Terroristas muertos
El ataque en La Rambla llama a la unidad en una nueva agenda pol¨ªtica
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El terrorismo elige a conciencia a sus enemigos y esta vez ha escogido una ciudad que representa como ninguna otra el esp¨ªritu de espacio abierto, democr¨¢tico y plural que el radicalismo intenta precisamente cercenar. El atentado que ha sacudido este jueves el coraz¨®n de Barcelona es un golpe a una ciudad emblem¨¢tica, din¨¢mica y cosmopolita que recibe el afecto y la visita de millones de personas de todas partes del mundo, motor econ¨®mico y cultural europeo y mediterr¨¢neo de primera envergadura, pero tambi¨¦n a un pa¨ªs ¡ªEspa?a¡ª que libra desde el doloroso 11 de marzo de 2004 un combate en¨¦rgico y sin tregua contra el terrorismo y a un continente ¡ªEuropa¡ª que se ha convertido en primera l¨ªnea del frente para un islamismo extremista que intenta acabar con sus valores.
En un atropello masivo en La Rambla de Barcelona, el conductor reparti¨® su violencia en la zona m¨¢s tur¨ªstica y concurrida por excelencia, segando vidas que presumiblemente pertenecer¨¢n a m¨²ltiples nacionalidades. A la espera de confirmaci¨®n, las v¨ªctimas ascienden al menos a 13 muertos y m¨¢s de 50 heridos en el atentado m¨¢s sangriento en suelo espa?ol desde el fat¨ªdico 11-M.
Espa?a hab¨ªa logrado librarse desde entonces del l¨¢tigo terrorista. La eficacia policial y judicial, la firmeza en la seguridad y la inteligencia empleada y la coordinaci¨®n con otras fuerzas policiales internacionales hab¨ªan logrado contener una amenaza que lo ocurrido este jueves nos recuerda que nunca se vence del todo.
Los atentados cometidos en los ¨²ltimos meses en M¨¢nchester (22 muertos en un concierto este mismo a?o), Berl¨ªn (12 personas muertas atropelladas en un mercado navide?o en 2016), Niza (84 muertos y 300 heridos por un cami¨®n en 2016), Bruselas (32 muertos y 300 heridos en 2016) o Par¨ªs (130 muertos en salas de fiesta y 12 muertos en el ataque a la revista Charlie Hebdo, ambos en 2015), sumados a ataques con cuchillos, machetes y m¨¢s atropellos en distintos puntos del continente, no solo reflejan que los terroristas mantienen e intensifican su agenda mortal, sino que recurren a m¨¦todos cada vez m¨¢s crueles y letales como los atropellos con camiones y furgonetas.
Este crimen tiene que ser un aldabonazo que devuelva a la pol¨ªtica catalana a la realidad
La nueva ofensiva terrorista coincide adem¨¢s con la extensi¨®n de un perfil m¨¢s aut¨®nomo del terrorista, que solo de forma ideol¨®gica y no log¨ªstica pertenece a una organizaci¨®n m¨¢s et¨¦rea que crece en el adoctrinamiento r¨¢pido y f¨¢cil en las redes. La lucha, por tanto, es m¨¢s compleja. Las derrotas del ISIS sobre el terreno en Irak y Siria, adem¨¢s, contamina los vasos comunicantes con sus seguidores o milicianos en Europa. Catalu?a ha sido, dentro de Espa?a, un lugar de riesgo importante al ser uno de los focos de yihadismo y radicalizaci¨®n, junto con Ceuta, Melilla y el ¨¢rea metropolitana de Madrid.
Es obvio que las fuerzas de seguridad deben coordinarse al m¨¢ximo para prevenir atentados como el de La Rambla. Con todo, el desaf¨ªo ante el que nos encontramos no es solo policial. Un atentado como este exige una respuesta eficaz y coordinada por parte del Gobierno de la naci¨®n. La labor de las instituciones del Estado, con el Ejecutivo a la cabeza, es garantizar la libertad y la seguridad de los ciudadanos, usando para ello todos los medios a su alcance.
Celebramos, por tanto, que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, haya decidido encabezar, junto con la Delegaci¨®n del Gobierno en Catalu?a, la supervisi¨®n de las operaciones de respuesta ante el ataque. Es lo m¨ªnimo que se espera ante una crisis como la que se abre en La Rambla.
Apelamos al Govern para que se ponga al servicio de los problemas reales de Catalu?a
Sin embargo, pensamos que las consecuencias de este atentado deben ser de m¨¢s hondo calado e ir m¨¢s all¨¢ del momento coyuntural. Lamentablemente, el brutal atentado terrorista que ha vivido Barcelona coincide con un momento de m¨¢xima confusi¨®n pol¨ªtica en Catalu?a.
Un ataque de esta magnitud tiene que ser un aldabonazo que devuelva a la realidad a las fuerzas pol¨ªticas catalanas que, desde el Govern, el Parlament o los movimientos por la independencia han hecho de la quimera secesionista la sola y ¨²nica actividad de la agenda pol¨ªtica catalana en los ¨²ltimos a?os. Es hora de acabar con los sinsentidos democr¨¢ticos, la violaci¨®n flagrante de las leyes, los juegos de enga?os, los tacticismos y los oportunismos pol¨ªticos. Es hora de que nuestros gobernantes, todos nuestros gobernantes, trabajen en beneficio de los verdaderos y principales intereses de los ciudadanos.
La lucha contra el terrorismo requiere la m¨¢xima coordinaci¨®n y unidad de acci¨®n entre las diferentes administraciones y fuerzas de seguridad del Estado. Esa colaboraci¨®n solo puede nacer de la m¨¢s absoluta confianza entre los diferentes niveles de Gobierno y sus instituciones. Hacemos por tanto un llamamiento al Govern y a las fuerzas pol¨ªticas catalanas para que se pongan a trabajar en una agenda real al servicio de los problemas reales que afectan a la ciudadan¨ªa de Catalu?a.
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