Carmen Mart¨ªnez-Bordi¨² a los 66 a?os: vive y deja vivir

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Confesiones televisadas de la nieta del dictador Franco

Carmen Mart¨ªnez Bordi¨² ya est¨¢ divorciada

Carmen Mart¨ªnez-Bordi¨² se hart¨® pronto de vivir protegida y tutelada en la parte de atr¨¢s del Palacio del Pardo, la residencia oficial de su abuelo, el dictador Francisco Franco. Y probablemente, aunque ni siquiera lo haya pensado, esa infancia vigilada haya marcado su car¨¢cter para siempre. Entonces porque, seg¨²n ella misma ha manifestado, ¡°lloraba mucho porque no llevaba del todo bien tanta autoridad¡± y, despu¨¦s, porque se convirti¨® a su estilo en una rebelde que ha plantado cara a las convenciones sociales durante sus 66 a?os de vida. Su nuevo alboroto ha sido publicitar a bombo y platillo ¡ªexclusiva en la revista ?Hola! de por medio¡ª su ¨²ltima relaci¨®n sentimental con un joven australiano de nombre Timothy Mckeague, coach emocional y 34 a?os m¨¢s joven que ella.

Acostumbrada a ponerse el mundo por montera si el amor se cruza en su camino, a sus amigos no les sorprende esta nueva etapa de su vida. ¡°Me extra?ar¨ªa verla con un hombre mayor¡±, afirma una persona de su entorno, ¡°porque no le pega nada. Carmen es muy positiva y alegre, especialmente cuerda porque tiene muy claro que lo que vale es el presente y que no le importa nada lo que piense la gente¡±. Mckeague ¡ªa quien conoci¨® en la Costa Azul este verano mientras trabajaba con un amigo de Carmen¡ª es un hombre muy tranquilo y observador, ¡°que se nota que la admira. Un chico natural impresionado por una mujer mayor que conserva su atractivo y sensualidad¡±, a?ade la misma fuente. Seg¨²n la descripci¨®n que hace de ¨¦l Mart¨ªnez-Bordi¨² en la revista del coraz¨®n, es otro estilo de esp¨ªritu libre que colaboraba en temas financieros hasta que decidi¨® que lo suyo era viajar, meditar en Nepal, aprender terapias alternativas y convertirse en algo que ella define como un terapeuta de la felicidad.

Un don que parece haber trasladado a la vida de la mayor de los hijos del clan Franco, a la vista de lo contenta y rejuvenecida que dicen verla sus amigos. Aunque otros conocidos indican que lo que a ella le encantar¨ªa es que quien estuviera celoso fuera Luis Miguel Rodr¨ªguez, conocido como El Chatarrero por ser el propietario de Desguaces La Torre. El ¨²nico hombre de quien Carmen Mart¨ªnez-Bordi¨² afirma haberse enamorado a los 60 a?os y el ¨²nico, tambi¨¦n, al que no ha conseguido dominar, seg¨²n aseguran quienes conocen su relaci¨®n. En los ¨²ltimos meses se les hab¨ªa vuelto a ver juntos compartiendo cenas, cine o espect¨¢culos de flamenco, y Rodr¨ªguez ha sido el primer sorprendido por la noticia del nuevo hombre en la vida de Carmen, aunque ¨¦l ni quiera volver con ella ni est¨¦ dispuesto a ning¨²n tipo de compromiso.

Llegue a donde llegue esta nueva relaci¨®n, quien fue capaz de plantar cara a los designios que so?¨® para ella su abuelo cuando se cas¨® con Alfonso de Borb¨®n o de decirle a su padre, el marqu¨¦s de Villaverde, que pod¨ªa hacer lo que quisiera con su herencia cuando no acept¨® su nueva relaci¨®n con el anticuario franc¨¦s Jean Marie Rossie, deja claro que el qu¨¦ dir¨¢n no va con ella. ¡°Vive al d¨ªa desde que muri¨® su hijo Fran [fallecido a los 11 a?os en un accidente de tr¨¢fico]¡±, afirma un amigo, ¡°y sus otros dos hijos [Luis Alfonso de Borb¨®n, de 43 a?os, y Cynthia Rossi, de 32 a?os], est¨¢n acostumbrados a no cuestionar la vida de su madre¡±. El resto le importa poco o nada.

Mientras, ella sigue alimentado el mito, apareciendo en portadas de revistas del coraz¨®n y acudiendo a eventos, sus dos fuentes de ingresos al margen de su patrimonio heredado. La discreci¨®n queda para el resto de sus hermanos ¡ªFrancis, Mariola, Crist¨®bal, Jaime y Merry¡ª quienes, despu¨¦s de unos a?os de juventud m¨¢s expuestos, parecen haber decidido blindarse ante la opini¨®n p¨²blica para dedicarse a sus negocios inmobiliarios desde la barrera.