Legitimando a Podemos

El giro pol¨ªtico que Pedro S¨¢nchez quiere imprimir al PSOE me recuerda la misma maniobra que el PSC llev¨® a cabo tras las elecciones auton¨®micas catalanas de 1999. En efecto, en aquellos comicios, el PSC obtuvo m¨¢s votos que CiU pero esta fue ganadora en esca?os. As¨ª Pujol, con el apoyo parlamentario del PP, no lo olvidemos, fue elegido presidente.

Tras este resultado, la reacci¨®n socialista fue acercarse a ERC porque consideraba que tambi¨¦n era un partido de izquierdas, no un partido nacionalista. Resultado de todo ello fue un acuerdo con los republicanos para reformar el Estatuto de 1979 y formar grupo propio en el Senado. Desde el 2000 al 2003, se empez¨® a fraguar el antecedente inmediato de la actual situaci¨®n catalana: los socialistas legitimaron a ERC, un partido independentista, como partido de gobierno y, adem¨¢s confiaron en ¨¦l para reformar el estatuto vigente. CiU, en su puja con Esquerra para demostrar quien era nacionalista de verdad, propuso que era necesario un nuevo Estatuto, como as¨ª fue.

Es decir, por razones t¨¢cticas de partido, primero los socialistas y despu¨¦s los convergentes, iniciaron una carrera para aprobar un nuevo estatuto que nadie ped¨ªa. Los intereses de partido se impusieron a los intereses generales.

Pues bien, ahora el nuevo PSOE de Pedro S¨¢nchez, para demostrar que es de izquierdas, quiere acercarse a Podemos. ¡°Somos la izquierda¡±, proclama una gran pancarta tras la mesa presidencial. En el fondo, algo acomplejadamente, se insin¨²a ¡°somos la izquierda porque nos acercamos a Podemos¡±. Con lo cual, en conclusi¨®n, la izquierda, la de verdad, es Podemos y lo que nos da marchamo de izquierdas a los socialistas es ir junto a ellos para derrotar al PP.

Las derivadas ¨²ltimas de esta l¨®gica son, primera, que Podemos ya no es un partido populista sino un partido de izquierdas con el cual se puede gobernar; y, segunda, el viejo PSOE, el de Felipe, Solana y Rubalcaba, ¨²ltimamente el de Javier Fern¨¢ndez y Susana D¨ªez, se hab¨ªa derechizado y hab¨ªa dejado de ser de izquierdas.

A veces, las maniobras t¨¢cticas dan buenos frutos inmediatos ¨C Maragall y Montilla fueron presidentes de la Generalitat ¨C pero a la larga resultan letales. El PP de Aznar hizo presidente a Pujol en 1999 porque ambos eran de ¡°derechas¡±, Maragall form¨® gobierno con ERC porque ambos eran de ¡°izquierdas¡±. Result¨® que CiU y ERC eran, por encima de todo, nacionalistas. Hoy tanto el PSC como CiU son partidos en decadencia mientras ERC es el triunfador.

Que no le pase lo mismo al nuevo PSOE con Podemos: lo est¨¢n legitimando como la izquierda aut¨¦ntica y, entre lo verdadero y la copia, los votantes, v¨¦ase el caso de ERC, nunca conf¨ªan en la copia.