Pesadilla detr¨¢s de los focos de la f¨¢brica de sue?os

The New Yorker public¨® el pasado 5 de octubre una explosiva investigaci¨®n sobre el todopoderoso productor de Hollywood Harvey Weinstein que ha terminado con su carrera cinematogr¨¢fica, expulsado de su compa?¨ªa y repudiado por todos. La rebeli¨®n femenina del cine, iniciada con contundencia hace dos a?os, est¨¢ dejando al descubierto que para ellas la f¨¢brica de sue?os no solo las relega, sino que para muchas es una cruel pesadilla.

Una treintena de actrices ha tenido el valor de contar lo que era un secreto a voces en Hollywood. Weinstein, de 65 a?os, abusaba sexualmente de las j¨®venes que quer¨ªan hacer carrera. Lo ha hecho durante dos d¨¦cadas. Las citaba en una habitaci¨®n de hotel y ah¨ª sufr¨ªan sus tocamientos bajo chantaje y, en alg¨²n caso, sus violaciones. Rose MacGowan, seg¨²n su propio testimonio, es una de las que no pas¨® por el aro. Su agente la despidi¨®. Otras muchas sufrieron la humillaci¨®n calladamente. ¡°No quer¨ªa que fingiese la humillaci¨®n, quer¨ªa que la sintiese¡±, lleg¨® a explicar sin complejos el director italiano Bernardo Bertolucci hace solo cuatro a?os sobre la violaci¨®n que sufri¨® Maria Schneider (19 a?os entonces) en la famosa escena de la mantequilla a manos de Marlon Brando (48) en El ¨²ltimo tango en Par¨ªs. Schneider cont¨® su drama mucho antes, pero nadie le hizo caso. Fue un hecho que la devast¨® emocionalmente para toda la vida.

Hoy, incluso los varones de la industria rechazan a Weinstein. Pero que haya perdurado esta ¡°m¨¢quina de abusos¡±, como lo ha calificado un productor, se debe a que la sociedad ha estado ¡ªquiz¨¢ sigue estando¡ª ciega a la trampa del glamour de la industria audiovisual, dominada por la mirada masculina y donde anida una irritante condescendencia hacia las actitudes m¨¢s machistas. Seg¨²n el ¨²ltimo informe de CIMA, la asociaci¨®n espa?ola de mujeres cineastas, el 84% de los directores y el 88% de los guionistas son hombres. En Hollywood, en 2016, solo el 7% de los directores y el 13% de los guionistas fueron mujeres. La guionista Kate Muir cuenta c¨®mo le llam¨® la atenci¨®n la primera vez que acudi¨® al Festival de Cannes ver tanto hombre enchaquetado en la alfombra roja junto a tantas mujeres explosivas. ¡°Son de pago¡±, le aclar¨® un colega.

En la industria audiovisual se registrar¨¢n seguramente tantos abusadores como en cualquier otro sector, pero su gran poder de enso?aci¨®n es dinamita contra la igualdad, pues fascinados por su envolvente lenguaje no siempre percibimos la insistencia en fijar los peores estereotipos sobre la mujer. Ellas no solo son minoritarias en la industria. Tambi¨¦n, en los papeles estelares y, relegadas al reparto de actores, abundan las putas, las tontas y las p¨¦rfidas frente a h¨¦roes valerosos e inteligentes.

La abogada de Weinstein lo ha defendido calific¨¢ndolo de ¡°viejo dinosaurio que debe aprender las nuevas maneras de comportarse¡±. Su ca¨ªda en desgracia ha llegado solo cuando la Compa?¨ªa Weinstein se asoma a la bancarrota.