El giro
Hoy, bajo el paraguas emocional de la naci¨®n, muchos sujetos permanecen invisibles
Hubo un tiempo en el que la democracia dej¨® de entenderse como un modelo de desarrollo individual y se redujo a celebrar religiosamente al pueblo en abstracto. Las personas ya no eran el punto de referencia sobre el que pensar el sistema pol¨ªtico; primaba la idea de una voluntad general, simplificada en un equ¨ªvoco hecho mayoritario. La sociedad de individuos, iguales en dignidad, cedi¨® ante la recomposici¨®n de un ¡°nosotros¡± nacional dibujado con el rostro vengativo del rechazo a los indignos de ese demos.
El mantra de construir un pueblo venci¨® a la aspiraci¨®n de hacer una sociedad en com¨²n, y cuando todo exig¨ªa hacer m¨¢s compleja la democracia, esta se simplific¨®. Desapareci¨® el debate de ideas ante la econom¨ªa de los esl¨®ganes. La libre cr¨ªtica, singular y espont¨¢nea, convirti¨® a sus practicantes en traidores, ap¨®statas y blasfemos. Al parecer, la discusi¨®n racional era elitista. Todo lo logrado frente al peso del dogmatismo, la opini¨®n p¨²blica o la presi¨®n moral de una mayor¨ªa sobre la libertad individual dej¨® de verse como valor.
En lugar de extender el campo de juego de las identidades cruzadas, ampliando as¨ª nuestra libertad de acci¨®n y pensamiento, se las present¨® como excluyentes: era m¨¢s emancipador encajar la plasticidad en la sola voz. Fueron los profetas de la autenticidad quienes, en nombre de la democracia, practicaron ese ¡°antagonismo administrado¡±. Y se dijo con raz¨®n que hab¨ªa una crisis de representaci¨®n.
Antes que ampliar sus cauces, se prefiri¨® proyectarla sobre una ficci¨®n aritm¨¦tica que aprehendiera en una masa homog¨¦nea nuestras historias singulares. No quisimos profundizar en la complejidad de la representaci¨®n; entender que su opuesto no es la participaci¨®n sino su ausencia misma. Hoy, bajo el paraguas emocional de la naci¨®n, muchos sujetos permanecen invisibles. El pueblo, ahora, es un ¡°plural de condiciones minoritarias¡±, disueltas en din¨¢micas totalizadoras. ?Qu¨¦ pas¨® entonces? Que una parte nos lo vendi¨® como lo progresista y democr¨¢tico, y la otra mir¨® hacia el otro lado. @MariamMartinezB
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