Metal¨²rgicos alemanes en busca de m¨¢s tiempo libre
Los sindicatos quieren aprovechar la bonanza econ¨®mica para reducir las horas semanales
Los sindicalistas alemanes quieren aprovechar la bonanza econ¨®mica que atraviesa su pa¨ªs para permitirse lujos hasta hace no tanto implanteables. El todopoderoso IG Metall ha presentado esta semana una llamativa propuesta con vistas a la negociaci¨®n de las condiciones en el sector en 2018. Exigen predeciblemente subidas salariales, pero sobre todo quieren trabajar menos. En concreto, quieren que los trabajadores puedan reducir su semana laboral a 28 horas, si as¨ª lo desean, durante un m¨¢ximo de dos a?os. Con un desempleo que registra m¨ªnimos hist¨®ricos y cercano al pleno empleo, lo que los trabajadores alemanes de verdad quieren, seg¨²n el sindicato, es m¨¢s tiempo libre.
El sindicato pide que la flexibilidad horaria no sea monopolio de los empresarios y que los trabajadores puedan tambi¨¦n hacer uso de ella. IG Metall, con 2,3 millones de afiliados en un sector de cuatro millones de trabajadores, es un referente indispensable en las relaciones laborales alemanas y sus propuestas se estudian con atenci¨®n. Uno de los objetivos de la medida es feminizar el sector metal¨²rgico, en el que apenas el 20% de los trabajadores son mujeres. Quieren atraer a las trabajadoras que hasta ahora no aceptaban empleos que resultan incompatibles con la crianza.
Seg¨²n la iniciativa presentada esta semana, los trabajadores que opten por trabajar menos horas por motivos familiares o de salud recibir¨ªan adem¨¢s una compensaci¨®n. ¡°La salud y la compatibilidad entre la familia y el trabajo no tiene que depender de la cartera¡±, dijo el presidente de IG Metall, J?rg Hofmann, en un comunicado.
IG Metall aspira tambi¨¦n a que la reducci¨®n de horas se vea compensada con m¨¢s contrataciones y no se convierta en una mayor carga para los que no reducen su jornada. La propuesta servir¨¢ de base para renovar el acuerdo del sector que expira a fin de a?o y ha suscitado ya cr¨ªticas entre los empresarios. Consideran que la medida puede hacerles perder competitividad en un momento en el que el mercado laboral alem¨¢n padece una acuciante escasez de mano de obra cualificada.
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