Jesse Baez, el acompa?ante de Kendrick Lamar y C Tangana, est¨¢ de gira en Espa?a
Jesse Baez, el m¨²sico guatemalteco de Finesse Records -ha colaborado con Broke Ni?os Make Pesos o Alizzz y versionado a Partynextdoor o The Weekend- act¨²a ma?ana jueves en Madrid, el viernes en Barcelona, el 7 de julio en Marbella y el 8 en San Sebasti¨¢n
Poco a poco comenzamos a desestimar la creencia de que todo nuevo conocimiento o toda nueva cultura conlleva una sustituci¨®n o transformaci¨®n de viejas experiencias en otras parcialmente distintas. Las experiencias se superponen, conviven sin problemas con f¨®rmulas m¨¢s estereotipadas y resucitan nichos que parec¨ªan desterrados, como el de las versiones. ?Qu¨¦ os suena mejor: la versi¨®n espa?ola que hace Fuego de 'Hotline bling' o la original?
El cantante guatemalteco filtra su amor por The Temptations o Juan Luis Guerra de la misma forma que el afecto por Childish Gambino, How to Dress Well o la serie EMPIRE
La respuesta m¨¢s correcta ser¨ªa que ninguna suena mejor que otra. La m¨¢s natural ser¨ªa que prefieres la versi¨®n de Fuego porque despierta con mayor facilidad una sensualidad com¨²n y eso a su vez facilita el disfrute en la puesta en escena o en el baile en un entorno social. Durante d¨¦cadas hemos sido sometidos y machacados ante la peregrina y reduccionista idea de que el ingl¨¦s como lengua de Shakespeare (tambi¨¦n la de Donald Trump) proyectaba mayor recorrido en los artistas. La idea de competencia y profesionalidad era indivisible del idioma. Tanto ha cambiado la vida, por suerte, que mientras hace apenas un par de a?os se entend¨ªa como una ¡°paletada¡± que Espa?a no presentara canciones en ingl¨¦s a Eurovisi¨®n, en este 2017 se clamaba por incluir el reggaet¨®n en el concurso.
Si actualmente se est¨¢n derribando barreras en torno a los prejuicios del castellano en la m¨²sica ha sido, en parte, como respuesta a una actitud imperialista y gracias al desarrollo exponencial de la m¨²sica latina y urbana. J Balvin y Nicky Jam mof¨¢ndose de la pronunciaci¨®n de Justin Bieber en Despacito nos devuelve un poquito de esperanza en el status quo.
La lucha se produce en varios frentes, no s¨®lo en el reggaet¨®n o el trap patrio. Desde M¨¦xico y v¨ªa Finesse Records, el sello que os presentamos hace unos meses como la revoluci¨®n del r&b latino, Jesse Baez se perfila como una promesa ya cumplida.
Este verano le encontrar¨¦is compartiendo cartel con Kendrick Lamar, en 2016 tocaba en el Ceremonia junto a NAS o Anderson Paak y adem¨¢s ha sido el acompa?ante de C Tangana en su periplo por lationam¨¦rica. Esta misma semana comienza su gira por Espa?a, ma?ana 29 de junio estar¨¢ tocando en Madrid, un d¨ªa m¨¢s tarde en Barcelona, el 7 de julio en Marbella y el 8 en San Sebasti¨¢n.
Los lazos entre Baez y distintos productores y artistas espa?oles hac¨ªan inminente y esperada su llegada. Fruto de estas colaboraciones un Ep con Broke Ninios Make Pesos en el que destaca un tema que reza t¨² eres mi Rihanna junto a Indigo Jams o el rework de Alizzz de su ¨²ltimo tema Apaga la Luz que se desvelaba hace apenas unos d¨ªas.
Jesse Baez canta desde un lugar inc¨®modo, incapacitado para abandonar la sensualidad o la emotividad en sus letras, equilibra las dosis de afecto a la que estamos poco acostumbrados con una imagen serena, casi pasiva en todos sus v¨ªdeos. Forzado a abandonar la adolescencia, Jesse deambula por salones y calles en un espacio que intenta protegerse de la vida adulta mediante l¨ªricas huidizas e existencialistas, consiguiendo que el desamor vuelva a sonar cre¨ªble.
Sus versiones de Partynextdoor o The Weekend hacen por restituir el concepto de copia un paso m¨¢s all¨¢ del original. Esta literalidad en la fractura compositiva recrea una excentricidad que Holderlin definir¨ªa como el oscilar entre la nostalgia y la inocencia primigenia en b¨²squeda de una armon¨ªa del hombre.?
Si pensamos la adolescencia como un per¨ªodo de tiempo en el que no existen los intereses reales: ni m¨²sica, ni arte, ni moda o pol¨ªtica; como la fase en la que el ser se reduce a una sanguijuela ambiciosa de la vida emocional que se ahoga en lazos personales de cierta intensidad, el fin de la adolescencia pasar¨ªa por transformar las ambiciones en los intereses y comenzar a interesarse por ellos nuevamente. Ah¨ª mismo es donde Baez encuentra su sitio.
El cantante guatemalteco filtra su amor por The Temptations o Juan Luis Guerra de la misma forma que el afecto por Childish Gambino, How to Dress Well o la serie EMPIRE. En B.A.E.Z, su primer trabajo, un Ep de 7 temas que ya cuenta con un a?o de trayectoria, perfila lo que ser¨¢ una interpretaci¨®n intimista de sus influencias sin convertir en momia o fetiche la cultura pasada.
No sabemos hasta cu¨¢ndo podremos permitirnos estos juegos rom¨¢nticos de vuelta a casa, en nuestro idioma, ni hasta cuando la m¨²sica que nos pone cachondos estar¨¢ de moda sin que una censura moral o una nueva ola de rock y electr¨®nica industrial asome al panorama musical, mientras tanto tenemos la suerte de poder verlo en concierto.
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