicar el hambre han nacido m¨¢s de 20 normas nacionales y regionales con tal fin. Es el caso de la Ley 622 de Alimentaci¨®n Escolar en el marco de la Soberan¨ªa Alimentaria y la Econom¨ªa Plural de Bolivia, aprobada en diciembre de 2014. Roberto Laura Barr¨®n, de la facultad de Derecho de la Universidad Mayor San Andr¨¦s de aquel pa¨ªs e integrante de la secretar¨ªa t¨¦cnica del Observatorio, ha expuesto los resultados que corroboran el ¨¦xito de la medida. "Con el apoyo a los estudiantes con menos posibilidades econ¨®micas se estimula la permanencia, con una alimentaci¨®n sana, oportuna y culturalmente apropiada". Adem¨¢s, el mandato de adquirir la comida a productores locales ha estimulado la econom¨ªa, ha se?alado. "Han bajado los niveles de abandono escolar y anemia", ha subrayado.
Este y otros avances acercan a la regi¨®n a su objetivo de erradicar esta lacra. "Hay algunos que ya lo han conseguido como Chile o Uruguay, que est¨¢ a punto", ha se?alado Calder¨®n. Muchos pa¨ªses, adem¨¢s, han incluido el derecho a la alimentaci¨®n en sus constituciones nacionales, pero los progresos en su realizaci¨®n son desiguales, todav¨ªa muchos Estados registran altas tasas de inseguridad alimentaria (no saber si en el d¨ªa que empieza, se podr¨¢ comer): en Hait¨ª, un 53,4% de su poblaci¨®n pasa hambre; en Nicaragua, un 16,6%. En este sentido, varios participantes en la reuni¨®n han coincidido en se?alar a la pobreza como causa original de la falta de acceso a comida suficiente y de calidad. Los frentes de batalla son m¨²ltiples. Ahora, se abre uno nuevo: la malnutrici¨®n, con la obesidad y el sobrepeso como principales amenazas a la salud global. Ambos son factores de riesgo de enfermedades no transmisibles (diabetes, cardiopat¨ªas, accidentes cerebrovasculares, entre otros) y seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) afectan a m¨¢s de 1.900 millones de adultos en el mundo.
?Qu¨¦ puede aprender Espa?a?
Pese a los retos que todav¨ªa quedan por delante, la experiencia del Frente Parlamentario de Am¨¦rica Latina y el Caribe y el Observatorio del Derecho a la Alimentaci¨®n puede servir de ejemplo a Espa?a. Ya en 2016, una delegaci¨®n de pol¨ªticos latinoamericanos visit¨® el pa¨ªs para promover un Frente Parlamentario contra el Hambre en Espa?a, que deber¨ªa estar conformado por representantes de todo signo pol¨ªtico. La idea no fructific¨®. Sin embargo, las universidades s¨ª han recogido el guante de sus colegas al otro lado del Atl¨¢ntico.
Tres investigadores espa?oles acudieron al VI encuentro del Observatorio en Montevideo, capital de Uruguay, y pensaron que Espa?a necesitaba uno. "Nos gustar¨ªa entrar en contacto con los pol¨ªticos para que podamos replicar las buenas relaciones que hay entre la Academia y los pol¨ªticos en Am¨¦rica Latina", afirma Amparo Novo, directora de la c¨¢tedra de estudios de gobernanza alimentaria de la Universidad de Oviedo. Eso se har¨¢ cuando se constituya formalmente el Observatorio. De momento, tras aprender de la historia y experiencia compartida por sus colegas latinoamericanos este mi¨¦rcoles en la sede de la AECID en Madrid, las universidades que se han interesado en formar parte de la red redactar¨¢n el reglamento que regir¨¢ su actividad. Despu¨¦s, vendr¨¢n los tr¨¢mites burocr¨¢ticos hasta su final constituci¨®n. "La creaci¨®n del Observatorio ya est¨¢ encaminada. Esto no lo para nadie", asegura Novo.?
Los impulsores del Observatorio del Derecho a la Alimentaci¨®n en Espa?a creen que se deber¨ªa reconocer este derecho en la Constituci¨®n
?Para qu¨¦? "En Espa?a hay muchos retos, pero el primero ser¨ªa en que se reconociera el derecho a la alimentaci¨®n", apunta como meta Celia Fern¨¢ndez Aller, profesora de Derecho en la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid. En este sentido, varios pa¨ªses de Latinoam¨¦rica llevan ventaja. No solo a Espa?a, sino a Europa: a diferencia de la sanidad o la educaci¨®n, ning¨²n pa¨ªs de la UE reconoce expl¨ªcitamente y por ley el derecho a la alimentaci¨®n, lo que hace que la asistencia dependa de decisiones pol¨ªticas o de la caridad. "Vemos que podemos trabajar para conseguir que se recoja en la Constituci¨®n", apunta alto Novo.
H¨¦ctor Silveira, especialista en Filosof¨ªa del Derecho de la Universidad Barcelona y el tercer fundador, critica que no solo no est¨¢ reconocido el derecho a alimentaci¨®n, sino que tampoco se cumple y respeta en Espa?a, pese a ser un pa¨ªs rico. "Nosotros queremos desentra?ar qu¨¦ ocurre y conocer las causas de este incumplimiento", detalla. "Hasta ahora, el problema en el pa¨ªs se ha evidenciado por informes publicados por organizaciones sociales como Save the Children o C¨¢ritas, testigos de los estragos en estos a?os de crisis. Nuestro objetivo es generar evidencia emp¨ªrica a nivel local", abunda. Todo, para apoyar a los legisladores en la guerra que, a¨²n sin haber creado un frente com¨²n, ineludiblemente tienen que librar contra el hambre y la malnutrici¨®n. Porque as¨ª lo manda el n¨²mero dos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
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