Espa?a se desertiza

Hace 10 a?os form¨¦ parte de un movimiento global medioambiental, The Climate Reality Project, un grupo de voluntarios cuya misi¨®n era concienciar a los ciudadanos sobre c¨®mo afrontar la crisis planetaria del calentamiento del planeta. Unos cursos previos de formaci¨®n basados en el pol¨¦mico libro Una verdad inc¨®moda (An Inconvinient Truth, de Al Gore) ser¨ªan nuestro gu¨ªa y nos informar¨ªan de las graves consecuencias del planeta en caso de no tomar medidas a tiempo. Seg¨²n datos, la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, la zona de Europa m¨¢s rica en biodiversidad por su situaci¨®n geogr¨¢fica pr¨®xima al continente africano, iba a ser la primera y la que m¨¢s sufrir¨ªa los efectos del cambio clim¨¢tico. A pesar de los m¨²ltiples esc¨¦pticos, parece ser que aquel libro ten¨ªa raz¨®n: en la ¨²ltima d¨¦cada m¨¢s de 50.000 incendios, naturales o provocados (?d¨®nde est¨¢n las sentencias para los responsables de delitos de incendio?), han arrasado miles de hect¨¢reas de monte y masa verde, y en lo que va de a?o ya hemos superado con creces las cifras de hect¨¢reas calcinadas el a?o pasado. De seguir a este ritmo, en menos de 20 a?os la escasez de masa verde provocar¨¢ una subida irremediable y progresiva de las temperaturas, y Espa?a entera se convertir¨¢ en un desierto t¨®rrido. En su casa-estudio de Finlandia, el arquitecto Alvar Aalto tiene una frase que dice as¨ª: ¡°El bosque puede arregl¨¢rselas sin el hombre, pero el hombre nunca podr¨¢ vivir sin los bosques¡±.¡ª Lola Arpa Vilallonga. Mas Palet Peratallada (Girona).