Alcoholizados

La juventud de hoy est¨¢ alcoholizada. Y no lo dice un abuelo cascarrabias, sino un chico de 19 a?os que lo vive d¨ªa a d¨ªa. Cuando nos juntamos, ya no discutimos sobre la pel¨ªcula que ver en el cine, o la discoteca a la que ir, sino sobre qu¨¦ bebida se va a comprar para esa noche. No hay m¨¢s que ver la fiesta universitaria de San Cemento o los comas et¨ªlicos que atienden cada noche en nuestros hospitales. Es una juventud llena de incongruencias; miramos las etiquetas de los alimentos buscando los m¨¢s ecol¨®gicos y saludables, pero no nos importa bebernos medio litro de whisky cada fin de semana. En un af¨¢n rebelde de reivindicar nuestra independencia de pensamiento, acabamos cayendo en el borreguismo del ¡°si todos lo hacen, estar¨¢ bien¡± sin pararnos a pensar en lo que uno realmente quiere. Y todo apoyado por campa?as publicitarias en las que nos meten en la cabeza la relaci¨®n directa e intr¨ªnseca de alcohol-diversi¨®n, y en las que se confunde placer con felicidad. Estamos ante un problema cuyas consecuencias se ver¨¢n dentro de unos a?os. ?Hacemos algo?¡ª Marcos Bailador Pollo. Madrid.